Las autoridades advierten del gran crecimiento de los ¡®chiringuitos¡¯ financieros
Los avisos de la CNMV sobre entidades de inversi¨®n no autorizadas aumentan un 19%, hasta 63 advertencias
Es curioso que la jerga burs¨¢til espa?ola est¨¦ cuajada de t¨¦rminos que evocan el mar. Chiringuitos, chicharros o tiburones. Los tres con connotaciones negativas y muy especialmente los chiringuitos financieros que, con promesas de altas rentabilidades, atraen a los inversores para acabar quit¨¢ndoles todo el dinero. Se trata de entidades que ofrecen y prestan servicios de inversi¨®n sin estar registradas en la autoridad supervisora (Comisi¨®n Nacional del Mercado de Valores, CNMV, en el caso de Espa?a). La aparente prestaci¨®n de tales servicios es s¨®lo una tapadera para apropiarse del capital de sus v¨ªctimas. Eso s¨ª, a veces, se pueden obtener resultados positivos durante los primeros meses, pero luego la empresa desaparece y no devuelve el dinero a sus clientes.
Desde la CNMV, que persigue tenazmente estas pr¨¢cticas de enga?o y estafa, apuntan que el verano es un tiempo especialmente propicio para la proliferaci¨®n de estos mal llamados chiringuitos. ¡°Durante el verano aumenta la afluencia de turistas en el litoral espa?ol en general. En este per¨ªodo existe un mayor riesgo de ser contactado por un chiringuito financiero, aunque el peligro perdura todo el a?o. Las llamadas telef¨®nicas y los correos electr¨®nicos son seguidos de contactos cada vez m¨¢s agresivos para captar a las v¨ªctimas. Los grandes hoteles o los centros sociales de reuni¨®n son puntos en los que suelen desplegar su actividad¡±, explican desde el supervisor.
Y los datos son alarmantes por su n¨²mero y el incremento anual que se est¨¢ produciendo pese a las advertencias y al estrecho seguimiento que se hace. La CNMV, presidida por Sebasti¨¢n Albella, hizo un total de 63 avisos el pasado a?o sobre entidades no autorizadas, lo que supone un incremento del 18,9% con respecto a las advertencias realizadas en 2017. En los pa¨ªses miembros de la Uni¨®n Europea la cifra se elev¨® a 557 comunicaciones (447 en 2017); m¨¢s de 500 posibilidades de caer en las redes de estas firmas que operan mayoritariamente a trav¨¦s de Internet.
La facilidad de las redes sociales para mover el dinero ha llevado al organismo supervisor espa?ol a firmar convenios de colaboraci¨®n con la Polic¨ªa Nacional y con la Guardia Civil, con b¨²squedas en blogs, foros, redes sociales, etc¨¦tera.
Ejemplos
Las formas de actuar de estos estafadores financieros son muy variadas. Algunas son simplemente estafas piramidales donde con el dinero que va entrando se va retribuyendo a los primeros hasta que hay una cantidad suficiente para cerrar el chiringuito y desparecer. Eso s¨ª, todo empieza con una llamada telef¨®nica, normalmente hablando de Bolsa, en la que se prometen rentabilidades del 300% al 600% en unas pocas semanas.
Pero hay m¨¦todos m¨¢s sofisticados que permiten alargar la presencia de estas firmas no autorizadas. Por ejemplo, a la mitad de la clientela se le ofrece un valor y se apuesta por su alza. Una subida que ser¨¢ mucho m¨¢s interesante si se hace apalancada, es decir, a trav¨¦s de derivados (futuros u opciones) y as¨ª con cada 10 euros se pueden invertir 100, por ejemplo. A la otra mitad de sus clientes se les ofrece la misma posibilidad sobre la misma acci¨®n pero para que inviertan a la baja, es decir, ganar¨¢n si el valor pierde. Con ello, se aseguran que la mitad de sus clientes est¨¦n temporalmente satisfechos. A la otra mitad se le justifica la p¨¦rdida con palabrer¨ªa y nuevas promesas para que invierta m¨¢s dinero y as¨ª recupere su inversi¨®n.
