Prisiones descarta dar la semilibertad a los encarcelados por las ¡®tarjetas black¡¯

Las c¨¢rceles madrile?as de Navalcarnero y Soto del Real, entre las que se reparten los 15 condenados por las tarjetas black de Caja Madrid y Bankia que tuvieron que ingresar en prisi¨®n, han remitido en los ¨²ltimos d¨ªas a la Secretar¨ªa General de Instituciones Penitenciarias la propuesta para clasificar a 13 de ellos en el llamado segundo grado penitenciario o r¨¦gimen ordinario. Entre ellos se encuentran el exvicepresidente del Gobierno Rodrigo Rato y Estanislao Rodr¨ªguez-Ponga, que fuera secretario de Estado de Hacienda en los Gobiernos de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar. De este modo, los responsables de ambas c¨¢rceles rechazan aplicarles, como hab¨ªan pedido algunos de ellos, el tercer grado o r¨¦gimen de semilibertad. La clasificaci¨®n en segundo grado les impedir¨¢, entre otros beneficios, disfrutar de permisos al menos hasta que hayan cumplido una cuarta parte de sus condenas.

La situaci¨®n de los dos sobre los que a¨²n no hay propuesta ¡ªAntonio Romero L¨¢zaro y Rub¨¦n Cruz Orive¡ª se decidir¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas ya que entraron en prisi¨®n m¨¢s tarde que el resto tras solicitar un aplazamiento por diferentes motivos a la Audiencia Nacional, que hab¨ªa puesto como fecha tope el 29 de octubre para que los 15 se personaran voluntariamente en la c¨¢rcel que eligieran. Romero lo hizo el 6 de noviembre en la prisi¨®n de Navalcarnero. Cruz Orive, el 26 del mismo mes en la de Soto del Real. Fuentes penitenciarias apuntan a que la propuesta para ambos ser¨¢, previsiblemente, id¨¦ntica a la del resto de encarcelados por las tarjetas black.

La decisi¨®n de clasificar a los 13 en segundo grado ha sido tomada por las Juntas de Tratamiento de ambos centros penitenciarios ¡ªformadas por el director, el subdirector de tratamiento, el jefe m¨¦dico, un trabajador social, un educador y un jefe de servicios de cada una de ellas¡ª y a¨²n no es firme. Debe ser ratificada por los servicios centrales de la Secretar¨ªa General de Instituciones Penitenciarias, algo que las fuentes consultadas dan por seguro. No obstante, los reclusos pueden recurrirla ante del juez de Vigilancia Penitenciaria de la Audiencia Nacional, Jos¨¦ Luis de Castro, ya que fue este ¨®rgano judicial el que los sentenci¨® en primera instancia. De confirmarse finalmente el segundo grado penitenciario, permanecer¨¢n en dicha clasificaci¨®n, al menos, seis meses. Solo entonces ser¨¢ revisada de nuevo por las Juntas de Tratamiento.

Fuentes penitenciarias aseguran que entonces s¨ª se plantear¨¢ que algunos pasen al tercer grado siempre y cuando hayan hecho frente a las responsabilidades econ¨®micas a las que fueron condenados por malgastar el dinero con las tarjetas black. El Tribunal Supremo ya aplic¨® sustanciales reducciones de condena a 35 de los 36 condenados que devolvieron el dinero antes del juicio en la Audiencia Nacional ¡ª¨²nicamente no lo hizo con Rato al considerar que mantuvo y extendi¨® el fraude al llegar a la presidencia de la entidad¡ª, lo que permiti¨® a todos ellos librarse de ingresar en la c¨¢rcel.

De los que entraron en prisi¨®n, el antiguo dirigente de CC OO Antonio del Rey de Vi?as, condenado a dos a?os y seis meses, ya intent¨® obtener la semilibertad de manera inmediata, algo contemplado por el r¨¦gimen penitenciario. Lo hizo al presentarse el 15 de octubre en el Centro de Inserci¨®n Social (CIS) Victoria Kent, un establecimiento penitenciario destinado precisamente a reclusos en tercer grado situado en la ciudad de Madrid. Sin embargo, la direcci¨®n del centro lo rechaz¨® y lo envi¨® a la prisi¨®n de Navalcarnero. La entrada de Del Rey en esta c¨¢rcel atrajo a la misma a otros siete condenados: los sindicalistas Rodolfo Benito (CC OO) y Miguel ?ngel Abej¨®n (UGT); los exconsejeros de Caja Madrid por el PSOE Jos¨¦ Mar¨ªa de la Riva, Jorge G¨®mez Moreno, Francisco P¨¦rez Fern¨¢ndez y Antonio Romero, y el del PP Javier de Miguel S¨¢nchez.

El resto de condenados se concentr¨® en la c¨¢rcel de Soto del Real, donde el 18 de octubre ingres¨® en primer lugar Rodr¨ªguez-Ponga. Le siguieron en los siguientes d¨ªas Rato, Gonzalo Mart¨ªn Pascual (UGT), ?ngel Eugenio G¨®mez del Pulgar (PSOE), Francisco Baquero (CC OO), Jos¨¦ Antonio Moral Sant¨ªn y Rub¨¦n Cruz (ambos de IU). Tanto la direcci¨®n de esta prisi¨®n como la de Navalcarnero optaron por recluir a los 15 en los m¨®dulos de respeto. Estos son espacios destinados a acoger a aquellos condenados que ingresan por primera vez en una prisi¨®n y tienen penas bajas ¡ªcomo ocurre con los de las black¡ª, y a reclusos poco conflictivos, de edad avanzada o que por su buen comportamiento han conseguido un destino laboral dentro de la prisi¨®n. Son espacios dentro de la prisi¨®n caracterizados por la ausencia de altercados y donde los internos se comprometen a cumplir unas normas de convivencia, repartirse tareas y autogestionar los conflictos que surjan.