Doce socios impiden que las empresas informen de sus impuestos en cada pa¨ªs de la UE
Suecia, Irlanda, Luxemburgo o Malta mantienen el veto a la iniciativa de Bruselas
La UE se ha dado de bruces en una de las principales medidas para atajar la evasi¨®n fiscal, que supone una merma de hasta 70.000 millones de euros anuales en las arcas de las haciendas de los Veintiocho. Los ministros de Finanzas volvieron ayer a plasmar la divisi¨®n existente para dar luz verde a una directiva para que las grandes multinacionales declaren sus beneficios y los impuestos que pagan pa¨ªs por pa¨ªs. Luxemburgo, Irlanda o Suecia siguen resisti¨¦ndose a una medida que cuenta con el apoyo de Espa?a, Italia o Francia.
Los pa¨ªses de la UE ya rechazaron esa propuesta, impulsada por la Comisi¨®n Europea en 2016 a ra¨ªz del esc¨¢ndalo de los Papeles de Panam¨¢, hace apenas una semana. Sin embargo, ayer el debate volvi¨® a la mesa de los ministros de Finanzas a petici¨®n de la ministra sueca, Magdalena Andersson. Junto a otros pa¨ªses, Suecia demand¨® sacar esa discusi¨®n del Consejo de Competitividad y llevarlo al de Econom¨ªa y Finanzas (Ecofin). La medida requiere de unanimidad entre los Veintiocho para salir adelante en el Ecofin, mientras que en el otro foro necesita una mayor¨ªa cualificada ¡ªun 55% de los pa¨ªses miembros que representen el 65% de la poblaci¨®n¡ª.
La propuesta formulada por la Comisi¨®n exige que las multinacionales que facturan m¨¢s de 750 millones de euros en la UE est¨¦n obligadas a presentar a los pa¨ªses miembros un informe con los beneficios que obtienen y los tributos que pagan en su pa¨ªs. Esa medida tiene como objetivo la lucha contra la evasi¨®n de impuestos y la planificaci¨®n fiscal agresiva y est¨¢ dentro de las recomendaciones contempladas por la OCDE.
Los pa¨ªses contrarios a esa medida se agarran a se?alar que la base legal de la que parte la Comisi¨®n Europea y la presidencia finlandesa es err¨®nea, puesto que se trata de un asunto tributario que debe ser aprobado por unanimidad. Si bien un informe de los servicios jur¨ªdicos del Consejo avala esa tesis, el Parlamento Europeo y el Ejecutivo comunitario tambi¨¦n est¨¢n armados por sus abogados para defender lo contrario.
Los pa¨ªses del bloqueo
En total, 12 pa¨ªses siguen bloqueando esa carpeta que pasar¨¢ a manos de la presidencia rotatoria de Croacia en enero. Entre ellos, est¨¢n Luxemburgo, Irlanda, Chipre, Malta o Suecia. El ministro de Finanzas de Luxemburgo, Pierre Gramegna, insisti¨® en la necesidad de un acuerdo global. ¡°Debemos ver qu¨¦ hacen nuestros socios de la OCDE. Si nosotros lo publicamos y ellos no, resultar¨¢ problem¨¢tico. En este asunto debemos avanzar de forma paralela¡±, sostuvo.
Tambi¨¦n el titular irland¨¦s esgrimi¨® el mismo argumento. ¡°Hemos conseguido mucho en la lucha contra la planificaci¨®n fiscal agresiva y la evasi¨®n de impuestos. Est¨¢ en el debate de la OCDE y nuestras autoridades nacionales han tomado medidas¡±, defendi¨®.
Sin embargo, los pa¨ªses que apoyan la medida ¡ªsolo Alemania se queda al margen con su abstenci¨®n¡ª ven con recelos esa posici¨®n, puesto que creen que la cuesti¨®n de la base legal sirve solo para secuestrar el debate. El ministro de Finanzas italiano, Roberto Gualtieri, dijo estar sorprendido por la pasi¨®n de sus colegas defendiendo que era una cuesti¨®n fiscal y no de competitividad. ¡°Me temo que la finalidad es acabar con un texto descafeinado y no potente y contundente¡±, expuso.
Tambi¨¦n fue clara la ministra espa?ola en funciones, Nadia Calvi?o, quien advirti¨® al resto de la mesa de que una de las prioridades del ciclo pol¨ªtico que acaba de arrancar en Bruselas ser¨¢ la ¡°armonizaci¨®n fiscal¡±. Y no solo de impuestos tradicionales. Con la vista puesta en la reacci¨®n de EE UU a la tasa Google francesa, Calvi?o record¨® que deber¨¢n afrontar de nuevo el impuesto comunitario a las grandes tecnol¨®gicas ¡ªbloqueado, entre otros, por Suecia e Irlanda¡ª y los tributos verdes.
El vicepresidente de la Comisi¨®n Europea, Valdis Dombrovskis, record¨® que esa iniciativa es una ¡°prioridad¡± para la Bruselas y record¨® que no afecta a competencias fiscales de los pa¨ªses miembros, sino que se trata de un ejercicio de transparencia.
Nuevas exigencias para los bonos verdes en Europa
El mercado de los llamados bonos verdes va a experimentar una sacudida despu¨¦s de que las instituciones comunitarias acordaran ayer un conjunto de reglas para definir los productos financieros que pueden ser considerados o no verdes. Esa propuesta supone la creaci¨®n de tres nuevas categor¨ªas bajo las cuales se enmarcar¨¢n esos bonos dependiendo de su grado de sostenibilidad.
Los productos financieros que quieran llevar esa etiqueta deber¨¢n informar sobre su grado de cumplimiento con las exigencias que planteen las instituciones europeas. El acuerdo deber¨¢ ser respaldado ahora por los pa¨ªses miembros la semana que viene. Las organizaciones ecologistas, como WWF, se apresuraron a aplaudir ese pacto como un paso en la buena direcci¨®n.
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