Los sindicatos salen a la calle para a?adir presi¨®n social a la negociaci¨®n

CC OO y UGT han convocado para ma?ana en Madrid la primera gran movilizaci¨®n sindical de la legislatura. Ser¨¢ la gran puesta en escena de la que, dicen abiertamente, va a ser su estrategia para lograr sus objetivos en los pr¨®ximos a?os: movilizarse para arrancar en las negociaciones el fin de la reforma laboral, la subida de salarios o m¨¢s dinero para las pensiones. Pretenden combinar el pulso en la calle con el guante blanco en las conversaciones para aprovechar la debilidad parlamentaria del Gobierno.

Creen que ha llegado el momento de salir de posiciones defensivas. No solo porque ya no hay mayor¨ªas absolutas, sino porque la recesi¨®n (y el miedo social que le acompa?a) ha quedado atr¨¢s. ¡°Estamos en esa fase en que la gente percibe que la econom¨ªa ha crecido, que las desigualdades se han incrementado, que primero se le exigieron o se le impusieron sacrificios, pero ahora no reciben los beneficios del crecimiento econ¨®mico. En fin, el caldo de cultivo del conflicto social fuerte est¨¢ servido. Ser¨ªa conveniente que otros actores (Administraciones p¨²blicas, Gobierno, partidos) leyeran tambi¨¦n las cosas de forma adecuada para evitarnos un escenario de conflicto social indeseable, porque lo que necesitamos es apuntalar el crecimiento econ¨®mico, pero repartir sus beneficios entre m¨¢s gente¡±, se?ala el secretario general de CC OO, Ignacio Fern¨¢ndez Toxo, en una entrevista con este diario el pasado jueves.

Toxo: ¡°El caldo de cultivo de un conflicto social fuerte est¨¢ servido¡±

A su lado, sentado en su propio despacho, est¨¢ Pepe ?lvarez, l¨ªder de UGT desde marzo, que ma?ana se estrena al frente de su organizaci¨®n en una convocatoria de este estilo: ¡°La movilizaci¨®n tiene que facilitar que esta legislatura sea la de retorno de derechos y de cambios de pol¨ªticas econ¨®micas. Esta movilizaci¨®n no est¨¢ pensada para ser flor de un d¨ªa, sino el inicio de un proceso de que ir¨¢ cogiendo fuerza en funci¨®n de la propia situaci¨®n pol¨ªtica y econ¨®mica que se vaya visualizando¡±.

Visto as¨ª, ?la manifestaci¨®n del domingo es un term¨®metro? ?Si no encuentra eco, puede poner en riesgo su estrategia? ¡°No nos jugamos a una manifestaci¨®n ni a una concentraci¨®n este proceso de movilizaciones¡±, rechaza ?lvarez.

La convocatoria de la manifestaci¨®n se hizo p¨²blica un d¨ªa despu¨¦s de que Toxo y ?lvarez se reunieran con Mariano Rajoy en La Moncloa, el pasado 24 de noviembre. No les gust¨® la respuesta que les dio el presidente del Gobierno a sus peticiones: ¡°Hab¨ªa l¨ªmites y restricciones muy fuertes a la declaraci¨®n de voluntad del di¨¢logo social que imped¨ªan que nuestras reivindicaciones tuvieran cabida en los presupuestos o en reformas legislativas¡±.

?lvarez: ¡°No nos jugamos el proceso de movilizaci¨®n en una manifestaci¨®n¡±

Sin embargo, una semana despu¨¦s el Ejecutivo pact¨® con el PSOE una subida del salario m¨ªnimo a 750 euros en 2017 y un incremento de impuestos directos a las empresas de casi 5.000 millones. ?Perd¨ªa sentido entonces la convocatoria?

¡°Un 8% parece mucho, pero lo que deja ver con claridad es en qu¨¦ medida se hab¨ªa quedado el SMI en los ¨²ltimos a?os. Nosotros ten¨ªamos un acuerdo con el Gobierno de Zapatero para llegar a los 800 euros mensuales en 2008. Estamos en 2016 con 655 euros. La econom¨ªa espa?ola se lo puede permitir. Y los impuestos, era el m¨ªnimo imprescindible para las comunidades aut¨®nomas, que est¨¢n asfixiadas, y que necesitan ingresos de forma urgente. Esto no viene a paliar los efectos de lo hecho en los ¨²ltimos a?os¡±, justifica Toxo, de CC OO.

¡°Hay un fondo pol¨ªtico que explica que, tal y como se han tomado estas medidas, la movilizaci¨®n es una condici¨®n necesaria esta legislatura¡±, ahonda ?lvarez, de UGT, ¡°creo que la simple convocatoria de las negociaciones ha empezado a obligar a todos¡±.

¡ª?Est¨¢ diciendo que ha sido su convocatoria la que ha obligado al Gobierno a mover ficha?

¡ªTanto no me atrever¨ªa a decir, pero no tengo ninguna duda de que entre el Gobierno y el PSOE este es un elemento que ha hecho que las cosas se empiecen a mover¡ª prosigue ?lvarez.

Pero la manifestaci¨®n de ma?ana tambi¨¦n tiene como destinataria a la CEOE, con la que ambas centrales est¨¢n negociando el aumento de sueldos para 2017. Reclaman un incremento entre el 1,8% y el 3%. Una subida que los partidarios de la moderaci¨®n salarial ven excesivo y que podr¨ªa frenar el crecimiento de empleo, que ahora va en paralelo al incremento econ¨®mico, el 3,2%. ¡°Hay datos que complementan esos. La Seguridad Social no recibe ingresos por todo el empleo que se genera. Por otra parte, con un salario m¨ªnimo de 655 euros condenamos a muchos trabajadores a vivir con un empleo que no les permite salir de la pobreza. Eso no es un crecimiento sano¡±, expone Toxo.

¡°No vamos a entrar en el dilema individual de si un trabajador debe aceptar un sueldo de 500 euros por 12 horas a la semana. Pero colectivamente no es la salida que necesita nuestro pa¨ªs. Adem¨¢s, la forma en que se han distribuido las rentas ha tenido efectos perversos en el reparto de la riqueza. Para nosotros es importante crear empleo, pero tambi¨¦n es importante que sea de calidad y que permita a los trabajadores no seguir siendo pobres¡±, incide ?lvarez.

Precisamente en la negociaci¨®n sobre los sueldos de 2017 con la patronal, UGT y CC OO tuvieron una evidente discrepancia p¨²blica hace m¨¢s de un mes. Ya se resolvi¨®. Tambi¨¦n hay diferencias en sus propuestas para aumentar los recursos de la Seguridad Social.

?Hay riesgo de que esto vaya a m¨¢s? ¡°A veces no discutimos sobre lo que queremos sino sobre c¨®mo planteamos lo que queremos. Hay un objetivo com¨²n que est¨¢ muy por encima. La UGT no concibe el futuro del pa¨ªs desde el punto de vista sindical sin unidad de acci¨®n¡±, zanja ?lvarez. ¡°Desde enfoques que inicialmente puedan aparentar diferentes vamos a tener la capacidad suficiente, al menos en lo fundamental ¡ªy las pensiones lo son¡ª de estar de acuerdo en el momento definitorio¡±, cierra Toxo.