Precio de la vivienda

La escuela escol¨¢stica de Alcal¨¢ de Henares y Salamanca en el siglo XVI ya explicaba la din¨¢mica de la econom¨ªa de mercado y los precios. Desde hace milenios, cuando alguien quiere comprar y alguien quiere vender hay un precio al que se ponen de acuerdo, puede ser con dinero o con trueque. Un ejemplo es la mansi¨®n que se compraron Pablo Iglesias e Irene Montero.

Por concepto, para que haya mercado, la oferta y la demanda siempre son iguales. Cuando hay presi¨®n compradora los vendedores de viviendas suben los precios. Y al rev¨¦s en la crisis cuando las ventas de viviendas se hundieron el que quer¨ªa vender su casa ten¨ªa que bajar el precio.

En la mayor¨ªa de provincias los precios siguen por debajo de los m¨¢ximos de 2007 y en la Espa?a vac¨ªa los precios caen. Pero en las ciudades m¨¢s din¨¢micas donde crece el empleo y la poblaci¨®n los precios han subido con fuerza desde 2014. Seg¨²n Idealista, en el ¨²ltimo trimestre de 2018 los precios empezaron a bajar. Eso estar¨ªa indicando que la demanda pierde fuerza y si tienes prisa por vender hay que bajar el precio que ofreces. En Barcelona, seg¨²n Idealista, los precios llevan dos a?os cayendo. El intento de independencia fracas¨® pero est¨¢ dejando consecuencias econ¨®micas.

El mayor problema es en el alquiler. La oferta es muy restringida y la presi¨®n de demanda es muy intensa. Las nuevas generaciones cambian sus gustos y prefieren vivir en el centro de las ciudades y prescindir del coche. Los salarios de los j¨®venes son precarios y comparten pisos grandes, lo cual permite a los propietarios aumentar el precio por partes m¨¢s que cuando lo alquilaban entero. A eso debemos sumar el boom de alquiler tur¨ªstico, aunque en 2018 las pernoctaciones cayeron con fuerza.

La soluci¨®n es aumentar la oferta y desincentivar el fuerte crecimiento de la demanda. El problema es que el desarrollo de suelo y la construcci¨®n tarda a?os en ejecutarse. Algunos alcaldes, como Juan Espadas en Sevilla, en 2015 priorizaron la vivienda p¨²blica en alquiler y residencias para estudiantes para reducir la presi¨®n sobre los precios. En Barcelona, en 2015 la vivienda preocupaba solo al 2% de los barceloneses y Ada Colau prometi¨® que ser¨ªa su prioridad. Hoy es el principal problema de los barceloneses, Colau no ha hecho pol¨ªtica de vivienda y solo tiene ocurrencias de activista.

Los espa?oles acumulamos principalmente nuestra riqueza en vivienda pero muchas est¨¢n vac¨ªas por miedo al impago. Los seguros privados de impago son caros y no solucionan el problema. El Estado deber¨ªa crear un seguro que garantice al propietario el cobro y al inquilino un precio sin incertidumbre, menor que el de mercado y estable durante un periodo. Planificar y fijar el precio por ley por debajo del precio de mercado suena bien en campa?a electoral pero provocar¨ªa m¨¢s demanda que oferta disponible; tambi¨¦n generar¨ªa frustraci¨®n social y frenar¨ªa en seco la inversi¨®n y la creaci¨®n de empleo en los edificios del centro de las ciudades espa?olas.