C¨®mo preservar la rentabilidad de la banca en un entorno de tipos negativos
Los expertos demandan una pol¨ªtica fiscal activa en Europa que alivie la presi¨®n del BCE sobre la banca, y reclaman fusiones nacionales primero, y transfronterizas para ganar tama?o, despu¨¦s
Los tipos de inter¨¦s negativos a los que se enfrenta la banca europea se han convertido en los ¨²ltimos tiempos en el mayor quebradero de cabeza de las entidades para lograr una rentabilidad que cada vez se resiente m¨¢s. Y es que, la dificultad del entorno financiero para generar ingresos ha trastocado el negocio tradicional bancario oblig¨¢ndole a reinventar su modelo.
La entrada de nuevos jugadores que pasan a ofrecer servicios financieros, el tratamiento de los datos de los clientes, la regulaci¨®n, la afloraci¨®n de servicios de pago y de banca en la sombra al margen de la supervisi¨®n y la pol¨ªtica monetaria tan expansiva y por tanto tiempo, son algunos de los principales retos a los que se enfrenta la banca. As¨ª lo expusieron los expertos convocados al debate sobre "El futuro de la actividad financiera", desarrollado en el marco del Foro Futuro, observatorio de tendencias econ¨®micas, organizado por Cinco D¨ªas y Santander. Reclamaron, para combatir la situaci¨®n, m¨¢s implicaci¨®n de la pol¨ªtica fiscal en la lucha contra la deflaci¨®n en Europa para aflojar la presi¨®n de la pol¨ªtica monetaria; defender la competencia de otros actores, pero con neutralidad regulatoria, fusiones para ganar tama?o y extender la prestaci¨®n de servicios para generar ingresos adicionales.
"La realidad es que el ROE (rentabilidad del capital) est¨¢ relacionado con los tipos de inter¨¦s negativos. Si hacemos una comparaci¨®n, la banca americana gana el doble que la europea y tiene un valor en Bolsa que tambi¨¦n es del doble y esto b¨¢sicamente se explica por los tipos aqu¨ª y en EE UU. Solo en Europa tenemos tipos negativos de esta magnitud", se?ala Fernando Fern¨¢ndez, del Instituto de Empresa Business School.
El desaf¨ªo de las criptomonedas
Intento fallido de Facebook. Los expertos se?alan que el intento (por ahora fallido) de Facebook al intentar lanzar la criptodivisa Libra ha supuesto un toque de atenci¨®n a los bancos centrales que hasta ahora pose¨ªan el monopolio de emisi¨®n. "Los bancos centrales no quieren perder el monopolio de emisi¨®n y ahora han visto que ser¨¢ electr¨®nico. Ese ser¨¢ el gran cambio", anticipa Fernando Fern¨¢ndez.
Inclusi¨®n financiera. Igualmente, los cuatro ponentes subrayan que la iniciativa de Facebook ha supuesto un intento de generalizar el acceso al dinero electr¨®nico a escala global, incluyendo financieramente a grupos que no tienen acceso a una cuenta corriente en el banco. Un proyecto similar al que Santander tiene en Brasil con Prospera, un modelo de microcr¨¦ditos productivo, dirigido fundamentalmente a personas sin acceso al sistema financiero.
Precisamente, los tipos de inter¨¦s, que se mantienen en m¨ªnimos hist¨®ricos, no van a cambiar en el medio y largo plazo. Una situaci¨®n que est¨¢ restando competitividad al sector bancario europeo frente a otras regiones como Norteam¨¦rica o Asia y adem¨¢s, si se prolonga en el tiempo, podr¨ªa tener consecuencias negativas para el sistema econ¨®mico. Seg¨²n exponen los expertos, los bancos se enfrentan a una situaci¨®n parad¨®jica en la que tienen que cobrar menos por el cr¨¦dito concedido y al mismo tiempo deben pagar por el exceso de liquidez. Adem¨¢s, deben hacer frente a una inversi¨®n tecnol¨®gica muy fuerte y creciente para poder competir.
