La expansi¨®n americana del Instituto Valenciano de Infertilidad

La alianza del Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI) con la empresa Reproductive Medicine Associates of New Jersey (RMANJ) en febrero del pasado a?o, ha permitido a la compa?¨ªa espa?ola la consecuci¨®n de una antigua aspiraci¨®n: entrar en el mercado americano. La empresa resultante, Ivirma Global, con una plantilla de 2.400 empleados; 300 investigadores y 200 m¨¦dicos, prev¨¦ facturar m¨¢s de 300 millones durante su primer a?o de funcionamiento. Es uno de los principales grupos del mundo, con m¨¢s de 70 cl¨ªnicas en 13 pa¨ªses. El IVI conserva la mayor¨ªa accionarial, el 70%, y la nueva empresa, Ivirma, tiene su sede social y fiscal en Valencia.

¡°Estamos sorprendidos por los buenos resultados en ambos lados. Las fuerzas suman¡±, comenta Jos¨¦ Remoh¨ª, presidente y fundador del IVI junto a Antonio Pellicer. ¡°La visi¨®n de dos empresas con una misma filosof¨ªa y al mismo tiempo con t¨¦cnicas complementarias ha enriquecido la compa?¨ªa a nivel cient¨ªfico, de servicio y de tratamientos para las pacientes¡±, agrega el catedr¨¢tico de Obstetricia y Ginecolog¨ªa de la Universidad de Valencia.

La alianza ha dado lugar a un grupo valorado en 940 millones con 70 cl¨ªnicas en 13 pa¨ªses

Continuando con la estrategia, la compa?¨ªa adquiri¨® a finales de este a?o otra empresa consolidada del sector en el Estado de Pensilvania, con cinco cl¨ªnicas. ¡°El objetivo es crecer en el pa¨ªs m¨¢s avanzado en investigaci¨®n sobre fertilidad¡±, destaca Remoh¨ª, que reconoce que el proyecto ralentizar¨¢ la actividad en Am¨¦rica Latina, desde donde inicialmente pensaron que podr¨ªan dar el salto a EEUU. ¡°No podemos abarcarlo todo. Llev¨¢bamos m¨¢s de 15 a?os estudiando proyectos de grandes grupos que no nos convenc¨ªan porque al final solo ten¨ªan en com¨²n el m¨¢rketing. IVI no quiere crecer a cualquier precio, ni a cualquier velocidad¡±, asegura.

Otras ofertas

¡°Hemos rechazado alianzas con grupos que ten¨ªan fondos detr¨¢s porque desvirtuaban el valor con el que siempre hemos trabajado. Por eso elegimos a RMANJ, porque somos similares. No queremos ser una franquicia, a la gente la queremos formar nosotros¡±, explica Remoh¨ª, que al igual que Pellicer, realiz¨® el fellowship (programa de especializaci¨®n) en medicina reproductiva en EE UU. Fue en ese pa¨ªs donde ambos amigos se plantearon crear el IVI. ¡°Hicimos una copia de lo que hab¨ªamos conocido y aprendido durante nuestra estancia. En ese momento, en ginecolog¨ªa no se apostaba por la reproducci¨®n. Era el ¨¢rea que menos desarrollada estaba. La tasa de ¨¦xito en el mejor centro de EEUU era del 19%, cifra impensable en Espa?a. En esa ¨¦poca cualquier ginec¨®logo con una pareja est¨¦ril estaba deseando que se fuera con otro especialista¡±, recuerda.

El IVI, con 27 a?os de trayectoria, fue una apuesta por la reproducci¨®n. ¡°Por un modelo que en Espa?a no se conoc¨ªa. Un centro ¨ªntegramente para el estudio y el tratamiento de la infertilidad. Y, adem¨¢s, en Valencia, no en Madrid. La mayor¨ªa de compa?eros nos dec¨ªan que est¨¢bamos locos¡±, a?ade Remoh¨ª. La empresa abri¨® en el 1990 y durante los tres primeros a?os, sus fundadores, hoy millonarios, no ganaron ¡°una peseta¡±, viv¨ªan de los ahorros, dice Remoh¨ª, que confiesa que durante 22 a?os tampoco repartieron dividendos. ¡°Quiz¨¢s por desconocimiento. Nosotros no ¨¦ramos empresarios. Nuestro crecimiento estaba basado en una econom¨ªa dom¨¦stica. Sin experiencia, pero con intuici¨®n¡±, manifiesta el profesor, que ocupa la tercera posici¨®n entre los mejores investigadores espa?oles en ginecolog¨ªa. La entrada hace menos de 15 a?os en el accionariado del IVI de Carlos Bertomeu, presidente de la compa?¨ªa a¨¦rea Air Nostrum, supuso un giro en la gesti¨®n. Los dos fundadores del instituto tambi¨¦n forman parte, desde hace un a?o, del consejo de administraci¨®n de la aerol¨ªnea.

Llevaban 15 a?os estudiando proyectos para crecer que no les convenc¨ªan

La mayor parte de los ingresos de la empresa, desde su fundaci¨®n, se han invertido en investigaci¨®n. En la actualidad m¨¢s de 10 millones de euros anuales. ¡°As¨ª conseguimos publicar en las revistas especializadas y adquiriendo prestigio internacional. Un a?o o dos despu¨¦s llegaron las primeras solicitudes de m¨¦dicos para hacer el fellowship en Valencia. Empezamos a hacer escuela¡±, se?ala el tambi¨¦n sex¨®logo. A lo largo de los a?os, la compa?¨ªa fundada por Remoh¨ª y Pellicer ha creado una marca avalada por los resultados, m¨¢s de 160.000 ni?os han nacido por sus tratamientos. En 1996 se produce su primer ¨¦xito internacional: nacen los primeros ni?os del mundo cuyo embarazo se obtuvo con semen congelado procedente de tejido testicular del padre.

Espa?a ofrece el servicio de reproducci¨®n asistida de forma gratuita. ¡°Aqu¨ª no hay monopolio. Todo lo contrario. Es un escenario muy concreto. Y la Seguridad Social lo hace muy bien¡±, resalta Remoh¨ª, al que la competencia de otras cl¨ªnicas no le asusta. ¡°Hay mucho futuro en la investigaci¨®n. Se han conseguido muchas cosas en el campo terap¨¦utico: m¨¢s tasas, m¨¢s rapidez, menos espera en los procesos, menos ¨®vulos para obtener un embri¨®n, pero las curvas demogr¨¢ficas se?alan que cada vez hay m¨¢s parejas est¨¦riles. Es una realidad, tenemos m¨¢s pacientes con m¨¢s de 40 a?os que menores de 35¡±, argumenta.

La nueva empresa ha nombrado como nuevo consejero delegado al estadounidense Richard Scott, socio fundador de la empresa norteamericana. Al frente del departamento de innovaci¨®n est¨¢ el profesor de Yale, Emre Seli. El futuro de la compa?¨ªa valenciana, valorada en m¨¢s de 940 millones de euros, tambi¨¦n pasa por establecerse en Asia. Por esa raz¨®n han mantenido encuentros en Valencia con el multimillonario singapurense Peter Lim, propietario de Thomson Medical, compa?¨ªa que presta servicio de obstetricia, ginecolog¨ªa y pediatr¨ªa. El empresario, a trav¨¦s de su holding Rowsley, est¨¢ reforzando su apuesta por el negocio de salud.