Las propinas resisten en un mundo sin efectivo

Hace un a?o que Eduardo vive pegado al dat¨¢fono. Antes de que el virus irrumpiera en nuestras vidas como un hurac¨¢n, era raro el cliente que pagaba con tarjeta en el bar donde trabaja de camarero. Pero como en tantos otros sectores, la pandemia ha cambiado la forma en que los espa?oles consumen. Y la inmensa mayor¨ªa reniega de las monedas. ¡°Ahora voy con el dat¨¢fono siempre encima para no dar dos viajes¡±, cuenta en el sal¨®n del restaurante Cantalejo, junto al metro de La Latina de Ma...

Hace un a?o que Eduardo vive pegado al dat¨¢fono. Antes de que el virus irrumpiera en nuestras vidas como un hurac¨¢n, era raro el cliente que pagaba con tarjeta en el bar donde trabaja de camarero. Pero como en tantos otros sectores, la pandemia ha cambiado la forma en que los espa?oles consumen. Y la inmensa mayor¨ªa reniega de las monedas. ¡°Ahora voy con el dat¨¢fono siempre encima para no dar dos viajes¡±, cuenta en el sal¨®n del restaurante Cantalejo, junto al metro de La Latina de Madrid.

Todo apunta a que este nuevo h¨¢bito ha llegado para quedarse. La instauraci¨®n del pago en met¨¢lico amenazaba la pr¨¢ctica de la propina, que el cliente sol¨ªa cubrir con las monedas que sobraban de la cuenta. Pero, en contra de lo que podr¨ªa parecer a primera vista, en el sector se?alan que los consumidores se han adaptado, y que en todo caso tan solo se ha registrado una ligera ca¨ªda en el pago de este sobresueldo para los que viven de la hosteler¨ªa. ¡°Vemos que cada vez es m¨¢s habitual cargar la propina al pagar con tarjeta¡±, mantiene Emilio Gallego, secretario general de Hosteler¨ªa de Espa?a, quien estima que estas gratificaciones se han reducido tan solo un 10% en los ¨²ltimos meses, seg¨²n un sondeo interno de la patronal.

David Fern¨¢ndez, due?o del mes¨®n asturiano Paixari?os, tambi¨¦n en la capital, asegura que ocho de cada diez clientes usan tarjeta, una f¨®rmula que antes de la pandemia era residual. ?l no cree que los nuevos tiempos est¨¦n erosionando las propinas. Incluso podr¨ªa ser al contrario: ¡°Puede que sea porque ahora trabajamos mucho la terraza, pero la gente ahora deja incluso m¨¢s¡±. Aunque s¨ª se?ala que el que antes no dejaba apenas propina, ahora menos: ¡°Es la excusa perfecta, ahora nunca llevan nada suelto¡±. En la misma direcci¨®n apunta Eduardo, del Cantalejos: ¡°El pago con tarjeta ha subido much¨ªsimo, pero no vemos que las propinas decaigan. Lo que s¨ª es muy com¨²n es que te pregunten si te la pueden dejar con la tarjeta porque se piensan que a lo mejor se las va a quedar mi jefe¡±.

El Banco de Espa?a confirma la digitalizaci¨®n de los pagos tras el paso de la pandemia. Si en 2019 el 41% de los espa?oles usaba la tarjeta de d¨¦bito para pagar de manera habitual (el 53% usaba efectivo), en 2020 ese porcentaje ascendi¨® hasta el 54% (el 36% continu¨® usando monedas y billetes). En el caso del comercio y la hosteler¨ªa la ca¨ªda del pago en efectivo fue incluso mayor el a?o pasado: siete de cada diez clientes usaron tarjeta, y el 69% de los consumidores planea seguir utiliz¨¢ndola.

El informe de uso de efectivo de la entidad tambi¨¦n revela que ¨²nicamente el 2,5% de la poblaci¨®n dej¨® de usar el efectivo por motivos de higiene a causa de la pandemia. La gran mayor¨ªa se pas¨® a la tarjeta porque la mitad de los establecimientos de Espa?a promovieron el uso de m¨¦todos de pago alternativos, seg¨²n el Banco de Espa?a. La Asociaci¨®n Espa?ola de la Banca (AEB) cifra en un 9% el incremento de venta de dat¨¢fonos en el ¨²ltimo a?o.

La digitalizaci¨®n del consumo tambi¨¦n ha catapultado a aplicaciones de micropagos, como Bizum, muy com¨²n en la hosteler¨ªa porque permite a una persona hacerse cargo de la cuenta para que despu¨¦s cada comensal le transfiera su parte sin pagar comisiones. En la primera mitad del a?o, Bizum ya ha registrado m¨¢s transacciones que en el conjunto de 2020 y esperan alcanzar los 450 millones de operaciones en diciembre, frente a los 212 millones del a?o pasado.

El pr¨®ximo paso de la aplicaci¨®n, seg¨²n explica Fernando Rodr¨ªguez, director de desarrollo de negocio de la empresa, es que los clientes paguen directamente en restaurantes y comercios con Bizum, mediante una transacci¨®n al local. ¡°Nuestra idea es combatir el efectivo¡±, reconoce Rodr¨ªguez.

Comisiones alrededor del 2%

Bizum es propiedad de una veintena de grandes bancos espa?oles y su objetivo de desbancar a las monedas demuestra que estas entidades son las m¨¢s beneficiadas por la digitalizaci¨®n. La tasa media real aplicada en 2020 a cada pago con tarjeta fue del 0,35%, seg¨²n el Banco de Espa?a, y los comercios pagaron 562 millones a las entidades financieras por estas tarifas.

En la hosteler¨ªa esta tasa es muy superior, de alrededor del 2%, seg¨²n Miguel Alonso, due?o del restaurante La Bodeguita del Arte, frente al parque de El Retiro de Madrid. ¡°Para m¨ª el aumento del pago con tarjeta es un palo econ¨®mico. Parece un porcentaje peque?o, pero si facturas 600 euros al d¨ªa estamos hablando de m¨¢s de 4.000 euros al a?o¡±.

La pandemia tambi¨¦n ha tra¨ªdo otras tendencias al sector que facilitan el consumo a los clientes, como el uso del contactless [pago con tarjeta sin introducirla en el dat¨¢fono], que ha aumentado un 45% en la pandemia, seg¨²n la consultora Gfk. Tambi¨¦n gana terreno el uso del tel¨¦fono m¨®vil para pagar en establecimientos, que ya es la opci¨®n favorita del 12% de los consumidores, seg¨²n una encuesta de Pecunpay.

Los hosteleros coinciden en se?alar a los extranjeros como los consumidores que mejores propinas deja. La ca¨ªda del turismo tras la irrupci¨®n del virus ha mermado este peque?o extra que reciben los camareros a final de mes. A esto se une que la tradici¨®n de dejar propina lleva a?os en decadencia, seg¨²n Emilio Gallego: ¡°Es verdad que en Espa?a tienen cada vez menos peso, sobre todo comparado con otros pa¨ªses¡±. En este sentido, el representante de la patronal reconoce que estas gratificaciones solo son un peque?o extra a final de mes: ¡°Hoy la propina no es m¨¢s que una peque?a alegr¨ªa, pero no una parte importante de la retribuci¨®n de los empleados¡±.