La banca Rothschild, condenada por colocar un pr¨¦stamo de alto riesgo a jubilados brit¨¢nicos en Espa?a

Un juez de M¨¢laga acaba de dictar una novedosa sentencia que condena a la banca Rothschild de Londres por los artificios financieros que perpetr¨® en Espa?a contra un matrimonio brit¨¢nico afincado en la Costa del Sol. Barry William y su esposa Marion Joyce, que hoy rondan los 70 a?os, han estado a punto de perder su vivienda de Benalm¨¢dena, en la que invirtieron casi todos sus ahorros, tras caer en las redes de un sofisticado producto financiero ideado por Rothschild para jubilados compatriotas que tuvieran casa en Espa?a pagada y sin hipoteca. La nocividad de este producto incluso fue debatida en el Parlamento brit¨¢nico tras las quejas de los afectados espa?oles al sentirse enga?ados y ver que el banco pod¨ªa arrebatarles sus casas.

El matrimonio ni siquiera tendr¨¢ que devolver los 15.100 euros que le dio el banco en efectivo como anzuelo a cambio de hipotecarle su casa e invertir el dinero con enga?os

Esta es la primera sentencia que condena directamente a N.M. Rothschild & Sons Limited, filial de la banca Rothschild, por lo que en su d¨ªa se denomin¨® Credit Select Series Four, un complejo producto financiero enmarcado en los llamados Sitirs (Plan Espa?ol de Transferencia de Inversi¨®n y Movilizaci¨®n de Ingresos). Pero vienen otros fallos judiciales en camino, puesto que los afectados superan el centenar y hay juzgados en la Costa del Sol, Levante y Baleares con pleitos en marcha relacionados con esta misma operativa.

La sentencia del Juzgado de Primera Instancia 3 de Torremolinos anula toda la operaci¨®n. El matrimonio ni siquiera tendr¨¢ que devolver los 15.100 euros que le dio el banco en efectivo como anzuelo a cambio de hipotecarles su casa y hacerles firmar un pr¨¦stamo que les convert¨ªan en inversores de alto riesgo sin ellos saberlo.

Coincidiendo con la llegada del euro, que debilit¨® la libra con que la que hasta ese momento muchos brit¨¢nicos de clase media y baja hab¨ªan adquirido casas en las costas espa?olas para pasar su jubilaci¨®n, la banca Rothschild (a trav¨¦s de filiales en connivencia con sociedades amigas y sirvi¨¦ndose de intermediarios) publicit¨® un producto que en apariencia era dif¨ªcil de rechazar. La ¨²nica condici¨®n es que la casa estuviera totalmente pagada, sin ninguna carga. El banco tasaba la vivienda e inmediatamente entregaba entre un 5 % y un 10 % de la tasaci¨®n a los due?os, en met¨¢lico. Este dinero que, entonces, corr¨ªa el a?o 2006, supon¨ªa una golosina tras el aumento del nivel de vida en Espa?a por el auge del euro en detrimento de la libra. Espa?a ya no era tan barata. Y a nadie ven¨ªa mal dinero fresco.

La publicidad del producto ofrec¨ªa una inversi¨®n segura con incontables ventajas. Por ejemplo, que esa inversi¨®n les servir¨ªa para aminorar sustancialmente el temido impuesto de sucesiones reinante entonces en Espa?a. Les vendieron que, con vistas a la herencia de sus hijos, un pr¨¦stamo con aval hipotecario destinado a inversiones era el mejor freno contra el citado impuesto. Los pr¨¦stamos otorgados de esta forma alcanzaron de media los 300.000 euros. Hay m¨¢s de un centenar de afectados. Pero ten¨ªa truco.

La sentencia desmonta los agresivos reclamos publicitarios empleados. Barry Wiliam y Marion Joyce se vieron envueltos en un laberinto que ha estado a punto de arruinarles. Tuvieron que suscribir un pr¨¦stamo con el propio banco de 227.000, que era el precio de tasaci¨®n de la vivienda. El dinero de ese pr¨¦stamo lo invert¨ªa luego el banco, en connivencia con otras sociedades amigas, en el extranjero. En valores que supuestamente ten¨ªan escaso riesgo. Les hablaron de que la inversi¨®n ser¨ªa para seguros de vida a trav¨¦s de la sociedad Aspecta Assurance Internacional Luxembourg, SA, tambi¨¦n condenada en esta la sentencia.

