Ingenier¨ªa espa?ola para la defensa
Mecanizados Escribano decidi¨® en 2010 cambiar su plan de crecimiento y ahora realiza todas las fases de la producci¨®n
Un garaje y dos emprendedores. La historia de Mecanizados Escribano, una empresa de ingenier¨ªa aplicada al sector aeron¨¢utico y de defensa, la comenzaron a escribir en los a?os 80 ?ngel Escribano y su hijo del mismo nombre. Pero no estudiaron en universidades de prestigio ni pensaban fundar una firma tecnol¨®gica. ?ngel padre era tornero en paro cuando decidi¨® montar un taller de 57 metros cuadrados en Coslada. ?ngel hijo estudiaba FP en mec¨¢nica y comenz¨® a trabajar con ¨¦l reparando frenos de disco. Junto a Javier, su otro hermano, poco a poco fueron construyendo un peque?o imperio que este a?o espera cerrar con una facturaci¨®n de entre 48 y 51 millones de euros.
¡°Con el taller empezamos a suministrar piezas a Construcciones Aeron¨¢uticas (Casa)... recuerdo que fui a pedir trabajo all¨ª en bicicleta¡±, cuenta ?ngel Escribano (hijo), ahora presidente de la firma. Antes hab¨ªa repartido peri¨®dicos por Madrid en una furgoneta. ¡°Era muy inquieto, no me gustaba el instituto. Mi madre fue la que nos inculc¨® los negocios, ten¨ªa una mercer¨ªa, nosotros nos criamos all¨ª¡±.
Fallecido el fundador, los hermanos Javier y ?ngel llevan ahora las riendas de la empresa que el a?o pasado cerr¨® con unas ventas de 33 millones, el 75% fuera de Espa?a. Airbus, Roger Collins, ITP y ministerios de Defensa de varios pa¨ªses son sus principales clientes en mercados como Reino Unido, Alemania y EE UU. El a?o pasado lograron un resultado de explotaci¨®n de 11 millones, pero nunca han repartido beneficios. ¡°No tenemos grandes lujos, una casa, un coche, pero ni apartamentos ni barcos en la playa. Todo se reinvierte¡±. Tampoco han aportado dividendos a su socio y propietario del 32% del capital: el fondo soberano del sultanato de Om¨¢n (SGRF), brazo inversor de la monarqu¨ªa absoluta que acompa?a a la empresa desde el 2016.
¡°Descubrimos que la empresa no era nuestra¡±
Hace dos a?os, a trav¨¦s de un contacto en una feria celebrada en Barcelona, los dos socios de Escribano conocieron al respresentante del fondo soberano de Om¨¢n, Abdulsalam Mohammed Al-Murshidi. ¡°Quer¨ªan invertir en empresas espa?olas y lo vimos bien. Lo que no sab¨ªamos es que la empresa no era nuestra¡±, ironiza el consejero delegado de la compa?¨ªa. ¡°Nos enteramos de que no pod¨ªamos venderles las acciones sin la autorizaci¨®n del Gobierno¡±, por tratarse de una empresa que realiza actividades vinculadas a la defensa nacional. La operaci¨®n fue finalmente validada por 18 millones de euros. El sultanato, que no interviene en la gesti¨®n, tiene un plan de salida del capital en 2021.
Ahora instalados en Alcal¨¢ de Henares, tres naves industriales albergan a una plantilla de 260 trabajadores, de los cuales casi cien son ingenieros y un 10% doctores. Desarrollan todo tipo de productos, desde tarjetas electr¨®nicas y software hasta estaciones de defensa, sistemas de vigilancia, programas de salvamento, c¨¢maras de infrarrojos, dispositivos de carga y control remoto para armas, aparatos para intensificaci¨®n de im¨¢genes para cascos, piezas mec¨¢nicas para misiles o para aviones. De principio a fin, todo lo fabrican en sus naves. Con eso esperan alcanzar los 70 millones en facturaci¨®n con 350 empleados y un Ebitda de m¨¢s de 20 millones.
¡°Hasta 2010 ¨¦ramos una empresa peque?a. No aport¨¢bamos valor. Y decidimos cambiar¡±, explica Escribano. En vez de comprar m¨¢s m¨¢quinas para atender a los constantes requerimientos de los clientes a precios m¨¢s y m¨¢s bajos, ?por qu¨¦ no contratar a ingenieros y generar toda la cadena de un producto? ¡°Entendimos que el negocio est¨¢ en industrializar todas las etapas de valor y poder vender cada producto a precio del mercado. Por muy grande que veas una empresa no tienen m¨¢s tecnolog¨ªa que nosotros¡±, presume el consejero delegado.
Escribano ilustra lo que les ha pasado con el ejemplo de una empresa que les pidi¨® una lente determinada. ¡°Nos gastamos m¨¢s de un mill¨®n de euros para hacer la pieza. Gracias a ¨¦l nos metimos en una gran inversi¨®n y aprendimos un oficio [fabricar lentes] que desconoc¨ªamos. Porque hasta entonces solo hac¨ªamos piezas mec¨¢nicas¡±. Tambi¨¦n hacen monitores (compran pantallas y las cortan a medida, les instalan el cableado a mano y los componentes electr¨®nicos).
Los clientes recibieron bien estos cambios. Y su idea sigue siendo la misma: estar muy pendientes de la ingenier¨ªa sin perder de vista la fabricaci¨®n. ¡°Si tienes una capacidad productiva, si inviertes, si actualizas, te pueden barrer del mercado, pero es m¨¢s complicado¡±. Con ello quieren salvarse de uno de los males que afecta a la industria militar espa?ola ¡ªque ya factura 10.700 millones de euros, seg¨²n la patronal Tedae¡ª. El tejido est¨¢ formado por empresas sin demasiado m¨²sculo que recelan de crecer a trav¨¦s de fusiones; y que, si bien han aprendido a exportar, presionan al Estado para que ampl¨ªe sus compras. Y la mayor¨ªa son muy celosas de compartir informaci¨®n sobre sus cuentas o productos.
Escribano, por suerte, entiende que la transparencia es positiva y habla con naturalidad de sus clientes.?Tienen pedidos para fabricar los mandos de vuelo del Boeing 787, para componentes del Airbus A350 y tren de aterrizaje y antenas del Eurofighter. Participa en el proyecto para la estaci¨®n de armas del Veh¨ªculo de combate 8x8.
Tecnolog¨ªa de doble uso
Defienden que Espa?a necesita m¨¢s empresas como la suya, porque son un lugar donde los ingenieros pueden desarrollar todo su potencial. ¡°La tecnolog¨ªa de doble uso existe, se han desarrollado much¨ªsimas cosas en el campo de defensa que han pasado al terreno civil y viceversa¡±, reflexiona ?ngel Escribano. ¡°Este sector es altamente atractivo para la gente por el nivel tecnol¨®gico donde te mueves. 80 ingenieros son capaces de trabajar como 800, es incre¨ªble lo que pueden desarrollar¡±.
Pero la empresa no est¨¢ donde quiere. Todav¨ªa. ¡°Me veo en el peor momento, no somos ni peque?os ni grandes. Cuando eres grande se te abren muchas puertas, tienes una fuerza laboral que pesa. Y aqu¨ª tenemos muy buen ambiente, peleamos por un contratos de uno o dos millones, pero no somos lo suficientemente grandes¡±. En el medio plazo esperan convertirse en una empresa de entre 600-700 empleados con unos 150 millones en ventas. Ellos solos o gracias a un socio del sector.
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