Una mina como una catedral se ofrece como santuario espa?ol contra las epidemias
Un pozo asturiano es la primera propuesta para albergar un almac¨¦n de material sanitario ante futuras crisis
El 7 de mayo de 1944 se escuch¨® un inmenso estruendo en el valle de Aller (Asturias). El acontecimiento, con 5.000 disparos de barrenos, parec¨ªa una haza?a b¨¦lica. Pero Franco ya hab¨ªa ganado su contienda y solo trataba de vencer a la naturaleza: la autarqu¨ªa de los a?os cuarenta alumbraba el pozo minero de Santiago. Siete d¨¦cadas despu¨¦s, el PIB espa?ol se ha desplomado como no lo hac¨ªa desde aquella ¨¦poca por culpa de un virus que se ha llevado por delante la vida de miles de personas, ninguna de ellas en Aller, y ha puesto en evidencia los problemas de suministro que conlleva la globalizaci¨®n. A salvo de todo, menos de la decadencia, este concejo de 10.000 habitantes sue?a con que la crisis traiga una segunda oportunidad para la mina: Espa?a carece de un gran almac¨¦n de material sanitario y el pozo se ha convertido en el primer candidato para albergarlo.
La iniciativa parti¨® del sindicato minero SOMA-UGT, unas semanas despu¨¦s de que el Gobierno prometiese desarrollar una reserva estrat¨¦gica. La mina de Santiago, un gran complejo que todav¨ªa emplea a m¨¢s de 100 trabajadores ¡ªpese a carecer de actividad extractiva desde hace dos a?os¡ª, reun¨ªa las caracter¨ªsticas id¨®neas para convertirse en el primer santuario espa?ol contra las pandemias. Enseguida, el alcalde de la localidad, Juan Carlos Iglesias (PSOE), se convirti¨® en el principal valedor de la candidatura: ¡°Desde la reconversi¨®n se fueron cerrando los yacimientos y no paramos de perder poblaci¨®n. Si esto sale adelante puede ser un resurgir¡±, proclama ilusionado a sus 51 a?os.
El proyecto a¨²n se encuentra en la fase inicial. Hunosa, la empresa p¨²blica propietaria de la mina, ha remitido un informe t¨¦cnico sobre su viabilidad a petici¨®n del Ministerio de Industria, que lo est¨¢ valorando. El departamento dirigido por Reyes Maroto es el encargado de dise?ar el plan del Gobierno sobre la reserva estrat¨¦gica, un concepto polis¨¦mico que, seg¨²n el secretario general de Industria, Ra¨²l Blanco, incluye dos ejes: la producci¨®n de insumos b¨¢sicos ¡ªa trav¨¦s de un aumento de la capacidad de las f¨¢bricas espa?olas ante cualquier emergencia¡ª y su almacenamiento masivo.
La segunda idea no es nueva. Arcadi Espa?a, consejero de Pol¨ªtica Territorial, Obras P¨²blicas y Movilidad de la Comunidad Valenciana, la conoci¨® hace tres a?os, en un viaje a Finlandia cuando era jefe de Gabinete del presidente socialista Ximo Puig. Entonces le hablaron de los dep¨®sitos que el pa¨ªs mantiene desde la Guerra Fr¨ªa y solo abre en situaciones extremas. La pandemia del coronavirus ha sido uno de estos momentos al l¨ªmite: gracias al material que all¨ª guardaba, Finlandia no ha tenido problemas de abastecimiento. ¡°Es un mecanismo excepcional, como un seguro. No tiene nada que ver con la gesti¨®n ordinaria¡±, explica Espa?a.
La Generalitat valenciana ya est¨¢ trabajando en su propio proyecto. El Ejecutivo regional ha encargado a la Universidad Polit¨¦cnica de Valencia una investigaci¨®n sobre las localizaciones id¨®neas para los almacenes, que deber¨ªan responder a todo tipo de emergencias, como nuevas pandemias, inundaciones o incendios forestales. Estos d¨ªas se estudian el cat¨¢logo de productos y los requisitos de conservaci¨®n. Seg¨²n Espa?a, los resultados estar¨¢n listos a final de a?o. ¡°Estar¨ªa bien que el Gobierno central coordinase los esfuerzos. Las pandemias no conocen fronteras¡±, a?ade el consejero.
