Terras Gauda, la bodega que escucha a la tierra
La empresa gallega centra su estrategia en la calidad, en la apuesta por la viticultura biodin¨¢mica y en el cuidado del terreno con abonos naturales
La edad de los vi?edos es una nota diferenciada para presumir de un vino de calidad, cuando superan los cuarenta a?os tras resistir a la filoxera de finales del siglo XIX; otras se?ales son la elevada altitud de los terrenos y las oscilaciones de la temperatura entre el d¨ªa y la noche en tiempos de maduraci¨®n. En la mayor¨ªa de los casos, el argumento m¨¢s utilizado por las bodegas para distinguirse se halla en la fuerte limitaci¨®n de las producciones, como sucede en Rioja o Ribera del Duero, con solo entre 6.000 y 7.000 kilos por hect¨¢rea, frente a la permisividad de otras denominaciones dominadas por el volumen.
Terras Gauda, nacida en los primeros a?os noventa en la Denominaci¨®n de Origen R¨ªas Baixas, cuando muchas de las bodegas m¨¢s importantes aterrizaban en tierras gallegas, fue la primera y hoy la ¨²nica gallega que inici¨® el camino opuesto hasta tener presencia en Bierzo, con la bodega Pittacun; en Ribera del Duero, con Quinta Sardonia y en Rioja, con Vinos Heraclio Alfaro, y facturar 18 millones de euros, de los que casi el 40% proceden del exterior, de medio centenar de pa¨ªses entre los que destaca Estados Unidos.
Con sus 160 hect¨¢reas ubicadas a menos de 100 metros sobre el nivel del de mar en Galicia, su fundador y propietario, Jos¨¦ Mar¨ªa Fonseca, anteriormente responsable de la formaci¨®n profesional del Ministerio de Trabajo en Pontevedra e implicado en los programas agrarios, descubri¨® las posibilidades de los vi?edos de O Rosal y tuvo claro desde un primer momento cu¨¢les iban a ser sus estrategias para lograr unos vinos de calidad diferenciada: la innovaci¨®n y el tratamiento de los suelos.
La iniciativa fue apoyada desde instituciones p¨²blicas como el Sodiga, por miembros de la familia de Fonseca, entre quienes figura Manuel Fen¨¢ndez Sousa, expresidente de Pescanova, y por peque?os viticultores de la zona que aportaron sus vi?edos. Actualmente tiene un centenar de accionistas, con Abanca asumiendo la participaci¨®n de Caixa Galicia, y la familia Fonseca como principal accionista minoritario.
La bodega ha registrado varias patentes en colaboraci¨®n con el CSIC en investigaci¨®n varietal, como la selecci¨®n clonal del Albari?o o la recuperaci¨®n de la uva Cai?o Blanco. Pero la v¨ªa m¨¢s importante de sus ensayos se ha centrado en la b¨²squeda de alternativas sostenibles al uso de productos fitosanitarios y a la recuperaci¨®n del equilibrio en los elementos esenciales de la tierra, donde se encuadra el reciente acuerdo con la bodega biodin¨¢mica argentina Finca Von Wigstein.
¡°Creemos que los cambios en la microbiota del suelo se ver¨¢n reflejados en los microorganismos que nos encontremos en la parte a¨¦rea, fundamentalmente en las poblaciones de levaduras y en las bacterias que tanto influyen en la vinificaci¨®n¡±, se?ala el en¨®logo de la bodega, Emilio Rodr¨ªguez.
Terras Gauda particip¨® en el proyecto europeo Horizon junto a Italia, Portugal, Francia y Grecia para la b¨²squeda de alternativas sostenibles al uso de los fitosanitarios en los vi?edos, teniendo en cuenta las peculiaridades ambientales de cada zona con la utilizaci¨®n de productos naturales, que act¨²en solamente contra los organismos que causan las plagas.
La bodega gallega ha formado parte igualmente del proyecto europeo Foodie por el que, a trav¨¦s de la viticultura de precisi¨®n, se analizan en tiempo real los datos proporcionados por los sat¨¦lites, lo que permite ajustar al m¨¢ximo abonos y tratamientos, algo que se traduce en un ahorro de un 20% en el empleo de aplicaciones fitosanitarias y del 15% en el uso de abonos, lo que implica a la vez una reducci¨®n de emisiones de CO?.
Conversi¨®n del bagazo
Terras Gauda ha participado en los ¨²ltimos tres a?os en el programa Vitalver, cofinanciado por el Centro para el Desarrollo Tecnol¨®gico Industrial (CDTI) y los fondos de Desarrollo Rural, en un proyecto de econom¨ªa circular aplicado a la vi?a consistente en la conversi¨®n del bagazo de la vendimia, m¨¢s de 200.000 kilos, en el vermicompost tras un proceso de vermiconversi¨®n con lombrices de tierra. Los controles llevados a cabo sobre una superficie de 6,5 hect¨¢reas concluyeron que han tenido un impacto muy beneficioso para la tierra, logrando mejorar su estado sanitario y facilitando la actividad microbiana. Tambi¨¦n se consigui¨® una mayor protecci¨®n de la planta frente a diferentes pat¨®genos, as¨ª como una reducci¨®n de infecciones, adem¨¢s de un incremento en la producci¨®n de uva de calidad de entre un 14% y un 20%.
La vinificaci¨®n de las parcelas donde se aplic¨® el vermicompost supuso una reducci¨®n del ¨¢cido m¨¢lico, produciendo unos vinos m¨¢s suaves, de mayor estabilidad, m¨¢s arom¨¢ticos y con un mayor equilibrio gustativo.
En l¨ªnea con la pol¨ªtica de la mejora integral del vi?edo gracias a la reactivaci¨®n de la biodiversidad microbiana que supone uno de los ejes de la estrategia vin¨ªcola del grupo, Terras Gauda suscribi¨® un proyecto de I+D+i en alianza con la bodega argentina Finca Von Wigstein, situada al pie de los Andes, para estudiar la mejora de la biodiversidad de los suelos. El objetivo se centra en analizar el comportamiento de este tipo de estrategias en dos bodegas ubicadas en dos hemisferios diferentes. La iniciativa se enmarca en el proyecto comunitario Eureka liderado por Terras Gauda para fomentar la competitividad de las empresas y cuenta con la colaboraci¨®n de la Universidad de Vigo.
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