El Supremo reabre la pugna familiar por el control de Eulen
La compa?¨ªa celebra este martes una junta de accionistas para repetir una votaci¨®n de 2011 pero la herencia del patriarca sigue sin repartirse
El Grupo Eulen celebrar¨¢ una junta general de accionistas este martes en una notar¨ªa. Como ya es habitual en esta compa?¨ªa de servicios, no se espera una reuni¨®n tranquila. La empresa familiar lleva desde 2011 enfrascada en una pugna por el control. La muerte en noviembre de 2015 de David ?lvarez, el patriarca, no ha calmado las aguas. Y la junta de este martes viene cargada con una novedad: el Tribunal Supremo anul¨® el pasado 24 de noviembre la junta general de accionistas del 20 de junio de 2011. Debe repetirse y votar lo que entonces se propuso, clave para el posterior conflicto. Pero la herencia de ?lvarez sigue sin resolverse. Y no est¨¢ claro con qu¨¦ reparto accionarial deben abordarse esas votaciones.
La batalla familiar por Eulen es larga y est¨¢ salpicada de un embrollo judicial y societario que, lejos de terminar, sigue su curso. El origen est¨¢ en 2010. David ?lvarez hab¨ªa dejado en manos de sus hijos las riendas de la compa?¨ªa de servicios. La familia ten¨ªa, adem¨¢s, una sociedad llamada El Enebro donde aglutinaba el control de otras de sus empresas estrella: las bodegas de Vega Sicilia. Tras un desencuentro, ?lvarez se atrinchera a los mandos de Eulen con el apoyo de dos de sus hijos, Mar¨ªa Jos¨¦ y Jes¨²s David. Se forma otro frente con sus otros cinco hijos, que pasan a ser conocidos como los d¨ªscolos. Y estos se hacen fuertes en El Enebro, es decir, Vega Sicilia.
El conflicto se enquista entre idas y venidas a los tribunales. All¨ª discuten si el patriarca puede ejercer su poder sobre las acciones que fueron propiedad de su esposa fallecida o pertenece a sus hijos. David ?lvarez muere en 2015. Pero el conflicto no. Su hija fiel, Mar¨ªa Jos¨¦, es la actual presidenta y tiene el control a trav¨¦s de una sociedad, Daval, en la que ella y su padre depositaron sus acciones.
La petici¨®n de nulidad que ha avalado el Supremo sobre la junta de 2011 se fundamentaba en que el orden del d¨ªa no inclu¨ªa un complemento propuesto por El Enebro, que entonces contaba con el 5% del capital social. En la junta de accionistas de 2011, entre otras cosas, se realizaron compras de acciones de autocartera y se aprobaron cambios en los estatutos. Con esos cambios despu¨¦s se cre¨® Daval, la sociedad donde est¨¢ el poder de Eulen aglutinado.
Una herencia pendiente
?C¨®mo se votar¨¢n los acuerdos de la junta de 2011? Si se usa el reparto de la propiedad que exist¨ªa en aquel momento, David ?lvarez ten¨ªa un 47,55% de las acciones; Mar¨ªa Jos¨¦, un 3,56%; Jes¨²s David, un 4,29%, mientras el resto estaba en manos de los otros cinco hijos. Sin embargo, David ?lvarez ha muerto. ?Qui¨¦n tiene en su poder todos sus votos? El reparto de la herencia no se ha llevado a cabo todav¨ªa, 15 meses despu¨¦s de la muerte del patriarca. Y ese ser¨¢ el primer escollo de la junta de este martes.
Los hijos d¨ªscolos defienden que la herencia de David ?lvarez debe conceder a todos sus hijos al menos la parte leg¨ªtima, con lo que los d¨ªscolos obtendr¨ªan el 11,3% de Eulen. Seg¨²n sus cuentas, sumado a su paquete de acciones actual, les dar¨ªa la mayor¨ªa accionarial en Eulen. Pero no es oficial. Y Maria Jos¨¦ ?lvarez podr¨ªa querer hacer valer todas las acciones en manos de Daval, la sociedad que compart¨ªa con su padre. Pero esta no exist¨ªa en 2011, cuando se celebr¨® la junta que ahora se repite. Nuevo pulso judicial a la vista.?
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.