De momento, el Ejecutivo no ha movido ficha, m¨¢s all¨¢ de la licitaci¨®n de una compra centralizada de material sanitario por valor de 2.400 millones de euros. Industria reconoce que est¨¢ trabajando en el plan anunciado por el presidente Pedro S¨¢nchez, aunque evita dar detalles y plazos. Blanco reitera que la prioridad hasta ahora ha sido la fabricaci¨®n de insumos para cubrir las necesidades urgentes, pero asume que hay mucho margen de mejora: ¡°Estos meses nos hemos dado cuenta de la necesidad de contar con una reserva estrat¨¦gica de capacidades industriales. En la pr¨®xima amenaza de seguridad nacional vamos a necesitar al sector textil, al qu¨ªmico y al farmac¨¦utico¡±. El objetivo es que las dificultades de abastecimiento que se produjeron durante las primeras semanas de la pandemia no se repitan.
Margarita Alfonsel, secretaria general de la Federaci¨®n Espa?ola de Empresas de Tecnolog¨ªa Sanitaria (Fenin), subraya la importancia de contar con capacidad propia para producir el material necesario en tiempo r¨¦cord: ¡°El Gobierno deber¨ªa disponer de protocolos de actuaci¨®n que permitan una respuesta ¨¢gil y eficaz, para evitar improvisaciones¡±. Ambas instituciones est¨¢n en contacto para desarrollarlos.
Un problema geopol¨ªtico
Mientras contin¨²e la dependencia del exterior, el almacenamiento masivo constituye la ¨²nica garant¨ªa. Espa?a, como los dem¨¢s Estados europeos, cuenta con reservas de petr¨®leo desde que en los a?os setenta los principales pa¨ªses productores, reunidos en torno a la OPEP, cerrasen el grifo del crudo y causasen una prolongada recesi¨®n en la econom¨ªa mundial. Ignacio Molina, investigador principal del instituto Elcano, ve un paralelismo entre ambas crisis: ¡°Esta vez el estrangulamiento ha sido sanitario, no energ¨¦tico. Nos hemos dado cuenta de nuestra vulnerabilidad, porque dependemos de China¡±.
Proyectos como los de la mina de Santiago pueden servir para garantizar una mayor autosuficiencia a largo plazo. Quienes all¨ª trabajan aseguran que cumple las condiciones id¨®neas para albergar el almac¨¦n, por su situaci¨®n ¡ªa menos de cinco minutos de la autopista que comunica Asturias con la Meseta¡ª, su excepcional capacidad, tanto en los grandes pabellones en superficie como en el propio pozo, y sus condiciones de seguridad. ¡°Tenemos sitio de sobra. Hay salas que parecen catedrales¡±, concluye Omar Fern¨¢ndez, de 39 a?os, 16 de ellos en la mina. Teme que ocho d¨¦cadas de historia acaben sepultadas bajo un muro de hormig¨®n. Si se sella el pozo, que al menos sea para convertirlo en un santuario inexpugnable para las pandemias.
El acopio ante una segunda oleada
Mientras no se cree una reserva estrat¨¦gica, Espa?a seguir¨¢ siendo vulnerable ante futuras pandemias. Para amortiguar las consecuencias de una segunda oleada, Molina pide que se desarrollen mecanismos eficientes de adquisici¨®n y distribuci¨®n de material, como ya hace la Uni¨®n Europea a trav¨¦s del proyecto ¡®Strategic rescEU stockpile of medical equipment¡¯. Del mismo modo, las comunidades aut¨®nomas est¨¢n haciendo un gran esfuerzo de acopio, aunque a distintas velocidades. Solo Castilla-La Mancha ha iniciado los tr¨¢mites para blindar por ley el almacenamiento de material sanitario. El poder de negociaci¨®n en los mercados internacionales resulta fundamental para sortear las carencias de la industria aut¨®ctona. Y ah¨ª, recuerda el investigador del instituto Elcano, las regiones tienen m¨¢s dificultades que Bruselas frente a un gigante como China.
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