¡°Deber¨ªa estar prohibido que alguien con menos de 30 a?os compre una casa¡±

Cuando Fernando Encinar (?vila, 1969) fund¨® Idealista.com a principios del a?o 2000, estallaba la burbuja de las puntocom. Junto a su hermano Jes¨²s Encinar y a su tercer socio, C¨¦sar Oteiza, capearon el temporal.? El portal inmobiliario l¨ªder en espa?ol alcanz¨® el equilibrio financiero (break even) en enero de 2003. Desde entonces, y a pesar de que la crisis econ¨®mica y el estallido de la burbuja inmobiliaria espa?ola les golpearon de lleno, no han tenido ni un mes con p¨¦rdidas ¡ªen enero de 2017 tuvieron cerca de 40 millones de visitas¡ª, recalca Encinar.

En sus oficinas centrales de Madrid, el jefe de estudios de Idealista tiene su puesto de trabajo junto con el equipo de comunicaci¨®n y de Idealista News, el medio de comunicaci¨®n que lanzaron en 2007 para informar sobre el mercado de la vivienda y econom¨ªa. Su hermano Jes¨²s se sienta con el equipo de tecnolog¨ªa. No quieren despachos, prefieren ser testigos de lo que sucede en el d¨ªa a d¨ªa del mercado inmobiliario junto al resto del equipo. Un sector que, en el caso de Espa?a, vuelve a crecer tras ocho a?os de par¨¢lisis.

Pregunta. En 2016 se vendieron 403.866 casas, la mayor alza interanual desde 2007. ?Corren buenos tiempos para el mercado de la compraventa de vivienda en Espa?a?

Respuesta. Nunca llovi¨® que no escampara. En alg¨²n momento ten¨ªamos que empezar a tener visos de normalizaci¨®n, que no de recuperaci¨®n. Durante el primer semestre de 2014 la curva de desempleo empieza a bajar de manera constante y comienzan a generarse puestos de trabajo. Miles de personas pasan de la incertidumbre a la certidumbre y empiezan a alquilar, lo que se ha notado en los precios del alquiler en 2015 y en 2016. En el mercado de la compraventa de vivienda ha habido un efecto domin¨® puesto que muchos compradores estaban esperando a que los precios se ajustaran y a que la recuperaci¨®n econ¨®mica empezase a ser real. Por todo ello, llegamos a las cifras de venta de vivienda del a?o pasado.

P. ?Estamos ante un nuevo boom del sector inmobiliario?

R. No. Es verdad que hay productos inmobiliarios que est¨¢n subiendo de precio en determinadas zonas donde ha habido una mayor creaci¨®n de empleo y en los que existe un inter¨¦s de los inversores por comprar activos inmobiliarios y sacarlos al mercado del alquiler. Pero en buena parte del estado espa?ol siguen bajando los precios de las viviendas tanto para su compra como para alquilarlas.

P. Se ha vuelto a abrir el grifo de las hipotecas, pero surge la duda de c¨®mo puede afectar al sector la sentencia de las cl¨¢usulas suelo.

R. Los bancos han tenido que enfrentarse a esta sentencia y lo que probablemente har¨¢n ser¨¢ encarecer las hipotecas a futuro. Las entidades bancarias tienen que cubrir todos los escenarios imprevistos y lo hacen a base de aumentar porcentajes de comisi¨®n. El que ya tenga una hipoteca, genial, pero los que quieran solicitarla tendr¨¢n que enfrentarse a unas condiciones m¨¢s duras y estrictas.

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P. ?Alquilar est¨¢ de moda?

R. Actualmente hay un equilibrio entre comprar y alquilar. He vivido de alquiler 22 a?os, he sufrido la estigmatizaci¨®n del porqu¨¦ no compraba una casa y la situaci¨®n actual me encanta. Por ejemplo, en Madrid, hemos pasado de tener un 9% del parque de viviendas en alquiler en el a?o 2000 a contar con un 26% aproximadamente. Y la demanda sigue creciendo. La crisis econ¨®mica ha dejado una huella en la corteza mental de la gente, muchas personas piensan que comprarse una casa es una inversi¨®n de alto riesgo. Hay otras que quieren comprar pero no pueden. Y luego est¨¢n miles de j¨®venes que comparten piso y ni se plantean comprar casa. Deber¨ªa estar prohibido que alguien con menos de 30 a?os se compre una casa.

P. En ciudades como Madrid y Barcelona hay una alt¨ªsima demanda y se habla de una burbuja de los precios de alquiler. ?Qu¨¦ opina?

R. No existe tal burbuja. Lo que pasa es que hemos estado cinco o seis a?os en los que precios de las viviendas en alquiler no han subido, se han mantenido o han bajado. Pero a partir de 2015, al calor de la bajada del desempleo y de que hay m¨¢s gente que puede irse de alquiler, los precios se sit¨²an al nivel de una situaci¨®n de recuperaci¨®n econ¨®mica. Lo que s¨ª que hay es una demanda enorme en ambas ciudades. Un anuncio de alquiler en Madrid o Barcelona puede durar dos d¨ªas desde que se publica en Idealista.

P. ?En qu¨¦ medida ha afectado a la cuenta de resultados de Idealista la crisis econ¨®mica?

R. La crisis nos pill¨® como a todos. En 2008, en cuesti¨®n de meses, se cayeron un tercio de nuestros ingresos. Como hab¨ªamos vivido la burbuja de las puntocom y est¨¢bamos plenamente convencidos de que hab¨ªa una burbuja inmobiliaria en Espa?a, intu¨ªamos la que se nos pod¨ªa venir encima y ajustamos al m¨¢ximo nuestra capacidad de gasto. No tener deuda ha sido una de las razones de nuestra supervivencia. Adem¨¢s, en paralelo, hemos ido lanzando Idealista en Italia y Portugal porque las crisis tambi¨¦n son momentos de oportunidades.

P. ?Cu¨¢les son sus principales l¨ªneas de negocio?

R. Nuestra fuente de ingresos m¨¢s importante son los cientos de miles de anuncios de compraventa y alquiler de vivienda que se publican en Idealista. Luego est¨¢n los servicios a?adidos como Idealista hipotecas, un broker hipotecario online que compramos en 2010; Idealista tools, un software de gesti¨®n para agencias inmobiliarias o Tercero B, que ahora se va a llamar Idealista Data y con el que pretendemos ser el gran gestor de todo el big data que hay sobre el sector inmobiliario espa?ol.

P. En 2015, el fondo de inversi¨®n Apax Partners compr¨® la mayor¨ªa de las acciones de su compa?¨ªa, ?cu¨¢l es su papel actual?

R. Los tres socios seguimos como gestores y como accionistas. Cuando se negoci¨® con Apax, Jes¨²s, C¨¦sar y yo reinvertimos parte del dinero para seguir teniendo acciones de Idealista. No hemos hecho p¨²blica la valoraci¨®n, ni el precio, ni los porcentajes.

P. Tras 17 a?os al pie del ca?¨®n, ?cu¨¢l es la salsa m¨¢gica para ser el portal inmobiliario l¨ªder en espa?ol?

R. Ser l¨ªder no significa que te tengas que dormir en los laureles, hay que seguir siendo consciente de los gastos y de los ingresos y, en nuestro caso, estamos obsesionados con la retenci¨®n del talento para que la gente quiera trabajar en Idealista. Ahora mismo estamos en tres pa¨ªses y nos queda mucho trabajo por delante: queremos seguir siendo la soluci¨®n m¨¢s ¨²til para buscar una casa en la Red.