Un afectado por las preferentes en el Congreso: ¡°No es el mercado, fue una estafa¡±

La comisi¨®n de investigaci¨®n de la crisis financiera del Congreso es noticia cuando va Rodrigo Rato o alg¨²n exministro, pero no mucho cuando aparece por all¨ª gente corriente. Esta ma?ana de martes ha pasado por fin por la comisi¨®n el primer ciudadano que no es pol¨ªtico, banquero o responsable de alguna instituci¨®n, Xes¨²s Dom¨ªnguez, miembro de la Coordinadora de Plataformas de Afectados por las Participaciones Preferentes y Obligaciones Subordinadas. Era la primera vez que pisaba el Parlamento y, seg¨²n se?al¨®, tampoco ha sido recibido nunca por autoridades y ni siquiera le han llamado nunca de alg¨²n medio de comunicaci¨®n p¨²blico. En fin, se desahog¨® bastante, pero con una intervenci¨®n minuciosa, demoledora y le¨ªda con calma. Para lo que es investigar la crisis este hombre se la ten¨ªa muy bien investigada, pero en carne propia, que se investiga m¨¢s. Una idea que respond¨ªa a una ocurrencia chulesca de Rodrigo Rato el otro d¨ªa en esta misma comisi¨®n (¡°Es el mercado, amigo¡±) fue la s¨ªntesis de su mensaje: ¡°No es el mercado, fue una estafa¡±. Seg¨²n su an¨¢lisis, ¡°la banca necesitaba dinero en efectivo y dise?¨® una campa?a para apropiarse de los recursos de sus clientes¡±.

La sala no ard¨ªa de expectaci¨®n precisamente, y eso que era el primer protagonista directo de los efectos de la crisis, no de las causas. Hab¨ªa solo nueve diputados, m¨¢s tres en la mesa, y menos uno que se fue al cabo de un rato. Y dos periodistas presentes. Lo de las preferentes ya queda lejos, tanto que se puede comprender mejor lo que pas¨®. En su resumen, se trat¨® de una estafa masiva de 42.500 millones, que afect¨® a un mill¨®n de personas, que tuvieron que comerse quitas de hasta el 70% y contribuir de rebote al rescate bancario con 13.000 millones de euros. ¡°No hay directivos de banca condenados por las preferentes y ning¨²n pol¨ªtico fue responsable ni ha hecho autocr¨ªtica¡±, denunci¨® Dom¨ªnguez. Y a bancos y cajas les sali¨® casi gratis, reproch¨®. La CNMV sancion¨® con 6,7 millones a las entidades herederas, pero es que hab¨ªan vendido 4.500 millones en preferentes y subordinadas. Los bancos de Galicia, por ejemplo, vendieron 1.832 millones de euros y se las arreglaron con una multa de dos millones. ¡°Ganaron 1.830 millones. Sale a cuenta cometer grandes delitos. Si yo robo a punta de navaja 50.000 euros y me multan con 10 euros al d¨ªa siguiente vuelvo a robar¡±, dijo Dom¨ªnguez para redondear el concepto de forma comprensible. Y eso que se evit¨® entrar en detalles conocidos como que en ocasiones los contratos fueron colados a ancianos despistados, menores de edad y personas sin en el menor conocimiento financiero. Se llegaron a abonar en preferentes indemnizaciones de accidentes de tr¨¢fico. Los inversores profesionales se deshicieron de las preferentes en 2007, quienes no sab¨ªan se hundieron con ellas.

Art¨ªfices de esta ¡°trama¡± fueron, tuvo a bien recordar el ponente, unos bancos y cajas que entre 1996 y 2010 tuvieron ganancias de 169.281 millones, seg¨²n el Banco de Espa?a, y que aun as¨ª recibieron un rescate de 61.000 millones entre 2009 y 2015, un dineral del que se han perdido 47.966 millones, seg¨²n datos de la Comisi¨®n Europea. Dom¨ªnguez tambi¨¦n consider¨® oportuno hacer memoria de que las preferentes comenzaron a ser emitidas en para¨ªsos fiscales en 1998, desde las islas Caim¨¢n, por decenas de bancos y grandes empresas (Repsol, Telef¨®nica, Endesa, Uni¨®n Fenosa, Sol Meli¨¢¡­), luego fueron legalizadas por el Gobierno de Aznar y solventado el pecadillo con una amnist¨ªa fiscal para los a?os anteriores. La legalizaci¨®n, subray¨®, fue obra de Rodrigo Rato y su secretario de Econom¨ªa de entonces, Luis de Guindos, hoy ministro, y que tambi¨¦n fue presidente de Lehman Brothers en Espa?a entre 2004 y 2008, entidad que tambi¨¦n vendi¨® preferentes, al menos hasta que quebr¨® como s¨ªmbolo de la crisis.