En 2016, diez a?os despu¨¦s, al cumplirse el plazo de devoluci¨®n del cr¨¦dito, no s¨®lo no hab¨ªa crecido la inversi¨®n, sino que NM Rothschild empez¨® a reclamar a este matrimonio 302.132, 182 euros bajo la amenaza de ejecutar la hipoteca

Cuando les ense?aron los papeles del contrato de pr¨¦stamo, la ¨²nica opci¨®n, si quer¨ªan recibir sobre la marcha los 15.100 euros, era firmarlo sin objetar su contenido. Nada m¨¢s firmar el cr¨¦dito, el dinero, que ni siquiera llegaron a tocar, pues la banca se encargaba de invertirlo, empez¨® a decrecer. Las comisiones de abogados impuestos por el propio banco, notar¨ªas, registros y otras gestiones se comieron el primer a?o 55.443 euros de los 227.000 firmados como pr¨¦stamo. Y en 2016, diez a?os despu¨¦s, al cumplirse el plazo de devoluci¨®n del cr¨¦dito, no solo no hab¨ªa crecido la inversi¨®n, sino que NM Rothschild empez¨® a reclamar a este matrimonio 302.132,182 euros. Y si no pagaba, le ejecutaban la hipoteca y se quedaba con la casa.

Las inversiones resultaron calamitosas, a diferencia de lo que les prometieron. La banca ha sostenido ante el juez que no es ella sino las otras firmas intervinientes en la operaci¨®n las responsables del fiasco. El juez entiende que fue ella la que indujo a las operaciones y que no debe escudarse en terceros.

Gracias a esta sentencia, Barry Wiliam y Marion Joyce conservar¨¢n su casa, ya que el juez ha anulado toda la operaci¨®n. El matrimonio tampoco tendr¨¢ que devolver los 15.100 euros que recibi¨® en efectivo, al entender el juez la entidad debe responder de los vicios que escond¨ªa el pr¨¦stamo y de la enga?osa publicidad empleada, que aseguraba que las inversiones se alejar¨ªan ¡°de riesgos inesperados¡± y se optar¨ªa por inversiones conservadoras. No fue as¨ª.

Sentencia contundente

Explica el juez en la sentencia: ¡°Los hechos probados determinan sin g¨¦nero de dudas que el producto (¡­) no constituye un simple pr¨¦stamo con garant¨ªa hipotecaria sino un negocio jur¨ªdico complejo, poni¨¦ndose en marcha realmente la contrataci¨®n sucesiva de distintos productos conformadores de un ¨²nico producto financiero de alto riesgo, ocult¨¢ndose a los demandantes (¡­) la verdadera naturaleza del mismo, ya que nunca fueron informados de los peligros inherentes a su suscripci¨®n, ofert¨¢ndose bajo de la forma de un producto seguro, rentable y cuya causa era reducir el importe del impuesto de sucesiones en Espa?a¡±.

¡°A mis clientes, se les prometi¨® un producto conservador, sin asunci¨®n de riesgos innecesarios, cuyos rendimientos permitir¨ªan hacer frente al coste de devoluci¨®n del pr¨¦stamo, as¨ª como a la obtenci¨®n de unos ingresos extras. Nada de eso se correspond¨ªa con la realidad¡±, se?ala Pablo Espejo, el abogado del despacho malague?o Iura Law Firm que se hizo cargo de este asunto hace ya 14 a?os.

El juez ordena dejar sin validez la carga hipotecaria que pesa sobre la vivienda de este matrimonio y concluye que la entidad debe devolver todo el dinero que hasta la fecha le hayan entregado los afectados, que han estado a punto de perder su casa puesto que no pod¨ªan afrontar el pr¨¦stamo de un dinero que ni siquiera llegaron a ver. ?