Los cad¨¢veres industriales de la crisis
De los 5.000 pol¨ªgonos, muchos est¨¢n vac¨ªos o a menos del 50% de ocupaci¨®n
Desfile de coches oficiales, sonrisas y promesas en un mar de asfalto y farolas. El alcalde inaugura un nuevo pol¨ªgono industrial llamado a ser el revulsivo de la localidad. Tan solo est¨¢ urbanizado, a¨²n no hay empresas, pero, seg¨²n promete, llegar¨¢n muy pronto. Corre la primera d¨¦cada del 2000 y no hay ciudad espa?ola que no se apresure a construir su pol¨ªgono industrial, empresarial o tecnol¨®gico. Jerez cre¨® su Parque Cient¨ªfico Tecnol¨®gico Agroindustrial (PCTA) en 2007, llamado a diversificar la econom¨ªa en la provincia de C¨¢diz. Sin embargo, el pasado 4 de noviembre materializ¨® su fracaso: los juzgados lo declaraban en concurso de acreedores. De sus 300.674 metros cuadrados, menos de la mitad est¨¢n ocupados por empresas. El PCTA es uno de esos parques empresariales creados al calor de la burbuja inmobiliaria y ca¨ªdos tras la crisis. No es el ¨²nico, en Espa?a hay unos 5.000 pol¨ªgonos, muchos de ellos est¨¢n vac¨ªos o con una ocupaci¨®n menor al 50%.
As¨ª lo reconoce el presidente de la Coordinadora Espa?ola de Pol¨ªgonos Empresariales (CEPE), Alejandro S¨¢enz de San Pedro, aunque no puede dar una cifra exacta: ¡°Nadie se ha preocupado en saber cu¨¢nto suelo industrial libre hay hoy en d¨ªa¡±. En la asociaci¨®n que aglutina a empresarios asentados en estos espacios llevan a?os reclamando un censo al Ministerio de Industria, de ah¨ª que se hayan lanzado ellos mismos a realizarlo, en colaboraci¨®n con diputaciones y entidades locales. De entrada, saben que ¡°hay mucho suelo libre¡±.
Tan solo la Entidad P¨²blica Empresarial de Suelo, Sepes, oferta en su web un total de 5,6 millones de metros cuadrados, sin contar con los metros que est¨¦n en manos de otras administraciones o bajo titularidad privada. El presidente ejemplifica casos de parques industriales con ¡°40 parcelas y, tan solo, siete ocupadas o pueblos con pol¨ªgonos que son casi m¨¢s grandes que el propio centro hist¨®rico de la localidad¡±. ¡°Con el boom inmobiliario se nos fue la cabeza a todos¡±, reconoce S¨¢enz de San Pedro. Y el suelo industrial no fue una excepci¨®n. ¡°Nadie parec¨ªa saber lo que estaba pasando, est¨¢bamos tan emborrachados del ¨¦xito que no nos dimos cuenta¡±, reconoce el presidente de CEPE.
Los parques tecnol¨®gicos s¨ª triunfan
En diversos puntos de la geograf¨ªa espa?ola proliferaron suelos industriales en forma de pol¨ªgonos, parques o espacios tecnol¨®gicos; la mayor parte de ellos, impulsados por iniciativas p¨²blicas.
La debilidad de los pol¨ªgonos industriales durante la crisis, tiene una excepci¨®n: los parques tecnol¨®gicos. De hecho, el concurso de acreedores del Agroindustrial (PCTA) de Jerez es una excepci¨®n, seg¨²n reconoce el presidente de la Asociaci¨®n de Parques Cient¨ªficos y Tecnol¨®gicos de Espa?a, Felipe Romeras. En Espa?a existen hoy 49 parques tecnol¨®gicos, frente a los 32 que hab¨ªa en 2008. En este lapso se ha experimentado un crecimiento de las empresas instaladas en estos espacios (de 4.592 a 7.736) y en trabajadores (de 127.559 a 158.950 empleados). En cambio, en estos siete a?os, la asociaci¨®n ha perdido solo siete socios (incluido el PCTA).
Romeras cree que esta tendencia positiva se debe a que ¡°las empresas de los parques tecnol¨®gicos suelen ser innovadoras y, durante la crisis, apostaron mucho por procesos de internacionalizaci¨®n¡±. Con todo, el presidente reconoce que ha habido ¡°una contracci¨®n en los proyectos de futuros parques tecnol¨®gicos previstos¡±.