"Hay dos falacias instaladas en el imaginario p¨²blico: que el sector financiero es conservador y que los bancos ganan mucho dinero. La banca ha hecho un cambio radical; es verdad que la rentabilidad es manifiestamente mejorable, pero hay una presi¨®n p¨²blica y del Gobierno para poner m¨¢s impuestos. Todo ello unido a los tipos de inter¨¦s negativos est¨¢ erosionando la rentabilidad. Hay que ser cuidadosos con estos temas porque estamos poniendo a los bancos en una posici¨®n lesiva en la competencia internacional", a?ade Fern¨¢ndez.
En esa l¨ªnea, durante la crisis financiera los bancos estuvieron bajo el punto de mira de la opini¨®n p¨²blica debido a las ayudas recibidas por parte del Estado. No obstante, Francisco P¨¦rez, del Instituto Valenciano de Investigaciones Econ¨®micas (IVIE), se?ala que la reputaci¨®n de la banca durante la crisis se ha menoscabado injustamente, ya que lo que se preserv¨® fueron los dep¨®sitos de los clientes. "Los bancos est¨¢n preocupados por su imagen como empresas y como sector. A la banca le sale muy caro para su reputaci¨®n cuando se confunde salvar a los depositantes con salvar a los accionistas", expresa.
Uno de los grandes retos de la banca es culminar la uni¨®n bancaria europea con un mercado ¨²nico. Seg¨²n valora Alejandra Kindel¨¢n, responsable del Servicio de Estudios de Santander, esta uni¨®n mejorar¨ªa la competitividad, permitir¨ªa desarrollar herramientas digitales y crear sinergias. De esta forma, se podr¨ªa dar lugar, posteriormente, a las fusiones transfronterizas, tan anheladas por los supervisores. "La posibilidad de acceder a un mercado ¨²nico en Europa nos dar¨ªa a todos muchas ventajas. En un entorno en el que tenemos que invertir en tecnolog¨ªa, en capacidad de desarrollar plataformas y herramientas, todo esto se podr¨ªa hacer de manera m¨¢s eficiente. Ese ser¨ªa el paso previo a tener bancos europeos", explica la directora de Servicio de Estudios de Santander.
Seg¨²n los datos proporcionados por Santiago Carb¨®, director de Estudios Financieros de Funcas, la financiaci¨®n bancaria transfronteriza en Europa solo ha crecido un 2% mientras que la no bancaria se ha incrementado por encima del 13% este a?o. Una situaci¨®n que se explica por la b¨²squeda de mayor rentabilidad huyendo de los tipos negativos, pero que puede poner en peligro las finanzas, ya que muchas veces se trata de operaciones promovidas por actores que se encuentran al margen de la supervisi¨®n bancaria, y que una buena parte se ha conocido como la banca en la sombra.
"Si creemos que la regulaci¨®n bancaria es relativamente razonable para evitar una nueva crisis, en realidad se nos escapa de las manos porque hay un gran flujo de capital que no pasa por los balances bancarios. La eclosi¨®n de la banca en la sombra tiene que ver con una b¨²squeda de mayor rentabilidad y eso implica mayores riesgos", asegura Carb¨®. Adem¨¢s, contin¨²a el director de Funcas, "se est¨¢ financiando a empresas a las que quiz¨¢ no deber¨ªan ofrecerles financiaci¨®n porque sobreviven debido al cr¨¦dito barato que obtienen, lo que las hace comportarse como aut¨¦nticas empresas zombis".
En ese sentido, Francisco P¨¦rez avisa del peligro para la econom¨ªa de los sistemas al margen de la supervisi¨®n bancaria, ya que carecen de la misma garant¨ªa. "Una de las lecciones que aprendimos de la crisis es que el desempe?o en algunos casos ineficiente del sistema bancario ha conducido a problemas vividos en los ¨²ltimos a?os esos mismos riesgos existen para los nuevos actores y adem¨¢s sobre estos sabemos muy poco porque hay actividades que se encuentran a la sombra de la regulaci¨®n", indica el catedr¨¢tico y director de IVIE.
