Agujeros negros en la lista de para¨ªsos fiscales de la UE

El secreto bancario est¨¢ intacto: solo ha muerto en las p¨¢ginas de los diarios mal informados. Y los para¨ªsos fiscales gozan de una salud de hierro: Europa present¨® en diciembre su lista negra, despu¨¦s de a?os de cuitas y trifulcas, pero nada ¡ªabsolutamente nada¡ª ha cambiado desde entonces. En la lista de la UE aparec¨ªan apenas 17 jurisdicciones no cooperativas: no est¨¢ Suiza, para¨ªso de todos los para¨ªsos, o Bermudas, o las islas del Canal de la Mancha, una suerte de cloaca de la City de Londres. En enero qued¨® reducida a nueve nombres; ni siquiera est¨¢ ya el pa¨ªs de los tristemente famosos Papeles de Panam¨¢, en los que figuran varias grandes fortunas espa?olas con pocas ganas de pagar al fisco.

Una filtraci¨®n masiva de documentos internos de la UE a la que ha tenido acceso EL PA?S revela lo que ya era un secreto a voces. Adem¨¢s de insuficiente, esa lista se elabor¨® con la m¨¢xima opacidad, con criterios muy discutibles y con fuertes presiones de Reino Unido, Luxemburgo, Irlanda e, incluso, Francia para suavizarla o sacar directamente del listado a algunos aliados naturales.

El sistema tributario es una especie de queso gruyer plagado de agujeros para las multinacionales: las grandes empresas ¡ªy las grandes fortunas¡ª se han especializado en establecer microfiliales en para¨ªsos fiscales en los que los impuestos son bajos o nulos. Lo han hecho con impunidad y, a menudo, con la conciencia tranquila. La lista europea era una manera de poner coto a ese m¨¦todo, pero los 19 documentos del Consejo Europeo filtrados ayer por el grupo de Los Verdes en la Euroc¨¢mara pone de manifiesto, sobre todo, la ¡°absoluta falta de transparencia¡± en todo ese proceso. Hasta la Comisi¨®n Europea coincide: ¡°Nos gustar¨ªa ver m¨¢s hambre de transparencia en todo el proceso, pero los Estados miembros no transigen¡±, destacan fuentes europeas.

Reino Unido se va, pero Londres torpedea sistem¨¢ticamente cualquier tipo de iniciativa fiscal que perjudique a sus excolonias, en especial a las jurisdicciones no cooperativas que han surgido como setas en el Canal de La Mancha. Los documentos revelan que Reino Unido puso todas las trabas posibles para fijar una metodolog¨ªa ¨²til: defend¨ªa, por ejemplo, que los pa¨ªses con un impuesto de sociedades ¡°del 0% ¨® pr¨®ximo al 0%¡± no ten¨ªan por qu¨¦ ser para¨ªsos fiscales, siempre seg¨²n esos documentos. ¡°A pesar de los obst¨¢culos, se consensu¨® un lenguaje aceptable, pero que aguaba en parte los criterios¡±, admiten fuentes de la Comisi¨®n.

Estados se?alados

Irlanda y Luxemburgo, que no son para¨ªsos pero s¨ª limbos fiscales que durante d¨¦cadas han desarrollado la competencia tributaria a la baja, apoyaron demandas brit¨¢nicas. Luxemburgo presion¨® para evitar las sanciones, que al fin y al cabo son el elemento coercitivo para que los pa¨ªses se?alados intenten salir de esos listados. Incluso la Francia de Macron presion¨® hasta el ¨²ltimo minuto para sacar a Marruecos de la lista.

Hay nueve pa¨ªses se?alados y 55 jurisdicciones en la lista gris europea (Andorra, Suiza, Qatar, Belice, Jersey, Liechtenstein y dem¨¢s sospechosos habituales figuran en esa segunda lista, idea del Gobierno espa?ol). Esos 55 pa¨ªses no est¨¢n en la lista negra porque han mostrado compromisos para cambiar su pol¨ªtica fiscal. Pero esos compromisos no son conocidos. El calendario para aplicar las medidas imprescindibles para evitar su salto a la lista negra tampoco es p¨²blico: Andorra debe anular o modificar cuatro reg¨ªmenes tributarios (seg¨²n uno de los documentos filtrados), pero nadie excepto su Gobierno sabe exactamente cu¨¢les y cu¨¢ndo. Los Verdes reclaman ¡°que se publiquen las cartas de los 55 pa¨ªses con los compromisos adquiridos¡±, aseguraba anoche el eurodiputado Ernest Urtasun; un portavoz del comisario Pierre Moscovici aleg¨® que Bruselas quiere exactamente lo mismo, pero el Consejo ¡ªlos Estados miembros¡ª ¡°se ha negado sistem¨¢ticamente a hacer p¨²blicas esas cartas¡±. ¡°No sabemos ni en qu¨¦ plazos ni en qu¨¦ t¨¦rminos se van a enmendar y corregir esos reg¨ªmenes nocivos¡±, denuncia Urtasun. Mientras eso siga igual, las listas son papel mojado.