Bruselas redobla la presi¨®n a Berl¨ªn para lanzar un plan que incluya los ¡®coronabonos¡¯
La UE estudia varias f¨®rmulas para dar una respuesta masiva a las consecuencias de la pandemia
La potente intervenci¨®n del Banco Central Europeo (BCE) ha dejado sin excusas a los Gobiernos. Bruselas quiere ahondar en el compromiso ¡°sin l¨ªmites¡± con el euro que Christine Lagarde mand¨® a los ciudadanos y a los mercados. La Comisi¨®n Europea redobl¨® ayer la presi¨®n sobre Berl¨ªn para que d¨¦ luz verde a una ofensiva comunitaria contra las consecuencias econ¨®micas de la epidemia. La Uni¨®n Europea intenta acercar posiciones entre norte y sur para hallar una f¨®rmula que le permita lanzar los llamados coronabonos.
El Eurogrupo es un foro en el que sus ministros se ponen antes de acuerdo en el nombre de la cosa que en la propia cosa. El t¨¦rmino coronabonos se ha popularizado ya en Bruselas, pero ayer a¨²n nadie pod¨ªa dar cuentas sobre su significado. Tras dos reuniones con pobres resultados, las capitales allanan el terreno para otro Eurogrupo que permita dar plena cobertura al primer golpe contra la recesi¨®n.
El BCE insiste en que no puede cargar con todo el peso de la batalla contra la crisis. Los pa¨ªses tampoco. Y menos, los que arrastran una elevada deuda y ahora afrontan una mayor emergencia. Par¨ªs y Roma siguen tratando de vencer el bloqueo de Berl¨ªn y La Haya para dar una respuesta fiscal conjunta con el apoyo de la Comisi¨®n Europea. Su presidenta, Ursula von der Leyen, abri¨® la puerta en una entrevista a la radio alemana Deutschlandfunk a recurrir a los coronabonos en caso de que ¡°est¨¦n bien estructurados¡± y contribuyan a ¡°afrontar la crisis¡±.
Todo apunta a que esos coronabonos est¨¢n lejos de ser una mutualizaci¨®n de la deuda de varios pa¨ªses. Se tratar¨ªa de un bazuca a nivel comunitario que podr¨ªa tener forma de pr¨¦stamos. El fondo de rescate europeo (MEDE) se antoja el arma m¨¢s adecuada al tener una potencia de fuego de 410.000 millones de euros. Y a su vez, ofrece m¨²ltiples opciones: desde la preferida por los halcones ¡ªlos programas para pa¨ªses vinculados a reformas y ajustes¡ª hasta la que defiende Espa?a, que pasar¨ªa por l¨ªneas de cr¨¦dito precautorias disponibles para toda la zona euro.
Roma reh¨²ye a toda costa de cualquier soluci¨®n que suponga el m¨ªnimo estigma para su econom¨ªa y que la someta a la receta de la austeridad, por lo que pide algo completamente nuevo. Pero Alemania y los Pa¨ªses Bajos siguen sin verlo claro. ¡°Nada est¨¢ encima de la mesa hasta que lo hayamos analizado¡±, sostienen fuentes diplom¨¢ticas.
De ah¨ª que se exploren otras opciones, como que el Banco Europeo de Inversi¨®n (BEI) pueda emitir los coronabonos y prestar o incluso la propia Comisi¨®n Europea con fondos presupuestarios como garant¨ªa. En este ¨²ltimo caso, los pr¨¦stamos deber¨ªan hacerse extensivos a los 27 socios de la UE.
Los contactos entre las capitales ayer se multiplicaron. Por la ma?ana, a nivel t¨¦cnico, y por la tarde, entre ministros y colaboradores. Los titulares de Finanzas se propon¨ªan dar el empuje necesario para verse en dos ocasiones antes de la cumbre virtual de jefes de Estado y de Gobierno del pr¨®ximo jueves. El Consejo de Ministros de la UE (Ecofin) debe servir para dar la luz verde final a la flexibilidad en las reglas fiscales, mientras que el Eurogrupo deber¨ªa perfilar el instrumento para canalizar nuevas medidas fiscales. A partir de ah¨ª, en Bruselas se conf¨ªa en la capacidad de los l¨ªderes de los 27 pa¨ªses para sacar adelante una propuesta que tal vez deba pasar por sus Parlamentos nacionales.
El primer ministro italiano, Giuseppe Conte, advirti¨® ayer en una entrevista al Financial Times que la zona euro debe seguir los pasos del BCE en el terreno presupuestario, adaptando el MEDE a las nuevas circunstancias. ¡°El tiempo apremia¡±, avis¨® Conte ante la emergencia sanitaria que atraviesa Italia. El ministro de Finanzas franc¨¦s, Bruno Le Maire, se uni¨® a las demandas expresadas por el primer ministro italiano. ¡°Lo que est¨¢ en juego en los pr¨®ximos d¨ªas y semanas es la unidad de la zona euro¡±, afirm¨® ante su Parlamento Le Maire, quien incluso consider¨® que de esta crisis la zona euro puede salir m¨¢s fuerte o desaparecer.
Bruselas cerr¨® filas con Par¨ªs y Roma, que llevan desde el principio de la crisis pidiendo una respuesta firme de la UE. Lo hizo a primera hora de la ma?ana el comisario de Econom¨ªa, Paolo Gentiloni, en Radio Anch¡¯io. Al contrario de lo que est¨¢n barruntando los pa¨ªses, las palabras de Gentiloni indicaban que Bruselas prefiere un instrumento de mutualizaci¨®n de riesgos como los eurobonos. ¡°La estructura m¨¢s adecuada para lanzarlos es el MEDE¡±, se?al¨®.
El comisario lleva insistiendo en una respuesta fiscal conjunta desde que sus t¨¦cnicos vislumbraron la posibilidad de un impacto del brote de Covid-19 en la econom¨ªa europea. La semana que viene podr¨¢ ver si a la tercera intentona va la vencida.
Luz verde a relajar las reglas fiscales
La pandemia es la primera preocupaci¨®n del Parlamento Europeo, con una actividad bajo m¨ªnimos por el brote. La presidenta y los coordinadores econ¨®micos de la mayor¨ªa de grupos parlamentarios (populares, socialistas, liberales y verdes) reclaman a los pa¨ªses lograr fondos para combatir el virus mediante la creaci¨®n de un instrumento espec¨ªfico dentro del MEDE. El coordinador socialista, Jon¨¢s Fern¨¢ndez, explic¨® que el objetivo es ¡°evitar que se disparen las primas de riesgo de los pa¨ªses que tendr¨¢n que elevar sus d¨¦ficits p¨²blicos¡± por la necesidad de responder a la crisis.
De momento, la Comisi¨®n Europea activ¨® ayer la cl¨¢usula del Pacto de Estabilidad y Crecimiento que permite a los pa¨ªses romper con el cors¨¦ que imponen las reglas fiscales para atender emergencias. As¨ª lo anunci¨® la presidenta de la Comisi¨®n, Ursula von der Leyen, en su cuenta de Twitter. ¡°Dije que har¨ªamos cualquier cosa para apoyar a los europeos y las empresas europeas en esta crisis. Palabra cumplida. Ayer, hicimos m¨¢s flexibles las reglas sobre ayudas de Estado. Hoy, relajamos las reglas fiscales para permitir a los Estados que ayuden a sus econom¨ªas¡±, afirm¨®.
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