El Gobierno asume la gesti¨®n de la R-4, la primera autopista en quiebra que pasa al Estado
Fomento garantiza que continuar¨¢ el servicio de peaje y asumir¨¢ a los 90 trabajadores
El Ministerio de Fomento, a trav¨¦s de la empresa p¨²blica Seittsa, asumir¨¢ este mi¨¦rcoles, 21 de febrero, la explotaci¨®n y el mantenimiento de la autopista de peaje R-4, que discurre entre Madrid y Oca?a (Toledo), como consecuencia de la liquidaci¨®n de la sociedad concesionaria, que se encontraba en concurso de acreedores.
La R-4 ser¨¢ la primera de las ocho autopistas de peaje en quiebra que revertir¨¢ al Estado, que de esta forma garantiza la prestaci¨®n del servicio para los 5.400 usuarios que utilizan esta v¨ªa a diario. La sociedad p¨²blica se encargar¨¢ de cobrar el peaje y se subrogar¨¢ los 90 empleados de la concesionaria privada en quiebra, en las mismas condiciones laborales que en la actualidad, seg¨²n asegur¨® el Ministerio en un comunicado.
La actual concesionaria de la autopista, una sociedad participada por Ferrovial, Sacyr y Liberbank, fue declarada en liquidaci¨®n con una deuda de unos 530 millones de euros. La radial R-4, inaugurada en febrero de 2004, es una autopista de 52,5 kil¨®metros de longitud que lleva asociada la explotaci¨®n de 41,5 kil¨®metros de la carretera de circunvalaci¨®n M-50 libre de peaje, el que discurre entre las carreteras A-2 y A-4. Ser¨¢ la primera autopista que el Estado tenga bajo su gesti¨®n m¨¢s de una d¨¦cada despu¨¦s de que en mayo de 2006 privatizara la entonces Empresa Nacional de Autopistas (ENA).
Vuelta a manos privadas
Fomento tiene previsto relicitar y adjudicar durante este a?o las ocho concesiones actuales en quiebra en dos contratos, separando, por un lado, las autopistas del entorno de Madrid en un contrato -las radiales R-2, R-3/R-5, R-4 , Eje Aeropuerto (M-12), Madrid-Toledo (AP-41) y Oca?a-La Roda (AP-36)- y las dos dela AP-7 en otro contrato (Circunvalaci¨®n de Alicante y Cartagena-Vera). Al concurso se podr¨¢n presentar las empresas que han formado parte de las concesionarias en quiebra.
Estas autopistas suponen una quinta parte (570 kil¨®metros) de la red de pago. Su construcci¨®n supuso una inversi¨®n de 7.000 millones y actualmente soportan una deuda de 3.200 millones. La mejora de la situaci¨®n econ¨®mica ha incrementado notablemente el tr¨¢fico por estas v¨ªas. A cierre de 2017, todas ellas presentaron incrementos de tr¨¢fico con respecto a 2016. En concreto, la Intensidad Media Diaria (IMD) total de estas carreteras registr¨® un aumento del 8,6%. Entre los mayores incrementos destac¨® la AP-41, con un 16,6%, o la R-4, con un 11,5%. Seg¨²n los ¨²ltimos datos disponibles, en lo que va de a?o el tr¨¢fico en estas autopistas experimenta una subida del 10,2%; un 14,4% en elcaso de la R-4.
La Ley de Contratos del Sector P¨²blico prev¨¦ que, en el caso de que una concesi¨®n de obra p¨²blica inicie la fase de liquidaci¨®n en un concurso de acreedores, exista la obligaci¨®n legal de resolver el contrato de concesi¨®n y que la infraestructura revierta a la administraci¨®n concedente.
En virtud del rescate, el Estado tendr¨¢ que pagar a las actuales concesionarias el importe que invirtieron en su construcci¨®n y que a¨²n no hab¨ªan recuperado con el cobro del peaje. Se trata de una factura que el Gobierno estima en unos 2.000 millones de euros, pero que los acreedores de las v¨ªas elevan hasta 4.500 millones. Fomento espera aminorar este monto con lo que saque de relicitar las v¨ªas, pero ya ha reconocido que no lo cubrir¨¢ en su totalidad y que la operaci¨®n afectar¨¢ en el d¨¦ficit de este a?o.
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