La Bolsa de Tokio sufre la peor interrupci¨®n de su historia a causa de un problema tecnol¨®gico

La Bolsa de Tokio ha detenido este jueves su funcionamiento habitual tras la aparici¨®n de varios problemas tecnol¨®gicos de origen desconocido. La decisi¨®n fue anunciada a las nueve de la ma?ana hora local (dos de la madrugada en Espa?a) justo antes de que el mercado comenzara su actividad. El tercer mayor parqu¨¦ del mundo por capitalizaci¨®n ha permanecido cerrado durante toda una jornada por primera vez en su historia. Las autoridades burs¨¢tiles, sin embargo, ya han anunciado que ma?ana recuperar¨¢ la normalidad. Solo una vez, en 1999, cuando cambi¨® el sistema electr¨®nico, hab¨ªa tenido que detenerse. Entonces, el par¨®n no lleg¨® a durar una jornada completa.

El error inicial se ha manifestado en el sistema distribuidor de informaci¨®n, por lo que las primeras hip¨®tesis indicaban que lo sucedido podr¨ªa deberse a un fallo de conexi¨®n. Sin embargo, el popular diario Asahi Shimbun apuntaba desde primera hora de la ma?ana que se trataba de una cuesti¨®n mec¨¢nica, tal y como ha confirmado m¨¢s tarde la empresa operadora, Japan Exchange Group (JPX) en uno de los sucesivos comunicados emitidos a lo largo del d¨ªa.

La ra¨ªz del problema se localiza, por tanto, en una pieza defectuosa que ha impedido el arranque normal del sistema. El JPX ha a?adido que su equipo t¨¦cnico est¨¢ reparando el hardware da?ado y ¡°dando pasos, incluyendo otros [protocolos de] mantenimiento, para asegurar el funcionamiento normal¡± a partir del viernes, cuando el mercado se abrir¨¢ de nuevo. As¨ª lo ha confirmado esta tarde el presidente de la Bolsa, Koichiro Miyahara, quien ha pedido disculpas. ¡°Como alguien al frente del mercado, me siento responsable (...) Hemos causado serias inconveniencias a mucha gente, y lo lamento profundamente¡±.

Las plazas repartidas por el archipi¨¦lago nip¨®n que emplean un sistema operativo similar tampoco han podido abrir hoy; entre ellas las de Sapporo, Nagoya o Fukuoka. El mercado de derivados de Osaka, en cambio, no se ha visto afectado. El sistema financiero global se encuentra en estado de alerta y ha incrementado el escrutinio ante cualquier posible infiltraci¨®n, despu¨¦s de que un ciberataque en Nueva Zelanda bloqueara las cotizaciones en el pa¨ªs a lo largo de cuatro d¨ªas el pasado mes de agosto.

La Agencia de Servicios Financieros ha conminado a JPX y a la Bolsa a investigar lo sucedido, tal y como ha informado el secretario jefe del Gabinete, Katsunobu Kato. ¡°La incapacidad de operan en bolsa, que sirve como una infraestructura de mercado importante, supone una restricci¨®n en las oportunidades comerciales para los inversores, y es muy desafortunado¡±, ha declarado esta tarde en rueda de prensa. ¡°Queremos que esto se investigue a fondo para que no vuelva a suceder. Deseamos que se reanuden las transacciones lo antes posible¡±.

Aunque hab¨ªa sufrido interrupciones temporales en el pasado, es la primera vez en la historia de la Bolsa de Tokio, que se remonta a 1878, en la que esta ha permanecido cerrada durante todo un d¨ªa. El mercado introdujo en 2010 un nuevo sistema digital, de nombre Arrowhead, desarrollado por Fujitsu, el cual ya ha generado problemas en al menos dos ocasiones desde entonces. Un portavoz de la casa nipona ha asegurado que est¨¢n estudiando lo sucedido, aunque no ha ofrecido m¨¢s detalles al respecto.

En 2005 las cotizaciones se detuvieron durante cuatro horas y media a causa de un fallo en la actualizaci¨®n de una herramienta, tambi¨¦n desarrollada por Fujitsu. Este episodio desemboc¨® entonces en la dimisi¨®n del presidente de la Bolsa. Un a?o m¨¢s tarde, el mercado se cerr¨® antes de lo previsto a causa de un pico de ¨®rdenes provocado por una sobrecarga en los servidores.

Otras veces, no obstante, el error es humano. Durante el debut de la agencia de publicidad nipona Dentsu en diciembre de 2001, un empleado del banco de inversi¨®n suizo UBS puso a la venta 610.000 acciones de la compa?¨ªa a un precio unitario de 1 yen (menos de 0,01 euros) cuando en realidad quer¨ªa vender una sola acci¨®n por 610.000 yenes (4.919 euros). A consecuencia de su equivocaci¨®n, UBS perdi¨® 77 millones de euros.