Volkswagen paraliza la producci¨®n del Golf en su principal planta alemana

Volkswagen (VW), el mayor fabricante de autom¨®viles de Europa, vive desde este s¨¢bado una in¨¦dita y peligrosa crisis que le puede causar p¨¦rdidas millonarias. A causa de un contencioso con dos empresas suministradoras que dejaron de enviar sus productos a la planta de Wolfsburgo, el gigante alem¨¢n se vio obligado a anunciar que paralizar¨¢ la producci¨®n de su modelo Golf a partir de este lunes, una medida que se alargar¨¢ toda la semana. La falta de componentes tambi¨¦n ha afectado a las factor¨ªas de Braunschweig (en el norte), Zwickau (este) y Kassel (centro).

La in¨¦dita lucha de poder entre dos empresas suministradoras y Volkswagen se inici¨® el jueves pasado, cuando dos filiales del grupo Prevent, que tiene su sede en Bosnia Herzegovina, (ES Automovilgetriebe y CAR TRIM), anunciaron que dejar¨ªan de suministrar piezas mec¨¢nicas para las cajas de cambio y los materiales necesarios (tela y cuero) para la elaboraci¨®n de los asientos, respectivamente.

Aunque la empresa matriz no ha querido explicar con detalle su decisi¨®n de paralizar el suministro de sus productos a VW, un portavoz de Prevent se?al¨® que el origen del conflicto hab¨ªa que buscarlo en un contencioso legal sobre pedidos que hab¨ªan sido cancelados sin ning¨²n tipo de compensaci¨®n por el consorcio alem¨¢n.

Algunos medios alemanes sugirieron que la responsabilidad hab¨ªa que buscarla en Wolfsburg, donde los ejecutivos de VW, a causa del esc¨¢ndalo de emisiones t¨®xicas, habr¨ªan iniciado una dr¨¢stica campa?a para obligar a sus suministradores a reducir los precios de sus productos.

Cuando la planta de Wolfsburgo, la m¨¢s grande que tiene VW en Alemania, comenz¨® a ver resentida la producci¨®n de sus modelos Golf, recurri¨® a la justicia para obligar a las dos empresas suministradoras a cumplir con sus obligaciones. Un juez de la Audiencia de Braunschweig respondi¨® esta semana a favor de la demanda presentada por un procedimiento de urgencia por el fabricante y autoriz¨® al consorcio a incautarse de los componentes que precise para la producci¨®n de su modelo Golf.

Todo fue en vano. NI VW recurri¨® a la fuerza, ni las empresas suministradoras se dejaron intimidar por la medida jur¨ªdica. As¨ª que el gigante del motor, que asegur¨® que no quiere llegar a tomar medidas tan dr¨¢sticas como las que le permite la justicia, tendr¨¢ que reducir la jornada laboral, algo que afectar¨¢ a unos 20.000 trabajadores en cinco plantas.

Seg¨²n expertos citados por varios medios germanos, si no resuelve el conflicto podr¨ªa perder cada semana unos cien millones. Tambi¨¦n es un golpe para los distribuidores, que a¨²n no logran entender que el gigante dependiera de un solo proveedor para su modelo m¨¢s exitoso. Wolfsburgo fabric¨® en 2015 815.000 veh¨ªculos, de los cuales casi medio mill¨®n fueron Golf.

¡°Los proveedores est¨¢n llevando a cabo un juego muy sucio¡±, se?al¨® el presidente del comit¨¦ de empresa de VW, Bernd Osterloh, en un intento de lavar la imagen del consorcio. ¡°La reducci¨®n de la jornada laboral es una decisi¨®n muy dif¨ªcil y los que est¨¢n internado hacer negocios a espaldas de los trabajadores son insensibles y asociales¡± dijo el dirigente sindical.

La paralizaci¨®n de la producci¨®n del modelo Golf, al parecer tambi¨¦n tiene otros motivos. Seg¨²n el peri¨®dico sensacionalista Bild, la demanda del famoso modelo de VW est¨¢ sufriendo un impacto mayor al que se pensaba a causa del esc¨¢ndalo de la manipulaci¨®n de los motores del grupo alem¨¢n. Seg¨²n el rotativo, los ejecutivos de VW ya habr¨ªan planificado suspender la producci¨®n del Golf en la semana del 4 al 7 de octubre y del 19 al 22 de diciembre pr¨®ximo.