Uno de los activos que m¨¢s se utilizaba como reclamo eran las opciones binarias, que desde el pasado 2 de julio ya no pueden ser adquiridas por inversores minoristas en toda Europa: han sido prohibidas. La opciones binarias son un sistema de inversi¨®n en el que se apuesta a la subida o bajada en el precio de activos subyacentes que son cotizados en un mercado burs¨¢til durante un tiempo determinado. La principal caracter¨ªstica de estos productos, ¡ªseg¨²n explican en el br¨®ker XTB¡ª es que se trata de predecir si el precio de un bien va a subir o bajar durante un periodo concreto y tan s¨®lo hay dos opciones, ganar o perder todo, de ah¨ª el nombre de binario, y donde las rentabilidades pueden alcanzar grandes sumas.
Tambi¨¦n en la CNMV est¨¢n haciendo hincapi¨¦ ¨²ltimamente en las cuentas de trading (inversiones de d¨ªas, horas, minutos) gestionadas por terceros ¡ªnormalmente traders con experiencia¡ª que deben ofrecerse a los inversores con un contrato de gesti¨®n de carteras, por tanto es un servicio reservado a las entidades debidamente registradas. Por otro lado, las plataformas de social trading (plataformas donde se publican distintas estrategias de inversi¨®n de otros inversores o gestores de ¨¦xito que pueden ser imitadas o replicadas por los clientes) deben igualmente estar registradas.
Captar al cliente
La forma de operar de estos chiringuitos financieros, apuntan desde el organismo supervisor, es casi siempre la misma: primero llaman o contactan por correo electr¨®nico para tantear a los clientes, present¨¢ndose como entidades autorizadas. A continuaci¨®n, realizan un segundo contacto para ofrecer productos financieros con una propuesta clara de inversi¨®n. Una vez captado el cliente con t¨¦cnicas agresivas, la transacci¨®n se lleva a cabo.
Una t¨¢ctica bastante simple pero muy efectiva consiste en realizar un n¨²mero elevado de llamadas. En ellas la entidad se limita a presentarse, sin solicitar dinero ni compromiso alguno. Para demostrar su conocimiento de los mercados financieros, en la mitad de las llamadas afirman estar seguros de la subida de un determinado valor. En otro grupo de llamadas predicen la bajada del mismo valor. En los d¨ªas siguientes repiten el procedimiento, pero s¨®lo con el grupo a quien se realiz¨® la predicci¨®n acertada. Al cabo de varios d¨ªas quedar¨¢n unos cuantos clientes, convencidos de la infalibilidad de una empresa que ha acertado todos sus pron¨®sticos durante varios d¨ªas consecutivos, y por tanto, dispuestos a entregarles sus ahorros, explica el organismo.
Los m¨¦todos m¨¢s recurrentes para cerrar el negocio fraudulento en esta temporada son invitaciones a reuniones sin compromiso o a jornadas informativas en hoteles donde se encuentran los potenciales clientes. En ocasiones, se ganan la confianza de los clientes hablando en su idioma (ingl¨¦s, franc¨¦s, alem¨¢n y ruso) y tambi¨¦n a trav¨¦s de p¨¢ginas web atractivas y con abundante informaci¨®n, que muestra las empresas cotizadas con las que supuestamente trabajan. Ante la sospecha de las v¨ªctimas o a partir de la alerta de la CNMV, los responsables de la entidad desaparecen sin dejar rastro.
Tropezar dos veces
El colmo de los colmos es que, una vez estafados, se acercan a estos clientes empresas denominadas ¡®recovery room¡¯ para prometerles que podr¨¢n recuperar sus p¨¦rdidas o que est¨¢n dispuestos a comprar acciones o valores. En no pocas ocasiones son los mismos ¡®chiringuitos¡¯ disfrazados que aparecen como salvadores del descalabro, u otros dispuestos a pagar sumas importantes por esa lista de clientes enga?ados. El objetivo es que inviertan m¨¢s dinero con la promesa de una recuperaci¨®n y repetir la primera estafa. Aqu¨ª, nuevamente, hay que desconfiar de quien ofrece algo sin haber sido llamado y recurrir al organismo supervisor para saber que esa firma est¨¢ debidamente registrada. Algunas de ellas, incluso, dicen actuar en nombre de la propia CNMV y, por supuesto, este organismo ni sus empleados contactar¨¢n directamente con los afectados ni autorizan el uso de su identidad, imagen corporativa o dominio web. Cualquier sospecha de enga?o deber¨¢ llevar al inversor a informarse en la CNMV o directamente acudir a un juzgado.
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