Pero m¨¢s all¨¢ de estos n¨²meros, no por repetidos menos olvidados, el relato de este l¨ªder de las protestas gallegas toc¨® un aspecto que hasta ahora no hab¨ªa salido en la comisi¨®n, porque faltaba ese lado del problema: c¨®mo reaccion¨® la autoridad, no a la crisis, sino a la reacci¨®n de los ciudadanos a la crisis. ¡°Pasamos de ser ignorados por las administraciones a ser tratados como delincuentes y cosidos a multas para criminalizarnos e intimidarnos y que as¨ª ces¨¢ramos en nuestras justas reclamaciones¡±, asegur¨® Dom¨ªnguez. ¡°No ¨¦ramos afectados, no ¨¦ramos ciudadanos, no ¨¦ramos estafados¡­ ?ramos subversivos¡±.

Mantuvo que las movilizaciones de afectados ¡°fueron siempre pac¨ªficas y ejemplares¡±, pero a partir de 2013 empezaron a caer decenas de sanciones de m¨¢s de 20.000 euros, si bien m¨¢s tarde ser¨ªan anuladas por los tribunales. ¡°En la actualidad y con la ley mordaza ser¨ªa multas de millones de euros y penas de c¨¢rcel¡±, apunt¨®. Record¨® a Domitila Vicente, una se?ora de 82 a?os multada con 100 euros por su actitud ¡°agresiva¡± y por saltarse una valla en una protesta aunque caminaba con andador. Encierros de hasta seis meses en los ayuntamientos. ¡°Fueron imprescindibles para que nos hicieran caso y recuperar el 90% de los ahorros en los tribunales¡±, concluy¨®.

Aunque los tribunales no salieron baratos, porque el ministerio de Justicia impuso tasas que no exist¨ªan hasta ese momento para encarecer la reclamaci¨®n judicial, de 150 a 1.200 euros por demanda, m¨¢s una cantidad variable seg¨²n la cuant¨ªa que pod¨ªa llegar a 10.000 euros. En total, quienes demandaban desembolsaron unos 500 millones de euros. El Constitucional anul¨® en 2016 algunos apartados de la ley y algunos importes desproporcionados. Y tampoco fue f¨¢cil cobrar: ¡°En la pr¨¢ctica fueron los bancos los que decidieron a qui¨¦n devolv¨ªan el dinero¡±. Dom¨ªnguez habl¨® de su experiencia concreta en Galicia y cont¨®, con una grave acusaci¨®n, c¨®mo el PP lleg¨® a convertir la recuperaci¨®n del dinero en promesa electoral: ¡°Los alcaldes en el sur de Pontevedra, en la zona cero de esta historia, hac¨ªan listas en los actos de campa?a de la gente, las pasaban al banco y el banco se las pasaba a Price Waterhouse Cooper, y los que no eran afectos, pues no¡±.

Los portavoces de los partidos tuvieron intervenciones comprensivas y de solidaridad, menos el PP, al que en estos casos le sale el tic de que no fue para tanto y lamenta que se caiga en la demagogia. ¡°Por favor, no hable de estafa, se lo admito que lo use como opini¨®n, pero el delito de estafa lo debe decidir un juez. Le ruego que cuando lo utilice, lo haga con m¨¢s sentidi?o, que decimos en Galicia¡±, le sugiri¨® el portavoz popular, Juan Manuel Juncal. La primera v¨ªctima de la crisis que va a la comisi¨®n todav¨ªa se tuvo que ir con un tir¨®n de orejas, por falta de sentidi?o.