?Cu¨¢nto ha subido la compra? 15 a?os llenando el carro en euros
Una cesta de la compra tipo realizada por EL PA?S en 2001 se ha encarecido un 58% hasta 2016, por encima del crecimiento oficial de los salarios y la inflaci¨®n
El 1 de enero de 2002, Espa?a se levant¨®, si es que se hab¨ªa acostado, con una nueva moneda. El euro comenzaba ese d¨ªa a circular -era oficial desde 1999- en sustituci¨®n de la peseta, con la que convivir¨ªa hasta el 28 de febrero a un cambio diab¨®lico: un euro equival¨ªa a 166,386 pesetas. Las autoridades se esforzaban en facilitar la operaci¨®n a los consumidores -6 euros son 1.000 pesetas, nos martilleaban- y en tranquilizarlos cat¨®licamente -¡°tanto monta, monta tanto, la peseta como el euro¡±. ¡°Los clientes se f¨ªan¡±, le dec¨ªan a este redactor, entonces becario, los dependientes de un centro comercial el 5 de enero, primera prueba de fuego de la nueva moneda con los regalos de Reyes. Algo de esa confianza se hab¨ªa erosionado un a?o despu¨¦s. Pese a que los datos oficiales situaban la inflaci¨®n en el 4%, exist¨ªa una impresi¨®n generalizada de que la moneda europea hab¨ªa contribuido, redondeo de c¨¦ntimos mediante, a que los precios se disparasen muy por encima del IPC.
Sin ¨¢nimo cient¨ªfico y sin cuestionar los datos oficiales, un ejercicio llevado a cabo por EL PA?S llegaba a una conclusi¨®n similar. Un a?o despu¨¦s de la entrada en circulaci¨®n del euro, un carrito de la compra pensado para el consumo semanal de una familia de cuatro miembros, cargado con 62 productos de alimentaci¨®n, higiene y limpieza se hab¨ªa encarecido un 18%. De los 170,42 euros de una compra realizada en diciembre de 2001 se hab¨ªa pasado a 201,12 un a?o m¨¢s tarde. Hoy, 15 a?os despu¨¦s, con una pavorosa crisis a¨²n no superada del todo entre medias, con alg¨²n a?o de inflaci¨®n negativa, el mismo carrito, comprado en el mismo establecimiento, un supermercado de una gran cadena en el Campo de las Naciones (Madrid), cuesta un 58% m¨¢s. No todo se ha encarecido en la misma medida. Si se tiene solo en cuenta la alimentaci¨®n, la subida se queda en el 38%.
?Eso es mucho o poco? Como muchas otras cosas, depende del cristal con que se mire. No obstante, mirando a trav¨¦s de los cristales habituales en este campo, el del IPC o el de los salarios, la conculsi¨®n es que es mucho.
Por ejemplo, al cierre de 2001, el salario anual medio -ojo, no quiere decir que sea el m¨¢s habitual- fue de 16.561,4 euros, en realidad 2.755.585 pesetas, seg¨²n la parte de salarios de la Encuesta de Coste Laboral elaborada anualmente por el Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE). En 2015, el ¨²ltimo a?o con datos disponibles, el salario medio ascend¨ªa a 22.850,57 euros, un 38% m¨¢s que en 2001.
Si nos ponemos las gafas de la inflaci¨®n, el resultado es parecido: entre enero de 2002 y noviembre de 2016, los precios se han incrementado un 36%, seg¨²n el INE, 22 puntos porcentuales menos que nuestro carro de la compra.
Diferentes subidas
Como era de esperar, la gran mayor¨ªa de los art¨ªculos del carro han subido de precio, pero las proporciones var¨ªan. As¨ª, destaca el incremento de precios de la carne y el pescado frescos, que hoy son un 77,6% m¨¢s caros. En buena medida por un art¨ªculo, el lenguado. A finales de 2001 se incluy¨® en la compra una bandeja de filetes a 8,96 euros el kilo. En 2016 no estaba disponible esa bandeja, por lo que fue sustituida por un kilo de lenguados frescos a 55,95 euros el kilo, un incremento del 524%. Si lo eliminamos de la ecuaci¨®n, la subida del pescado se queda en el 15%, muy inferior al 40% que consta en los datos del INE. En el mismo periodo, la carne se ha encarecido oficialmente un 30,7%, apenas un punto menos que en nuestra compra. En lo que se refiere a la fruta y la verdura, nuestra selecci¨®n es hoy un 31,7% m¨¢s cara que en 2001 mientras que, seg¨²n el ente estad¨ªstico, estos cap¨ªtulos han subido m¨¢s de un 60% desde entonces.
En cualquier caso, si eliminamos los productos de aseo y limpieza y dejamos solo los de alimentaci¨®n, el carro ha recorrido el mismo pasillo que los datos oficiales: una subida del 38,33%, muy cercana al 39,85% oficial. De hecho, la partida que m¨¢s se ha encarecido en el carro de la compra es la de limpieza, un 86,5%, mientras que los productos de higiene acumulan una subida del 41,9%.
Tambi¨¦n hay productos que bajan, como las manzanas, las zanahorias, la sal, las compresas, la carne de cerdo o las aceitunas rellenas de anchoa.
El ejercicio tuvo lugar el pasado 28 de diciembre y, salvo un pu?ado de excepciones -los flanes Yoplait ya no existen- sustituidas por productos lo m¨¢s similares posible, la cesta est¨¢ compuesta por los mismos art¨ªculos. En el caso de que los envases hayan cambiado, se ha calculado el precio proporcionalmente. Ha ocurrido con las madalenas -la bolsa original conten¨ªa 12 y la de hoy, 10-, con el lavavajillas o con el detergente en pastillas. El champ¨² ha sido sustituido por un envase de la misma capacidad de una marca de precio medio, igual que la leche.
De hecho, 15 a?os son suficientes no solo para que desaparezcan algunas marcas o cambien los tama?os y colores de los envases, sino para que cambien, a veces radicalmente, las costumbres. Tanto entonces como ahora se han dejado de lado las marcas blancas, pero si esa misma familia imaginaria de 2002 hiciera la compra hoy, a buen seguro incluir¨ªa un buen porcentaje de ellas. Tambi¨¦n incluir¨ªa, seguramente, alg¨²n que otro producto congelado, ausentes en el carro original, as¨ª como alg¨²n plato preparado. Y, signo de los tiempos, nuestra familia podr¨ªa optar esa tarde por ver alg¨²n estreno navide?o de cine tras haber ordenado la compra por Internet, servicio que no exist¨ªa en 2001. Eso s¨ª, la entrada les saldr¨ªa un 39,8% m¨¢s cara que hace 15 a?os.
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