De 2008 a 2015, 16 proyectos que se han quedado parados por la crisis, a mayor parte promovidos por entidades p¨²blicas. Romeras espera que, en el futuro, se reactiven muchos de ellos y surjan nuevas iniciativas. Una de ellas es la expansi¨®n del Parque Tecnobah¨ªa, ubicado en El Puerto de Santa Mar¨ªa (C¨¢diz). La Junta pretende convertirlo en el Parque Tecnol¨®gico del Sur, diversificarlo (ahora est¨¢ enfocado principalmente a la industria aeron¨¢utica) y ampliar sus sedes por la provincia incluyendo, entre otros espacios, al desaparecido PCTA.
En localidades como Onda (Castell¨®n) se llegaron a levantar hasta 12 espacios industriales, como reconoce su teniente de alcalde, ?ngel Badenas. En total, suponen ¡°unos 10 millones de metros cuadrados de suelo¡±, explica el edil, en una poblaci¨®n de algo m¨¢s de 25.200 habitantes. ¡°Tuvimos unos a?os de crecimiento de poblaci¨®n por la implantaci¨®n de empresas en la zona¡±, reconoce Badenas. De hecho, los 12 pol¨ªgonos llegaron a tener el 60% de su suelo ocupado, hoy no llegan a la mitad.
Peor es la situaci¨®n de El Puerto de Santa Mar¨ªa (C¨¢diz). A escasos 20 kil¨®metros del PCTA de Jerez, El Puerto dispone de 2,5 millones de metros cuadrados en su Parque Empresarial Las Salinas. De ellos, solo el 30% est¨¢ ocupado, aunque el 90% se vendi¨® a especuladores que mantienen los terrenos vac¨ªos. Su alcalde, David de la Encina, se lamenta de la ¡°frustraci¨®n¡± que produce esta situaci¨®n. ¡°Se lanz¨® como un aut¨¦ntico fil¨®n y, al final, solo lo fue para algunos especuladores¡±, denuncia.
Hoy, Las Salinas es un mar de calles y farolas sin edificios que, durante la noche, dibuja un aspecto fantasmag¨®rico desde la cercana autov¨ªa A-4 que comunica el pol¨ªgono con Jerez. All¨ª, en el Ayuntamiento reconocen que disponen 600.000 metros cuadrados de suelo industrial en diferentes espacios, la mayor¨ªa en el PCTA y la cercana Ciudad del Transporte, tambi¨¦n a medio ocupar. A eso habr¨ªa que sumar los metros cuadrados disponibles en el resto de pol¨ªgonos de la Bah¨ªa de C¨¢diz. Mucho suelo y poco inter¨¦s.
Un quebradero de cabeza para los Ayuntamientos
Desiertos industriales que suponen un importante quebradero de cabeza para muchos ayuntamientos. ¡°Una vez construidos, fueron recepcionados por los municipios que se vieron con grandes superficies que mantener¡±, reconoce el presidente de CEPE. Recogida de basuras, mantenimiento urbano, alumbrado o limpieza viaria son algunas de las responsabilidades a las que tienen que hacer frente los consistorios en estos terrenos. Todo ello con unos recursos limitados. Los municipios o no tienen impuestos que cobrar por suelos sin propietario o ¡° ¨¦stos se han reducido por el cierre de las empresas¡±, como explica Badenas. De ah¨ª que el abandono que sufren estos espacios sea una de las mayores preocupaciones de CEPE, como explica s: ¡°Entendemos que, ante una situaci¨®n de crisis, los ayuntamientos tengan que priorizar el mantenimiento de las zonas residenciales, por encima de las industriales¡±, reconoce S¨¢enz.
?Y qu¨¦ hacer con ese suelo industrial? S¨¢enz lo tiene claro: ¡°La ¨²nica forma de darle uso es informar de su existencia para motivar la llegada de inversores¡±. De ah¨ª que en CEPE se muestren deseosos de reunirse con Luis de Guindos, ministro de Econom¨ªa e Industria del nuevo Gobierno de Rajoy. Pretenden que el Ministerio apoye su censo de suelo industrial y la creaci¨®n de una marca de calidad de los pol¨ªgonos. ¡°Ser¨ªa como la bandera azul de las playas y servir¨ªa como herramienta para atraer empresas¡±, reconoce S¨¢enz. Desde CEPE esperan que esa v¨ªa de la informaci¨®n y la excelencia sea la salida para volver a insuflar vida a los cad¨¢veres industriales que dej¨® la crisis y que hoy languidecen a las afueras de las ciudades.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.