Fraude en la estiba: 35.000 euros por un puesto que nunca existi¨®
Una trama en La L¨ªnea estafa al menos 850.000 euros a un centenar de personas a las que prometieron falsos puestos en el Puerto de Algeciras
¡°Esta es la ¨²ltima plaza. Tienes que pagar ya porque cerramos la lista¡±. Cada uno de los estafados en una trama de falsos contratos de trabajo en La L¨ªnea de la Concepci¨®n (C¨¢diz) recib¨ªa un apremio similar. ¡°Pero luego llegaba el siguiente y le dec¨ªan lo mismo¡±, asegura la investigadora de la Polic¨ªa Nacional que ha destapado un nuevo fraude de contrataciones simuladas en la estiba del Puerto de Algeciras. Entre 6.000 y 35.000 euros pagaron un centenar de personas por un empleo que nunca existi¨®. Los tres detenidos en la llamada operaci¨®n Container consiguieron 850.000 euros en efectivo con el enga?o, aunque los agentes sospechan que puede ser mucho m¨¢s.
Ninguno de los tres investigados ¡ªpara los que el juzgado mixto n¨²mero cinco de La L¨ªnea ha decretado la libertad provisional con cargos¡ª ten¨ªa vinculaci¨®n alguna demostrada con la estiba de Algeciras. Pero eso nunca fue un problema para que usasen todo tipo de artima?as para mostrar a sus v¨ªctimas su aparente papel como conseguidores de un puesto en una bolsa de trabajo temporal que no exist¨ªa. Citaban a los estafados en hoteles donde les explicaban los supuestos avances burocr¨¢ticos que har¨ªan posible su contrataci¨®n y daban fechas aproximadas que se alargaban hasta quedarse en nada. ¡°Todo era para dar una apariencia de credibilidad. Llegaron a citar a algunos afectados en los alrededores de una ETT de Algeciras [empresas de trabajo temporal que se suelen encargar realmente de contratar en la estiba] para firmar el contrato. Luego les dec¨ªan que no se pod¨ªa hacer, que otro d¨ªa¡±, explica la misma investigadora de la Unidad de Delincuencia Especializada Violenta (UDEV) de la comisar¨ªa de La L¨ªnea.
El artificio comenz¨® en 2018, al calor de unos cambios legales en la estiba que obligaban a liberalizar el sector y que se convirtieron en la tapadera perfecta de los investigados. Muchos de los enga?ados eran hermanos, amigos y primos, ya que los supuestos estafadores conminaban a sus v¨ªctimas a buscar a nuevos interesados, una vez pagaban entre 6.000 y 35.000 euros en efectivo que ped¨ªan a cada persona. Tambi¨¦n porque los propios urdidores de la trama crearon un grupo de WhatsApp, Los supernenes, que usaban para informar de los supuestos avances en sus gestiones. Casi un centenar de integrantes lleg¨® a tener el chat, que se ha convertido en pieza clave de una compleja investigaci¨®n policial que ha tardado m¨¢s de un a?o en concluir. Sin embargo, solo 47 de las v¨ªctimas han decidido personarse en la causa. El resto ha preferido no denunciar, bien por evitar la ¡°trazabilidad del dinero entregado¡± en met¨¢lico o bien por que ya dan por perdido lo aportado, seg¨²n apuntan desde la polic¨ªa.
Sin esperanzas
Pese a tanta falsa promesa, el des¨¢nimo comenz¨® a cundir entre las v¨ªctimas al ver que el tiempo pasaba en balde. ¡°Se fueron alargando conversaciones, plazos y d¨ªas. En la desesperanza, acudieron a nosotros¡±, asegura el abogado Ricardo Fanegas, del despacho algecire?o Vi?as de Roa. A ¨¦l y a su compa?ero Enrique del ?guila fue una decena de afectados que acab¨® por formular una denuncia conjunta a finales de 2020. Para ese entonces, la polic¨ªa de La L¨ªnea llevaba meses de pesquisas, despu¨¦s de que cuatro afectados recurriesen un a?o antes a una v¨ªa m¨¢s desesperada. ¡°Fueron a casa de uno de los supuestos responsables de la trama a pedirle explicaciones. Se les detiene y es entonces cuando cuentan que han sido v¨ªctimas de una estafa¡±, a?ade la misma polic¨ªa.
La desesperaci¨®n relata en gran medida la complicada situaci¨®n econ¨®mica y laboral de los afectados, la mayor¨ªa j¨®venes. ¡°Es una cosa dram¨¢tica. No era que les sobrase el dinero. Pidieron prestado a otros familiares. Hay quien incluso ha perdido el trabajo¡±, detalla Fanegas. Esa situaci¨®n apremiante, sumado que viesen como normal pagar por acceder a un puesto de trabajo ayud¨® a los sospechosos a consumar su supuesto enga?o. ¡°Ellos [por sus clientes] no lo ve¨ªan como algo malo, sino como la forma tradicional de acceder al puerto. Hasta que se ha destapado esto, nadie se hab¨ªa llevado las manos a la cabeza¡±, asegura el abogado.
Aunque lo cierto es que no es la primera vez que en torno a las contrataciones en la estiba se crean estafas con formas de proceder muy similares. En septiembre de 2018 acabaron detenidos dos estibadores, padre e hijo, acusados de haberse quedado con, al menos, 200.000 euros de unos 15 afectados. A todos ellos les pidieron tambi¨¦n cantidades de hasta 30.000 euros por un puesto de trabajo en el Puerto de Algeciras que nunca lleg¨®. En aquella ocasi¨®n ¡ªinvestigada a¨²n por el juzgado de instrucci¨®n 1 de Algeciras¡ª, la investigaci¨®n parti¨® de la polic¨ªa de esta ciudad. Meses antes, el sindicato mayoritario de la estiba, la Coordinadora Estatal de Trabajadores del Mar, ya alert¨® de que se pod¨ªan estar produciendo este tipo de pr¨¢cticas fraudulentas.
Tanto el propio sindicato, como el comit¨¦ de los 1.800 estibadores que trabajan en los muelles de carga de Algeciras, suelen mostrar su inter¨¦s por que se persigan este tipo de estafas, al considerar que perjudican a la imagen del colectivo. Los timos se sustentan en una tradici¨®n ya desaparecida por la que hijos o familiares pod¨ªan heredar de sus padres el trabajo en el puerto, una pauta que se daba en otros trabajos tradicionales relacionados con el mar y de gran dureza, como las almadrabas. La costumbre, en la que no mediaba dinero, se erradic¨® hace a?os. La sentencia del Tribunal de Justicia de la Uni¨®n Europea de 2014 que oblig¨® a la liberalizaci¨®n del sector de la estiba y la entrada de nuevas empresas alej¨® a¨²n m¨¢s la pr¨¢ctica. Pero esa entrada de nuevas empresas en el tablero de juego ha acabado por convertirse en la coartada perfecta para los responsables de una trama que no tuvo escr¨²pulos en prometer, previo pago de hasta 35.000 euros, un trabajo que nunca existi¨®.
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