La City depende del pragmatismo de Bruselas

Si hay un sector econ¨®mico en el que el Gobierno brit¨¢nico se est¨¢ afanando a fondo para evitar su colapso si no hay acuerdo en los t¨¦rminos de la salida de Reino Unido de la Uni¨®n Europea, ese es el financiero. Y con raz¨®n: las finanzas emplean a m¨¢s de un mill¨®n de personas y en 2017 generaron el 6,5% la riqueza nacional. El Tesoro brit¨¢nico ingres¨® 27.300 millones de libras en impuestos a la banca en el a?o fiscal 2016-2017, y la City of London Corporation estima que el sector financiero en su conjunto (incluyendo a las aseguradoras) genera unos ingresos fiscales de m¨¢s de 70.000 millones de libras, el 11% del total nacional.

La pesca, en manos brit¨¢nicas

Marcharse sin acuerdo convertir¨ªa a Reino Unido de un d¨ªa para otro en amo y se?or de sus riqu¨ªsimos caladeros, que ahora comparte con la UE. Algo que inquieta a muchos pa¨ªses, con Espa?a y Francia a la cabeza. Se estima que 18.000 pescadores y 3.500 embarcaciones comunitarias pueden verse afectados por el Brexit. Si no hay pacto, podr¨ªan ir al paro m¨¢s de 6.000 trabajadores continentales que ahora dependen del sector pesquero brit¨¢nico.

La flota espa?ola en aguas brit¨¢nicas (de mayor¨ªa gallega) supera los 140 barcos: 97 (70 con bandera espa?ola y 27 de propiedad espa?ola pero bandera brit¨¢nica) en los caladeros de Gran Sol (Atl¨¢ntico norte) y, el resto, en las islas Malvinas (Atl¨¢ntico sur), donde operan 25 barcos con bandera espa?ola y 19 con pabell¨®n ingl¨¦s.

El problema para Reino Unido es que esa soberan¨ªa recuperada puede ser m¨¢s te¨®rica que real porque necesita llegar a acuerdos tras el Brexit casi tanto como la flota comunitaria. Primero, porque su propia flota tambi¨¦n act¨²a en aguas europeas: seg¨²n datos de Alianza de Pesca Europea, en 2015 la flota de la UE 27 que opera en el Atl¨¢ntico norte realiz¨® un tercio de sus capturas en aguas brit¨¢nicas, mientras que los brit¨¢nicos lograron el 20% de las suyas en aguas comunitarias del Atl¨¢ntico noreste. Y, segundo, porque casi el 70% de las exportaciones pesqueras brit¨¢nicas van a mercados de la UE y, sin pacto, ser¨¢ m¨¢s dif¨ªcil y mucho m¨¢s caro acceder a esos mercados.

Londres juega aqu¨ª con una ventaja muy importante. As¨ª como las empresas manufactureras brit¨¢nicas dependen mucho m¨¢s de Europa que lo contrario, en el sector financiero no ocurre lo mismo. El peso brit¨¢nico es tan grande que las empresas continentales que ahora trabajan con la City podr¨ªan sufrir tanto o m¨¢s que las firmas brit¨¢nicas si hay un Brexit sin acuerdo.

Por eso existe la creencia generalizada de que la UE tiene tanto inter¨¦s en evitar el colapso de la City de Londres como el Gobierno brit¨¢nico. De hecho, a finales del a?o pasado Downing Street tuvo que desmentir que se hab¨ªa alcanzado ya un principio de acuerdo con Bruselas sobre el futuro marco de relaciones en el sector financiero, indicio de que la maquinaria negociadora est¨¢ mucho m¨¢s engrasada al hablar de capital que en otras actividades econ¨®micas.

Portazo y riesgo

Eso no quiere decir que la City no corra riesgos en caso de portazo. En el sistema actual, las empresas financieras del Espacio Econ¨®mico Europeo (EEE) disfrutan de un llamado pasaporte en virtud del cual toda actividad legalizada en un pa¨ªs es considerada autom¨¢ticamente legal en todos los dem¨¢s. Ese pasaporte se mantendr¨¢ al menos hasta diciembre de 2020 si Reino Unido se va de la UE con un acuerdo. Para entonces se supone que se habr¨ªa negociado ya un Tratado de Libre Comercio entre las partes.

Pero si Reino Unido abandona la UE sin acuerdo, el sector financiero brit¨¢nico actuar¨¢ en el exterior de acuerdo con las reglas de la Organizaci¨®n Mundial de Comercio (OMC). Es decir, perder¨¢ el pasaporte. Y sus entidades financieras deber¨¢n ser legalizadas en todos y cada uno de los pa¨ªses donde quieran trabajar.

Eso podr¨ªa ser ca¨®tico. Por ello, Reino Unido ya ha anunciado que autorizar¨¢ a operar en su territorio a las firmas del EEE durante un periodo de tres a?os tras el Brexit y permitir¨¢ tambi¨¦n a las compa?¨ªas no brit¨¢nicas seguir proveyendo servicios de compensaci¨®n bancaria (clearing) a las entidades brit¨¢nicas durante tres a?os. Eso es muy importante en s¨ª mismo, pero el 40% de las exportaciones de servicios financieros brit¨¢nicas van a la UE y quedar¨ªan paralizadas si Bruselas no toma medidas rec¨ªprocas. La City est¨¢ en manos del pragmatismo de Bruselas.