Se venden casas construidas con una impresora 3D por 50.000 euros
Una empresa valenciana pone en marcha el primer proyecto piloto de vivienda utilizando esta tecnolog¨ªa
Corazones impresos a tama?o real, alimentos, coches, muebles... El futuro est¨¢ en manos de las impresoras 3D. Y las casas ?se pueden imprimir? No solo eso. Hoy mismo se puede encargar y comprar una vivienda de una planta para que sea impresa en la parcela del comprador y con un dise?o personalizado. Y eso se puede hacer en Espa?a, donde se ha realizado la primera vivienda en 3D, un proyecto piloto que sirve de avanzadilla para lo que est¨¢ por venir: una promoci¨®n de siete chal¨¦s en Cuenca. Y para el a?o que viene proyectos en Sudam¨¦rica y en Oriente Pr¨®ximo y mejorar la tecnolog¨ªa para poder imprimir una segunda planta.
Pero eso ser¨¢ m¨¢s adelante. Lo primero es concluir el proyecto piloto de la casa de 24 metros cuadrados que la startup valenciana Be More 3D est¨¢ haciendo en un solar junto a la Facultad de Bellas Artes de la Universitat Polit¨¨cnica de Valencia (UPV). La haza?a de los cuatro j¨®venes fundadores de la empresa fue crear una impresora de hormig¨®n de seis metros de ancho y tres metros de alto y una casa. Todo en tres meses y con los 25.000 euros que consiguieron al entrar a formar parte de la aceleradora de startups de Acciona. Capa a capa han dado forma a la vivienda en 15 horas. "Se puede hacer en ocho horas subiendo la velocidad de la m¨¢quina", se?ala Vicente Ram¨ªrez, cofundador. La impresora, que se monta en tres horas en el terreno, ha creado la estructura, es decir, el cerramiento exterior y las particiones interiores.
Pero la tecnolog¨ªa 3D no hace magia, de momento. Y no todos los elementos son impresos. "Hablamos de una construcci¨®n de contornos que precisa posteriormente la incorporaci¨®n del resto de elementos", apunta Javier M¨¦ndez, director del gabinete t¨¦cnico del Colegio de Aparejadores de Madrid. Y as¨ª es: "Despu¨¦s hay que poner el techo de paneles prefabricados, las ventanas y las puertas, los grifos y colocar la impermeabilizaci¨®n", a?ade Ram¨ªrez. Insiste este emprendedor en que este proyecto piloto demuestra que la tecnolog¨ªa 3D es competitiva frente a los m¨¦todos de construcci¨®n tradicionales o los prefabricados. Han calculado que una vivienda de 70 metros cuadrados se puede levantar en menos de 24 horas (la estructura). El precio final de estas casas que pretenden imprimir y vender rondar¨¢ los 50.000 euros. "Para entrar a vivir", dice. "La construcci¨®n con impresi¨®n 3D es hasta un 35% m¨¢s barata", seg¨²n Be More 3D. Ahora, la empresa ha abierto una ronda de financiaci¨®n para poner en marcha todos esos nuevos proyectos.
La experiencia espa?ola llega despu¨¦s de otras internacionales. La m¨¢s sonora fue la de la empresa china Winsu, que ha construido un bloque de cinco alturas y 1.100 metros cuadrados en China. Pueden imprimir 10 casas en 24 horas. Tambi¨¦n en ?msterdam el estudio holand¨¦s DUS Architects es responsable de un proyecto de impresi¨®n 3D de una casa junto a un canal. Luego est¨¢ la empresa Apis Cor, que ha construido su primera vivienda impresa de bajo coste en la ciudad de Stupino, cerca de Mosc¨², una casa de 38 metros cuadrados por 10.000 d¨®lares en menos de 24 horas.
Espa?a no era ajena a esta corriente. Se trabaja desde hace tiempo en esta tecnolog¨ªa que est¨¢ en desarrollo y hay varios proyectos de investigaci¨®n en marcha e incluso ya se han hecho varias impresoras 3D con precisi¨®n suficiente. El Instituto de Ciencias de la Construcci¨®n Eduardo Torroja, perteneciente al CSIC, participa desde hace tiempo en varios proyectos. Uno es el Print'n Build para el desarrollo de un prototipo para impresi¨®n 3D de construcciones a gran escala. Otro es el 3DCONS, que persigue introducir las tecnolog¨ªas de impresi¨®n 3D en la construcci¨®n, tanto en obra nueva como en rehabilitaci¨®n y restauraci¨®n de patrimonio.
Tienen claro los expertos que la tecnolog¨ªa 3D ganar¨¢ terreno y que su utilidad es incuestionable: ahorro en tiempo y costes, mejora de los riesgos en seguridad y salud de los operarios, menos residuos, mejora de la precisi¨®n en la construcci¨®n... Pero ?el futuro pasa porque todas las personas vivan en un piso impreso?
Piezas complejas
"Algunos de los que trabajamos en esto no vemos que el objetivo de la impresi¨®n 3D sea construir viviendas completas. La construcci¨®n de un edificio es un proceso complejo en el que intervienen muchos materiales y productos todos ellos especializados. Es dif¨ªcil que se puedan imprimir sin m¨¢s. Si se observan los resultados de lo que se llama ahora una vivienda impresa, se ve que no est¨¢n al nivel de las prestaciones que son requeridas para viviendas en Espa?a", dice Jos¨¦ Antonio Tenorio, cient¨ªfico del CSIC.
La misma idea sobre calidad comparte Javier M¨¦ndez: "Por mucho que avance la tecnolog¨ªa una vivienda no es un objeto cualquiera y precisa de una regulaci¨®n amplia". Y se pregunta: ?hasta qu¨¦ punto ser¨¢ posible, como m¨ªnimo, alcanzar garant¨ªas al nivel de una construcci¨®n m¨¢s tradicional?
As¨ª pues, parece que el futuro pasa por imprimir partes de un edificio. "Fabricar un ej¨¦rcito de casas iguales o miles de piezas iguales es absurdo, se hace mejor y m¨¢s barato con tecnolog¨ªa tradicional. Mi opini¨®n es que, para construir con los est¨¢ndares de calidad y precios actuales, las impresoras 3D sirven para hacer objetos complejos y todos distintos. Tiene sentido hacer un Guggenheim, no 200 casas iguales", aclara Tenorio.
El experto se refiere a destinar la impresi¨®n 3D para la rehabilitaci¨®n de fachadas, restaurar piezas de patrimonio (balaustradas, g¨¢rgolas...) o hacer esgrafiados y elementos decorativos en fachadas. "?Te imaginas en 2050 un andamio con unos se?ores subiendo para reparar una fachada? O quiz¨¢ ?te imaginas una impresora trepadora? Pues eso, ah¨ª tienes el futuro", concluye. Tampoco acaba de ver que sea "una opci¨®n realista y generalizada" Fernando Moliner, presidente de la Comisi¨®n T¨¦cnica e Innovaci¨®n de Asprima, la patronal de promotores de Madrid. "Tiene sentido para piezas concretas y elementos singulares complicados, por ejemplo ventanas de cierta complejidad", resume.
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