Amazon presiona

La econom¨ªa digital, la originalmente basada en el despliegue de las tecnolog¨ªas de la informaci¨®n y de la comunicaci¨®n (TIC) y en esta segunda fase de intensificaci¨®n del uso de la inteligencia artificial y la robotizaci¨®n, es sin duda la alteraci¨®n de mayor calado en el funcionamiento del sistema econ¨®mico de las ultimas d¨¦cadas. Es relevante identificar las v¨ªas en las que puede mejorar el bienestar de la mayor¨ªa de las poblaciones donde arraiga y las implicaciones menos favorables que puede traer consigo. Y la observaci¨®n de sus principales operadores o agentes de ese cambio es una forma de hacerlo. La empresa Amazon es probablemente el caso de mayor significaci¨®n al respecto.

No es solo la principal operadora de comercio electr¨®nico del mundo, es tambi¨¦n una verdadera impulsora de avances en software y, en general, en innovaci¨®n de distintas modalidades. La empresa nacida en 1994 como una tienda online ha extendido actividad a sectores como software, medios de comunicaci¨®n, entretenimiento, y desde luego al comercio en general.

En el pasado ejercicio fiscal inform¨® de ingresos por 134.000 millones de d¨®lares, y su valor en Bolsa el pasado mayo alcanzaba 454.000 millones de d¨®lares. Su influencia global no deja de crecer, marcando nuevas formas de actividad econ¨®mica, pero tambi¨¦n orientando los comportamientos de los consumidores. Modificando ¨¢mbitos esenciales del sistema de econom¨ªa de mercado. Desde luego, su liderazgo es indiscutible en el comercio al por menor. La mitad de todas las b¨²squedas de compras online se inician directamente en esa compa?¨ªa, a trav¨¦s de la cual en las econom¨ªas avanzadas se lleva a cabo una cantidad creciente del gasto, tanto dentro de la red como fuera. La reducci¨®n creciente de los plazos de entrega cuestiona de forma radical la forma de comprar y los modelos tradicionales de interlocuci¨®n con los consumidores. Cada producto que incorpora en su cartera de ventas avanza hacia posiciones de liderazgo que se asemejan al conseguido hist¨®ricamente en la comercializaci¨®n de libros.

Sus avances en software la sit¨²an liderando igualmente el conocimiento de las preferencias de los consumidores. Estos son el casi exclusivo centro de atenci¨®n de esta compa?¨ªa, de su permanente din¨¢mica de innovaci¨®n en la que el fracaso no se entiende sino como forma de aprendizaje, como manifestaci¨®n de esa tensi¨®n schumpeteriana que le conduce igualmente a capturar lo que otros innovan.

Esa trayectoria de la empresa no solo genera atractivo para los inversores, sino tambi¨¦n para emprendedores y talentos deseosos de prosperar en esa nueva econom¨ªa digital. Pero tambi¨¦n temores de los competidores, actuales o potenciales. Garantizar que esa presi¨®n por captar todo lo nuevo que fortalezca su posici¨®n de dominio ha de constituir tambi¨¦n una cautela de las autoridades reguladoras en todo el mundo para que el creciente poder de mercado no acabe traduci¨¦ndose en una asfixia de los emergentes. Tambi¨¦n para controlar que la creciente internacionalizaci¨®n y flexibilidad organizativa no se traduce en la elusi¨®n de las obligaciones fiscales. Las ventajas que obtienen los consumidores de esa presi¨®n innovadora no es raz¨®n suficiente para desatender un poder de mercado que si llega a ser excesivo puede volverse contra esos consumidores a los que inicialmente esta favoreciendo.