Apenas el 1% de las constructoras miden su impacto ambiental

Menos de medio centenar de empresas constructoras figuran en el registro del Ministerio de Transici¨®n Ecol¨®gica para medir su huella de carbono. Ese volumen apenas supone el 1% del total del sector, cuya actividad representa el 41% del consumo de recursos naturales en Espa?a. De las 49 firmas inscritas en ese registro voluntario, la inmensa mayor¨ªa miden ¨²nicamente sus emisiones directas y las indirectas que generan a trav¨¦s del consumo el¨¦ctrico. Diez tienen en cuenta adem¨¢s el impacto indirecto que generan a trav¨¦s de extracci¨®n y desplazamientos de materias primas, viajes de trabajo o la actividad de las subcontratas.

De la escasa repercusi¨®n del registro que creo en 2014 el entonces Ministerio de Agricultura, Alimentaci¨®n y Medio Ambiente en uno de los sectores clave en la lucha contra el cambio clim¨¢tico da cuenta el Informe huella de carbono del sector de la construcci¨®n que ha elaborado ACR, una de las ¨²ltimas constructoras en incorporarse a ese listado. En el mismo destaca que solo 10 compa?¨ªas se hayan sumado al alcance 3, el est¨¢ndar de medici¨®n m¨¢s elevado ya que obliga a calcular cu¨¢ntos gases de efecto invernadero emite cualquier actividad que realice la empresa directamente o a trav¨¦s de sus subcontratas.

Entre ese reducido grupo de compa?¨ªas, figuran las grandes ingenier¨ªas como OHL, FCC, Sacyr o FCC y algunas de sus filiales. La presencia de ACR, con un volumen de negocio m¨¢s modesto y centrada en las construcciones residenciales, es una extra?eza. Seg¨²n destaca el informe, el sector ha encaminado en los ¨²ltimos a?os sus esfuerzos a ¡°definir pol¨ªticas enfocadas a reducir el impacto ambiental de los edificios, centr¨¢ndose en el uso del inmueble y no tanto en el propio proceso de construcci¨®n¡±. As¨ª, en los ¨²ltimos a?os han ganado terreno las certificaciones de calidad medioambiental de los edificios a trav¨¦s de algunos sellos privados que miden la eficiencia energ¨¦tica y otros par¨¢metros de respeto con el entorno. Pero esa tendencia al alza choca, sin embargo, con la escasa repercusi¨®n del Registro de Huella de Carbono entre las empresas dedicadas a la edificaci¨®n.

Un gran consumidor de recursos

Adem¨¢s de los diferentes alcances de medici¨®n, el ministerio tambi¨¦n otorga unos sellos en funci¨®n de las acciones que emprendan las compa?¨ªas para, una vez saben su huella de carbono, actuar sobre la misma. El sello b¨¢sico es Calculo, en el que se quedan 34 constructoras. De las 15 restantes, 13 logran el sello Calculo y Reduzco y solamente dos de ellas el de Calculo y Compenso. Este ¨²ltimo implica tener inscrito en el ministerio un programa para la absorci¨®n de di¨®xido de carbono y supone el grado m¨¢s elevado en responsabilidad medioambiental de los que figuran en el registro p¨²blico.

Seg¨²n c¨¢lculos propios a partir de trabajos de investigaci¨®n y empresas especializadas en construcci¨®n responsable, el informe de la firma navarra destaca que la actividad de construcci¨®n es la mayor consumidora de recursos naturales en la Uni¨®n Europea, ya que le corresponde un 40% del consumo total de recursos naturales. En Espa?a ese porcentaje se eleva hasta el 41%. Desde el punto de vista de los residuos que se generan, a nivel continental el porcentaje es tambi¨¦n del 40%, mientras que en Espa?a seg¨²n diversas fuentes van del 30% al 40% del total.

Por ¨²ltimo, el an¨¢lisis de ACR destaca que ya existen normativas para levantar edificios de consumo energ¨¦tico nulo y que el mercado dispone tambi¨¦n de metodolog¨ªas y tecnolog¨ªa para hacer el proceso de construcci¨®n m¨¢s sostenible medioambientalmente. No obstante, el primer paso es la medici¨®n del impacto de la actividad sobre el planeta y, a tenor del poco ¨¦xito del registro p¨²blico de huella de carbono entre las compa?¨ªas del sector, en Espa?a queda mucho camino por recorrer.