El rebote del empleo en verano es insuficiente para evitar la subida del paro al 16,3%

El mercado laboral rebot¨® en el tercer trimestre de este a?o. Se hab¨ªa hundido en el segundo, cuando el confinamiento primaveral m¨¢s duro se llev¨® por delante m¨¢s de un mill¨®n de empleos en tres meses. En el verano ha recuperado parte de ellos, 569.600. Pero es una cantidad insuficiente para volver al nivel previo a la pandemia y para evitar que el paro aumentara en 355.000 personas, dejando la tasa de desempleo en el 16,3%, seg¨²n la encuesta de poblaci¨®n activa (EPA). Adem¨¢s, este rebote que refleja el INE no indica que lo peor haya quedado atr¨¢s, al contrario, en el tercer trimestre el coronavirus estuvo m¨¢s contenido y las restricciones a la actividad fueron ¨Cpese a la atenci¨®n medi¨¢tica¨C mucho m¨¢s puntuales de lo que est¨¢n siendo a final de a?o.

El resumen de las grandes cifras del mercado laboral en verano se completa con la cifra total de parados, 3,7 millones, y de ocupados, 19,1 millones. Aunque en esta ¨²ltima hay que a?adir una advertencia: est¨¢n incluidos los m¨¢s de 500.000 afectados por los ERTE o por los aut¨®nomos que reciben las ayudas extraordinarias. El golpe en el mercado laboral hubiera sido mucho mayor de no ser por los ERTE y esas ayudas a los trabajadores por cuenta propia, cuya regulaci¨®n extraordinaria, con su ingente cantidad de ayudas, se puso en marcha y ahora est¨¢n prorrogados hasta el 31 de enero. Llegaron a los 3,4 millones de afectados, una cifra que mengu¨® mucho durante los meses de verano, bajando a ese medio mill¨®n largo.

Tambi¨¦n habr¨ªan sido mayores las consecuencias de no ser por el teletrabajo, que ha permitido continuar con la actividad en muchas profesiones a pesar de las restricciones a la movilidad. En los n¨²meros de esta EPA se refleja que m¨¢s de un 10% de ocupados ha trabajado en su domicilio m¨¢s de la mitad de los d¨ªas de la semana.

Con todos estos condicionantes, probablemente el dato que mejor refleja los grandes altibajos del mercado laboral en tiempos de pandemia son las horas trabajadas por todos los ocupados en conjunto. En ¨¦l se ve ese rebote significativo e insuficiente al mismo tiempo. En el segundo trimestre se hundieron un 22% respecto de los primeros tres meses del a?o; en este, en cambio, se han recuperado muchas de ellas, pues ha habido un salto del 15%. Tambi¨¦n lo muestra con mucha nitidez que el nivel de actividad pre-covid era bastante mayor que ahora. Al comparar el volumen total de horas trabajadas con el mismo trimestre el a?o anterior, se observa que todav¨ªa queda un 7% por debajo.

Sin embargo, todos estos n¨²meros tienen sus l¨ªmites. En la situaci¨®n extraordinaria actual, hay que advertir de los problemas que tiene la EPA para recoger en una solo foto estad¨ªstica todo lo que est¨¢ sucediendo en el mercado laboral durante estos meses. La encuesta de poblaci¨®n activa ha sido tradicionalmente el mejor medidor del empleo y el paro, m¨¢s fiel y completo que las estad¨ªsticas mensuales. Pero su propia metodolog¨ªa y la realidad cambiante a golpe de confinamiento local y perimetral, restricciones de actividad y estados de alarma no se aprehenden plenamente en una encuesta cuyo resultado es una foto fija. Hay varios ejemplos de esto. El m¨¢s recurrente en estos meses ha sido el de los afectados por ERTE, que no se consideran parados a pesar de no trabajar (teniendo empleo y percibiendo una retribuci¨®n, eso s¨ª).

Otra muestra aparece en lo sucedido con quienes perdieron su empleo en el segundo trimestre, m¨¢s de un mill¨®n de personas. La gran mayor¨ªa de ellas no pudieron ser consideradas paradas porque no pudieron buscar activamente empleo, un requisito fundamental en la definici¨®n estad¨ªstica, y, por tanto, casi un mill¨®n de trabajadores pasaron a ser inactivos. En verano decay¨® el estado de alarma y se recuper¨® la movilidad, lo que permit¨ªa la b¨²squeda de empleo. Ese retorno a la actividad de casi 925.000 personas explica que haya subido el paro a pesar del salto del empleo.

Hay otros indicadores que evidencian de qu¨¦ forma la pandemia ha dado un vuelco a la situaci¨®n laboral. En el ¨²ltimo a?o, el empleo ha retrocedido un 3,5% cuando justo hace un a?o avanzaba un 1,8%. Y la comparaci¨®n ser¨ªa peor si se tomara solo la evoluci¨®n del sector privado, donde se han destruido en el ¨²ltimo a?o 806.000 empleos. En cambio, en las administraciones se han generado 108.500 puestos de trabajo.

El tercer trimestre suele ser el periodo del a?o en el que m¨¢s gente hay trabajando. El verano, en los a?os anteriores, impulsaba el empleo asociado al turismo, especialmente en las ramas relacionadas con ¨¦l: hosteler¨ªa, alojamiento, transportes... A pesar de que en 2020 el escenario ha sido radicalmente diferente por la pandemia y porque esta ha hecho casi desaparecer el turismo extranjero, el sector en el que m¨¢s ha crecido este trimestre el empleo ha sido el de los servicios, con 476.300, una cifra que casi multiplica por seis el incremento de la construcci¨®n. Tambi¨¦n la industria se ha recuperado y solo ha perdido terreno la agricultura.

La recuperaci¨®n del empleo ha permitido que mejore uno de los indicadores m¨¢s dram¨¢ticos que ofrece la EPA: la cifra de hogares en que ninguno de sus miembros recibe ingresos, que lleg¨® a 670.00 en el segundo trimestre. En el tercero, en cambio, se redujo sustancialmente al quedarse en 597.000, una cantidad muy similar a la que hab¨ªa cuando irrumpi¨® la pandemia. Por en contrario, y en consonancia con el aumento del desempleo, s¨ª que creci¨® el total de familias en la que ninguno trabaja. Lleg¨® a 1,18 millones.