Ecos del pasado

En el ¨²ltimo bar¨®metro del CIS publicado en abril el principal problema de los ciudadanos era el paro. Y con mucha diferencia con respecto al resto. Por el contrario, la preocupaci¨®n sobre la banca, sobre hipotecas y sobre desahucios era marginal. Pero, seguro que estos datos ya los conocen. Y los comparten.

Tambi¨¦n conocer¨¢n probablemente los ¨²ltimos resultados publicados por la banca, referidos al primer trimestre. Un descenso de los beneficios del 19% anual. Pero, creo que tambi¨¦n tienen importancia estos otros datos: un aumento de los dep¨®sitos del 7,1%, crecimiento del cr¨¦dito del 4,1%, un nuevo descenso del ratio de morosidad hasta el 6,1% (la cobertura se eleva en cuatro puntos hasta el 64%) y un nivel elevado de capital (Tier 1) del 12,1%.

La banca ha dejado de ser una preocupaci¨®n para la sociedad. De hecho, la banca est¨¢ combatiendo de forma firme al principal problema ahora de la sociedad. Entonces, ?por qu¨¦ sigue teniendo un problema de imagen? Seguro que muchos de ustedes mirar¨¢n atr¨¢s, pensando en otros momentos pasados de excesos, con una regulaci¨®n y supervisi¨®n muy diferente a la actual y hasta con diferente percepci¨®n ¨¦tica desde la propia sociedad. Sin embargo, la banca ahora tiene rigurosos c¨®digos ¨¦ticos, normas exigentes de comportamiento y un compromiso total con el ordenamiento jur¨ªdico. Es m¨¢s: su disposici¨®n es total con las autoridades para seguir mejorando el ordenamiento que pueda prevenir nuevas crisis.

Por cierto, algunas aclaraciones: por un lado, debemos ser muy cuidadosos al no generalizar al sector por los problemas pasados de algunas entidades; estas entidades no eran los bancos, que como saben en ning¨²n caso precisaron de ayudas p¨²blicas. La banca prima ahora por encima de todo la transparencia. Es imprescindible que tambi¨¦n la transparencia y claridad sean claves al hablar del sector.

La banca espa?ola ha llevado a cabo importantes ajustes de tama?o, se ha fortalecido en capital y se ha hecho mucho m¨¢s eficiente. Esa mayor eficiencia la perciben los clientes en su relaci¨®n con la banca, una relaci¨®n que hoy por hoy sigue siendo personal. Pero tambi¨¦n en este punto la banca ha optado por acompa?ar al cliente en su demanda de nuevos servicios digitales. El mejor servicio al cliente es algo m¨¢s que marketing. Y la competencia en el precio de estos servicios entre los bancos es tambi¨¦n sana. ?Por qu¨¦ entonces no mejora la reputaci¨®n? Frases tan obvias como que necesitamos que la banca sea rentable y bien valorada (no confundir su valor con el precio de las acciones en el mercado...infravalorada) no son bien percibidas por una parte de la sociedad. Y sin embargo, son cuestiones imprescindibles para que la banca siga cumpliendo con su labor fundamental: financiar el crecimiento y contribuir a que sea sostenible.

El pasado, pasado es. Pero, es evidente que el pasado sigue pesando de forma negativa en la imagen hoy del sector. Y el sector y sus accionistas han pagado un alto precio por ello. Aunque, lo m¨¢s llamativo, es que esta imagen mejora a medida que te acercas a los propios bancos. Cuando requieres sus servicios, como usuario y como cliente. Y estamos hablando de relaciones de medio y largo plazo. Cifras como un descenso del 30% anual en las ejecuciones hipotecarias y m¨¢s de 500.000 hipotecas renegociadas, muestran el compromiso de la banca por el cliente. Y la importancia que se asigna al compromiso social. Lamentablemente, creo que todo esto a¨²n no se percibe. Pero, la banca debe tambi¨¦n hacer un esfuerzo claro para transmitirlo. Una de sus prioridades sin duda es la transparencia. Si leen o escuchan a cualquier alto directivo de la banca valorar¨¢n hasta que punto la transparencia y la comunicaci¨®n han pasado a ser cuestiones claves para las entidades.

La banca mira al futuro. Y nuestros clientes tambi¨¦n. Ahora es cuesti¨®n de que la sociedad y nuestras autoridades cambien poco a poco la percepci¨®n sobre el sector. Y s¨®lo puede ser a mejor. Pero, esto no es s¨®lo es l¨®gico. De hecho, es necesario para que la banca siga ejerciendo su papel fundamental en la econom¨ªa, siendo eficientes en la concesi¨®n de cr¨¦ditos, protegiendo los ahorros, fomentando la innovaci¨®n y el emprendimiento. Aunque, de nuevo, todo esto ya lo saben.