Precisamente, con la entrada de nuevos jugadores no bancarios en el sistema financiero, gracias a la directiva de pagos PSD2 se abre un escenario asim¨¦trico para las entidades: deben compartir los datos de sus clientes con terceros pero no pueden acceder a los datos de los clientes de estas empresas. Por ello, los bancos vienen reclamando una misma regulaci¨®n para todos los actores, tal como pone de manifiesto Alejandra Kindel¨¢n, de Santander.
"El futuro de todos va a depender del acceso que se pueda tener a los datos de los usuarios y de la capacidad de utilizarlos. Tenemos una normativa europea que nos obliga a dar datos a terceros que ofrezcan servicios de pago, pero como entidades ninguna empresa comparte datos con nosotros. Eso nos permitir¨ªa hacer buenos perfiles de riesgo y si pudi¨¦ramos incorporar datos no financieros dar¨ªamos un mejor servicio", valora Alejandra Kindel¨¢n.
Y es que, dado el volumen de informaci¨®n sobre los usuarios que albergan las grandes tecnol¨®gicas, unido a los datos bancarios, podr¨ªa crear gigantes en el uso y manejo de datos. "Para el futuro lo m¨¢s importante es la regulaci¨®n de datos y compartir la informaci¨®n. Es un tema de competencia, porque las dem¨¢s empresas van a tener una situaci¨®n monopol¨ªtica en materia de datos", concluye Santiago Carb¨®.
Servicios de pago de alto valor a?adido
Uno de los temas m¨¢s candentes en el sector financiero es la decisi¨®n que han adoptado algunas entidades de comenzar cobrar por los dep¨®sitos. Hasta ahora, los bancos en Espa?a tan solo cobran a algunos clientes mayoristas e institucionales, pero ante el coste que tiene para las entidades guardar dinero se ha planteado comenzar a cobrar a los particulares por sus cuentas corrientes.
Seg¨²n los expertos que participaron en Foro Futuro la clave a partir de ahora para las entidades ser¨¢ desarrollar paquetes b¨¢sicos gratuitos para el cliente y otros servicios que aporten un alto valor a?adido por los que se pueda comenzar a cobrar. De esta forma, los bancos diversificar¨ªan su negocio y encontrar¨ªan palancas nuevas para aumentar los ingresos y elevar la rentabilidad ante la dificultad para generar m¨¢rgenes con el negocio tradicional, derivada del entorno de tipos.
"En Espa?a los bancos tenemos uno de los mejores sistemas en relaci¨®n calidad-precio y las comisiones cobradas son muy inferiores a todos los competidores comparables. En general ofrecemos m¨¢s productos por los que no cobramos. Esto nos tiene que hacer pensar que debemos desarrollar nuevos servicios que aporten un valor a?adido al cliente por los que s¨ª podamos cobrar", se?ala Alejandra Kindel¨¢n.
Actualmente, el tipo de facilidad de dep¨®sito se encuentra en el -0,5% por lo que algunos clientes poco vinculados a los bancos han dejado de ser rentables. "Si se va a empezar a cobrar por los dep¨®sitos dejar¨¢n de tener el papel que ten¨ªan hasta ahora porque no le interesar¨¢ ni al proveedor ni al cliente", apunta Santiago Carb¨®.
La situaci¨®n que plantean los expertos es que las entidades pasar¨¢n a estudiar cada caso para determinar a qu¨¦ clientes cobran por sus dep¨®sitos y a cu¨¢les no. De hecho, la banca no ha comenzado a cobrar a todos los clientes corporativos e institucionales, sino los que cumplen con unos requisitos determinados en cuanto a volumen que mantienen en la cuenta y su vinculaci¨®n con la entidad.
"Las cuentas corrientes tienen un coste cuando deber¨ªa suponer unos ingresos. Es la primera cuesti¨®n que ha roto todos los esquemas, porque guardar un dep¨®sito no es gratis. En este momento no es f¨¢cil acostumbrar a un cliente al que le han dado un servicio gratis durante mucho tiempo y ahora comenzarle a cobrar. En Espa?a se ha optado por ofrecer un paquete b¨¢sico y cobrar por servicios adicionales, pero en Francia o Alemania cobran por las cuentas corrientes. Hay un reto importante de educar al consumidor para pedirle que pague por servicios que antes eran gratuitos", considera Fernando Fern¨¢ndez.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.