El largo ¡®Black Friday¡¯

Parece que el comercio ya no tiene que cantar I Dont Like Mondays de The Boomtown Rats y tararea Friday I'm in love de The Cure. En la era digital (cualquiera que sea su principio y fin) parece que cualquier referencia estadounidense para adelantar las compras navide?as ha sido incorporada en Asia y Europa a una velocidad asombrosa. Arrasa con las costumbres de varias generaciones y es norma para otras.

El Black Friday que da el pistoletazo a las compras navide?as en Estados Unidos se ha pegado a este lado del Atl¨¢ntico como el queso a la pizza. Para estupor de los que vieron c¨®mo el d¨ªa de Todos los Santos fue eclipsado por Halloween, ahora, la campa?a navide?a casi comienza antes de quitarnos el ba?ador. En el caso espa?ol se va a extender de forma asombrosa hasta despu¨¦s de Reyes. Una astuta combinaci¨®n de importaciones de tradiciones internacionales que propician un consumo prolongado y que meses anteriormente flojos para las ventas se conviertan ahora en referencia con gran n¨²mero de aparentes gangas y rebajas.

Aunque son las grandes superficies las que lideran esta estrategia de alisamiento de ventas que deber¨ªa reducir la estacionalidad y animar meses tradicionalmente m¨¢s d¨¦biles para el gasto, cualquier comerciante de proximidad saca ya sus propias ofertas prenavide?as para competir con el c¨²mulo de promociones de gran escala.

El terreno donde se dirime esta nueva pujanza comercial es, fundamental y crecientemente, online. Noviembre explot¨® hace dos semanas con la primera r¨¦plica del Black Friday estadounidense. Fue en China, donde el llamado D¨ªa del Soltero sorprendi¨® a propios y extra?os con cifras abrumadoras. Tan s¨®lo el gigante chino del comercio online Alibaba tuvo ventas de 21.763 millones de euros.

Anticipaci¨®n de compras

Hay aspectos l¨®gicamente positivos en este tipo de iniciativas. Los m¨¢s naturales se refieren a una anticipaci¨®n de compras navide?as que podr¨ªan suponer menor gasto, al tiempo que proporcionan una planificaci¨®n m¨¢s tranquila a los comercios, al reducir su excesiva dependencia de diciembre. En algunos pa¨ªses, ventas minoristas como las de octubre y noviembre ¡ªque hasta la fecha se hab¨ªan considerado de segundo orden¡ª se han convertido recientemente en un importante indicador adelantado del comportamiento de la econom¨ªa en el ¨²ltimo trimestre del a?o.

De hecho, la facturaci¨®n comercial en EE UU y Reino Unido en octubre, siendo buena, no ha satisfecho las expectativas. En Espa?a, la campa?a de tinta negra de viernes se ha desparramado por el calendario y se espera que, tan s¨®lo en comercio online, las ventas superen los 1.370 millones, un 9% m¨¢s que el pasado a?o.

Tras tanto tiempo esperando la vuelta de un consumo vigoroso, todas estas campa?as suman pero tambi¨¦n conviene tener ciertas precauciones. El gasto responsable es algo m¨¢s que una m¨¢xima moralista. Realizar pagos online tiene muchas ventajas y es muy eficiente pero algunos estudios sugieren que, en determinadas circunstancias, tambi¨¦n puede exacerbar el consumo m¨¢s all¨¢ de sus niveles de equilibrio y reducir el ahorro. Queda mucho camino a¨²n hasta Reyes.