?Silencio! Se rueda
Ni emisiones, ni ruidos. De Burgos a Logro?o, una pregunta acompa?a a todos durante la segunda etapa de la Vuelta a Espa?a a bordo de un coche el¨¦ctrico 2018: ?hay alguien ah¨ª?
"?Estar¨¢ arrancado?". Es lo primero que le viene a la cabeza a cualquiera que se ponga al volante de un coche el¨¦ctrico por primera vez. Acostumbrados al ruido del motor de los coches de combusti¨®n, en los el¨¦ctricos no hay vibraciones ni ruido al pulsar el bot¨®n de contacto. Porque estos veh¨ªculos ya no necesitan introducir la llave tras el volante y girarla: todo funciona por proximidad y contacto. El cuadro de instrumentos se ilumina, una suave melod¨ªa indica que todo est¨¢ listo para iniciar la marcha y una palabra destaca tras el volante: ¡°Ready¡±. Tan silencioso como encender la luz o desbloquear el m¨®vil.
Uno de los grandes puntos a favor de los veh¨ªculos el¨¦ctricos es que reducen la contaminaci¨®n con la que todo el mundo se siente comprometido, la atmosf¨¦rica, pero tambi¨¦n otra que casi siempre pasa desapercibida: la ac¨²stica. ?Por qu¨¦?
El motor de explosi¨®n, mayoritario en las carreteras de casi todos los pa¨ªses, es ruidoso por naturaleza: funciona al hacer explotar miles de veces por minuto la mezcla entre aire y combustible en sus cilindros. ?Qu¨¦ ocurre si se eliminan estas explosiones de la ecuaci¨®n? Que el ¨²nico sonido que queda es el producido por los neum¨¢ticos al rodar y el del aire que se desplaza alrededor del veh¨ªculo: ¡°Un placer para aquellos que lo han podido experimentar y un lujo para los que lo disfrutan a diario¡±, comenta Francisco Javier Rodr¨ªguez, especialista en Servicios T¨¦cnicos de Endesa y protagonista al volante de esta segunda etapa de la Vuelta (El¨¦ctrica) a Espa?a entre Burgos y Logro?o.
Los peligros de no ser escuchado
El recorrido comienza en Burgos, enfrente del Museo de la Evoluci¨®n Humana. No pod¨ªa haberse escogido mejor ubicaci¨®n, ya que es inevitable establecer una relaci¨®n directa entre el desarrollo del hombre y el de su medio de transporte m¨¢s utilizado, el coche, inmerso en su propia evoluci¨®n al sustituir los motores t¨¦rmicos por los el¨¦ctricos. Nada m¨¢s arrancar se comprueba que esa conversi¨®n es casi un salto evolutivo: con el veh¨ªculo totalmente cargado, la primera sensaci¨®n es la de un deslizamiento suave que invita a una conducci¨®n relajada y distendida.
Pero, ?qu¨¦ ocurre con el resto de conductores y con los peatones que rodean a un coche que apenas se oye? ¡°Esa falta de ruido puede convertirse en un arma de doble filo¡±, afirma Francisco Javier Rodr¨ªguez. ¡°Por un lado, la mejora de la conducci¨®n es clara pero, por otro, hay que prestar especial atenci¨®n al circular por n¨²cleos urbanos¡±. Algunos modelos emiten un leve zumbido mientras circulan a baja velocidad para alertar a los peatones de la proximidad del coche. Aun as¨ª, Rodr¨ªguez reconoce que en ciertas ocasiones, al circular por zonas urbanas, ha tenido que tocar la bocina despu¨¦s de conducir lentamente durante varios minutos detr¨¢s de alg¨²n grupo de personas que, ocupando la carretera, no se ha percatado de su presencia. Nada que no se resuelva, como conductor, prestando algo de atenci¨®n a lo que rodea al coche y, como peat¨®n, acostumbr¨¢ndose a mirar. La diferencia entre escuchar un motor y respirar sus humos a no hacerlo merece la pena.
Tejados de vino
Tras conducir unos kil¨®metros por la A-1 y dejar de lado la autopista, la ruta comienza a alternar vi?edos y pueblos antes de alcanzar Logro?o. Previamente, y entrando en ?lava, el sol y los colores del oto?o visten elegantemente el recorrido hasta llegar a las instalaciones de Marqu¨¦s de Riscal, en Elciego. Datada en 1858, se considera la bodega con m¨¢s historia de la provincia. El silencioso convoy de veh¨ªculos el¨¦ctricos Kia se mezcla con los tractores que llevan la uva desde las vides hasta la planta de procesado. Las formas imposibles del edificio contrastan con el entorno, cuya cubierta met¨¢lica fue ideada por su arquitecto, Frank Gehry, para reflejar en sus colores los tonos de los distintos tipos de vino que produce la bodega. Tras un agradable paseo entre sus vi?edos y probar directamente de las vides algunas uvas, es momento de poner rumbo al destino final.
Ya en Logro?o, apenas tardamos unos minutos hasta llegar a la plaza de Navarra, directos al n¨²cleo de la capital riojana. Inevitablemente, el silencio es sustituido por las preguntas de la gente, que se interesa por los coches, y esta etapa, por la siguiente: de Alca?iz (Teruel) a Huesca¡ con sorpresa incluida.
Esta noticia, patrocinada por Endesa, ha sido elaborada por un colaborador de EL PA?S.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.