La rentable paz laboral del sector del autom¨®vil
Los sindicatos reclaman un pacto sectorial que garantice unas condiciones dignas
Durante los ¨²ltimos lustros, la evoluci¨®n de la industria automovil¨ªstica en Espa?a ha sido un caso de estudio internacional. Son varios los factores que han contribuido a su ¨¦xito y a su r¨¢pida recuperaci¨®n tras la crisis econ¨®mica, pero hay uno que destaca: el papel desempe?ado por los trabajadores. El alto nivel de sindicalizaci¨®n del sector, con un porcentaje muy elevado de trabajadores afiliados, no ha sido un obst¨¢culo sino la mejor garant¨ªa de cumplimiento de los acuerdos con las empresas. Gracias a su compromiso, los sindicatos han podido ser exigentes con la direcci¨®n a la hora de cumplir sus promesas, como las de incorporar la producci¨®n de nuevos modelos o mejorar los beneficios sociales.
Instrumentos como la ampliaci¨®n de la jornada anual, la extensi¨®n de los periodos vacacionales, bolsas de horas, horas extraordinarias, expedientes de regulaci¨®n de empleo suspensivos, jubilaciones parciales, contratos eventuales o contratos de relevo han sido de uso ordinario en las negociaciones de los ¨²ltimos a?os, sobre todo en las plantas de los fabricantes, que se han extendido en muchos casos a las de componentes.
Los trabajadores temen que haya un gran proceso de deslocalizaci¨®n de la industria
Para los sindicatos se trata de un frente com¨²n, ya que seg¨²n el responsable de automoci¨®n de UGT, Mariano Cerezo, ¡°en Sernauto tratan de tener m¨¢rgenes para poder ofertar en mejores condiciones y en Anfac [la patronal de los fabricantes] tratan de conseguir tambi¨¦n precios m¨¢s bajos de los proveedores¡±.
¡°Nos encontramos, adem¨¢s, en un momento muy convulso ya que se est¨¢n planteando ahora componentes de los modelos que saldr¨¢n de las f¨¢bricas a partir de 2018¡±, a?ade Isabel Fern¨¢ndez, responsable de CC OO. ¡°Aunque haya m¨¢s modelos de producci¨®n en Espa?a, puede que eso no se traduzca en el aumento correspondiente del empleo en los proveedores¡±, a?ade la sindicalista. En cuanto a las razones, destaca, adem¨¢s de la repercusi¨®n de las nuevas tecnolog¨ªas, las deslocalizaciones, como las que han realizado a Portugal, con salarios m¨¢s bajos, algunos grupos como Antolin o Faurecia, a pocos kil¨®metros de la planta del grupo PSA en Vigo. T¨¢nger es otro de los destinos de las deslocalizaciones m¨¢s pr¨®ximas.
A pesar del aumento del empleo, hay 40.000 puestos menos que antes del par¨®n
Seg¨²n Cerezo, ¡°hay una norma que consiste en que cuando a un proveedor se le adjudica una pieza est¨¢ obligado a garantizar al ensamblador una mejora anual del 5%. Y eso repercute en la calidad del empleo. Se trata de obtener m¨¢s por menos, sin contraprestaciones. Y a eso le llaman m¨¢s productividad. Supone trabajar mucho m¨¢s deprisa, con las mismas condiciones o peores, y eso no es una garant¨ªa de futuro¡±.
Este verano CC OO public¨® un informe del sector de componentes en el que tras reconocer el crecimiento del empleo en 2015, record¨® que ¡°desde que estall¨® la crisis se han eliminado 40.000 puestos de trabajo, por lo que a este ritmo, se necesitar¨¢n casi siete a?os para recuperar el empleo perdido¡±. Por su parte, en UGT tratan de ¡°convencer¡± a Sernauto de las ventajas de un convenio sectorial que garantice unas m¨ªnimas condiciones de igualdad y un puesto digno. Y eso se consigue, seg¨²n Cerezo ¡°evitando que se acuchillen en la pelea por adjudicarse los productos como ocurre en la actualidad¡±. Y cita un ejemplo: Lear acaba de perder el suministro de asientos para el nuevo Corsa en la planta de Opel en Figueruelas (Zaragoza) que pasa a Johnson Control. ¡°?C¨®mo van a contratar? ?En qu¨¦ condiciones?¡± se pregunta. ¡°Sabemos que es un aspecto importante para conseguir el producto y mejorar la competitividad, pero si el coste laboral es s¨®lo el 10% del total, queda un 90% para optimizar recursos y no centrarse s¨®lo en los salarios¡±.
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