Ryanair se prepara para el d¨ªa despu¨¦s de la vacuna: ampl¨ªa en 75 unidades su pedido de Boeing 737 MAX
Es la primera orden en firme del modelo despu¨¦s de que las autoridades estadounidenses diesen hace 15 d¨ªas su visto bueno para regresar a los cielos
Cuando Europa trata a¨²n de organizarse para minimizar en Navidad los riesgos de una tercera ola del virus, Ryanair ya piensa en el d¨ªa despu¨¦s de la ansiada vacuna. La mayor aerol¨ªnea europea de bajo coste ha ampliado este jueves su macropedido de Boeing 737 MAX en 75 unidades, hasta un total de 210. La orden, valorada en un total de 22.000 millones de d¨®lares (18.000 millones de euros), es la primera del MAX desde que las autoridades estadounidenses diesen hace 15 d¨ªas s...
Cuando Europa trata a¨²n de organizarse para minimizar en Navidad los riesgos de una tercera ola del virus, Ryanair ya piensa en el d¨ªa despu¨¦s de la ansiada vacuna. La mayor aerol¨ªnea europea de bajo coste ha ampliado este jueves su macropedido de Boeing 737 MAX en 75 unidades, hasta un total de 210. La orden, valorada en un total de 22.000 millones de d¨®lares (18.000 millones de euros), es la primera del MAX desde que las autoridades estadounidenses diesen hace 15 d¨ªas su visto bueno para que regrese a los cielos tras atajar las deficiencias que desembocaron en dos accidentes en los que murieron 346 personas.
El anuncio tiene trascendencia por partida doble. Primero, porque el sector a¨¦reo en su conjunto est¨¢ todav¨ªa en plena traves¨ªa en el desierto por la covid-19, y un nuevo pedido cambia el paso de una industria demasiado acostumbrada en los ¨²ltimos tiempos a recortes y despidos. Segundo, porque parece marcar el final del calvario del MAX, un modelo de corto y medio radio llamado a marcar una ¨¦poca en la industria, pero cuyos fallos de dise?o ¡ªcon consecuencias fatales¡ª han llevado al fabricante a una situaci¨®n cr¨ªtica.
Tras lograr el visto bueno de la Agencia Federal de Aviaci¨®n estadounidense (FAA, por sus siglas en ingl¨¦s) a mediados de noviembre, tras casi dos a?os varado, los primeros 737 MAX llegar¨¢n a la flota de la aerol¨ªnea irlandesa a principios del a?o que viene. El MAX podr¨¢ ser utilizado en todas las rutas de la compa?¨ªa, que desde sus inicios ha optado por un esquema monoflota, con el 737 ¡ªen sus diferentes variantes¡ª como ¨²nico avi¨®n pintado con sus colores en el ¨²ltimo cuarto de siglo, su periodo de mayor crecimiento.
Como parte del acuerdo, Ryanair y Boeing han acordado una compensaci¨®n por los costes directos en los que ha incurrido la aerol¨ªnea en el ¨²ltimo a?o y medio por los retrasos en la entrega del MAX, despu¨¦s de que el modelo fuese vetado por las autoridades aeron¨¢uticas de todo el mundo.
¡°Este avi¨®n va a transformar Ryanair y nuestros trayectos en Europa. Consume menos, emite menos y ofrece m¨¢s asientos¡±, ha confiado el consejero delegado de la aerol¨ªnea, Michael O¡¯Leary, en un encuentro telem¨¢tico organizado conjuntamente por ambas compa?¨ªas con un n¨²mero reducido de medios de comunicaci¨®n. ¡°Queremos acelerar la recuperaci¨®n de los viajes en Europa en los pr¨®ximos a?os. Va a ser muy r¨¢pida despu¨¦s de la vacuna, y este pedido va a transformar la matriz de costes y el futuro mismo de Ryanair en los pr¨®ximos a?os¡±, ha confiado. El MAX constituir¨¢ la tercera parte de su flota en 2025.
¡°Tenemos, tanto nosotros como ellos, confianza en el futuro de nuestra industria. Y la vacuna ha llegado antes de lo que pensamos¡±, ha remarcado en la misma l¨ªnea el presidente y consejero delegado de Boeing, Dave Calhoun, tratando de cambiar el paso tras meses de cancelaciones y retrasos en los pedidos y miles de aviones aparcados en aeropuertos de todo el mundo. M¨¢s all¨¢ de la crisis del MAX, la mente del gigante aeron¨¢utico est¨¢ puesta en que la demanda de los pasajeros remonte tras la aplicaci¨®n generalizada del f¨¢rmaco.
Siniestros de 2018 y 2019
Preguntado por la seguridad del Boeing 737 MAX tras los siniestros de 2018 y 2019 en Indonesia y Etiop¨ªa, el primer ejecutivo del fabricante con sede en Seattle ¡ªque a¨²n no hab¨ªa sido nombrado cuando se produjeron los accidentes¡ª ha afirmado que segundo mayor fabricante de aviones comerciales del mundo ¡°nunca¡± olvidar¨¢ lo sucedido. ¡°Pero hemos cambiado nuestros procesos para asegurar que algo as¨ª no se vaya a producir nunca m¨¢s¡±.
Tambi¨¦n Ryanair ha querido despejar cualquier atisbo de duda: ¡°Cuando se entregue, este avi¨®n ser¨¢ el m¨¢s auditado y regulado de la historia de la aviaci¨®n¡±, apunta en la nota publicada tras la conferencia de los dos ejecutivos. ¡°Estamos seguros de que nuestros clientes disfrutar¨¢n volando en este avi¨®n¡±, ha remarcado O¡¯Leary de viva voz, tratando de obviar en todo momento el t¨¦rmino MAX y refiri¨¦ndose a la aeronave repetidamente como Gamechanger, el apelativo con el que Boeing ha tratado de rebautizar el modelo.
El fabricante estadounidense, que ya lleg¨® a la crisis de la covid-19 en una situaci¨®n de debilidad extrema despu¨¦s de que el MAX tuviera que quedarse en tierra y se viese forzada a cancelar todos los pedidos, trata de cambiar el paso pensando en los pr¨®ximos a?os. En un mundo en el que todos los pasos se miden al mil¨ªmetro, el anuncio conjunto con Ryanair es una forma de dar un espaldarazo p¨²blico a su avi¨®n en un momento de m¨¢xima zozobra.
El mensaje que la aerol¨ªnea irlandesa trata de trasladar con este anuncio es igualmente claro: tras un verano de continuos acelerones y frenazos en la reapertura, a golpe de levantamiento y restablecimiento de las cuarentenas en los pa¨ªses en los que opera, se trata de tener todo previsto para el d¨ªa en el que regrese el apetito viajero. Tambi¨¦n de aprovechar la debilidad de varios de sus competidores en el segmento low cost, como EasyJet y, sobre todo, Norwegian, que se acaba de declarar en concurso de acreedores para renegociar la ingente deuda que acumula.
Aunque tocada ¡ªcomo todo el sector¡ª, la irlandesa est¨¢ en una posici¨®n de mayor fortaleza que sus pares: antes de que el virus llegase para arrasar con todo, sus cuentas estaban saneadas y puede ahora permitirse pensar en c¨®mo ganar cuota cuando pase lo peor de la crisis. Mientras la selecci¨®n natural hace estragos en el sector y otros solo pueden permitirse pensar en su supervivencia eso es, sin duda, un privilegio.