La Comisi¨®n Europea reconoce la energ¨ªa nuclear como verde al menos hasta 2045

La energ¨ªa nuclear ha vivido durante la Nochevieja de 2021 un apag¨®n parcial en Berl¨ªn y un renacer en Bruselas. Alemania ha cerrado en la madrugada del viernes tres de sus seis centrales nucleares en funcionamiento como parte del plan aprobado para clausurar toda la producci¨®n at¨®mica antes de finales de 2022. Pero, tambi¨¦n al filo de la medianoche, la Comisi¨®n Europea puso en circulaci¨®n su propuesta para modificar la clasificaci¨®n de las energ¨ªas verdes a efectos de los inversores e incluir en ella la energ¨ªa nuclear y el gas natural.

El proyecto legal de Bruselas, un texto de 60 p¨¢ginas al que ha tenido acceso EL PA?S, otorga el reconocimiento de verde a las centrales nucleares que ya est¨¢n en marcha y a las que se construyan al menos hasta 2045. Las plantas de generaci¨®n de electricidad con gas tambi¨¦n gozar¨¢n del mismo reconocimiento al menos hasta 2030.

La propuesta, previsiblemente muy pol¨¦mica, aparece recogida en el borrador del acto delegado que enmendar¨¢ la llamada taxonom¨ªa o clasificaci¨®n de las actividades del sector energ¨¦tico que se consideran sostenibles medioambientalmente. Nuclear y gas son clasificadas en la segunda categor¨ªa de la taxonom¨ªa, es decir, entre las que son bajas en emisiones de carbono y para las que de momento no hay una alternativa disponible.

La clasificaci¨®n europea, pionera en el mundo, establece los criterios que debe cumplir una fuente de energ¨ªa para ser considerada como verde, con el objetivo de orientar la inversi¨®n financiera hacia esos proyectos. La captaci¨®n de esa financiaci¨®n ser¨¢ vital para descarbonizar la producci¨®n energ¨¦tica y cumplir el objetivo de reducir a cero las emisiones en 2050, fijado en el Pacto Verde de la UE. Bruselas calcula que el consumo energ¨¦tico supone el 75% de las emisiones de gases con efecto invernadero en territorio comunitario.

La Comisi¨®n aprob¨® en abril de 2021 el primer acto delegado sobre la base del reglamento de la taxonom¨ªa, y en ese texto se dej¨® fuera a la energ¨ªa nuclear y al gas. A lo largo del a?o pasado, sin embargo, se desat¨® una agria batalla entre los pa¨ªses partidarios de incluir a la energ¨ªa nuclear en la taxonom¨ªa, liderados por Francia, y los que abogaban por incorporar el gas, con Alemania al frente.

Malestar en el seno de la Comisi¨®n Europea

La propuesta de la Comisi¨®n busca un compromiso entre los dos bandos al incorporar ambas fuentes de energ¨ªa, pero con el riesgo de arruinar la credibilidad de una taxonom¨ªa que aspiraba a convertirse en un referente mundial. El malestar en el seno del Ejecutivo comunitario es de tal magnitud que la presidenta del organismo, Ursula von der Leyen, asumi¨® la tutela del proyecto. Sin embargo, no logr¨® aprobarlo el a?o pasado como estaba previsto.

Von der Leyen solo ha podido lanzar su propuesta en la ¨²ltima noche del a?o, pero ¨²nicamente para someterla a consultas e intentar aprobarla ¡ªsi no hay una revuelta en contra¡ª a mediados de enero. Desde ese momento, el proyecto pasar¨ªa a deliberaci¨®n por parte del Consejo (en el que se sientan los 27 gobiernos), donde ser¨¢ aprobada salvo que una mayor¨ªa cualificada de los Estados se pronuncie en contra. La presidenta de la Comisi¨®n ha buscado contentar tanto a los partidarios de la nuclear como a los del gas, lo que podr¨ªa neutralizar la resistencia y facilitar la aprobaci¨®n de la nueva clasificaci¨®n.

Pero la partida, de momento, no parece ganada del todo. El vicecanciller y ministro alem¨¢n de Econom¨ªa y Protecci¨®n del clima, el ecologista Robert Habeck, se ha apresurado este s¨¢bado a expresar su disgusto con la propuesta de la Comisi¨®n. ¡°Etiquetar la energ¨ªa nuclear como sostenible es un error con esta tecnolog¨ªa de alto riesgo¡±, ha se?alado el vicecandiller del gobierno de coalici¨®n liderado por los socialistas. Habeck tambi¨¦n ve ¡°cuestionable¡± la inclusi¨®n del gas en la taxonom¨ªa. Y defiende que la apuesta para la transici¨®n energ¨¦tica debe centrarse en ¡°construir la infraestructura necesaria e impulsar la producci¨®n de hidr¨®geno¡±.

¡°Cualquiera que diga que podemos conseguir cumplir los objetivos del Pacto Verde para 2050 sin energ¨ªa nuclear, no est¨¢ viendo la verdad porque las cifras est¨¢n aqu¨ª¡±, se?alaba, en cambio, el comisario europeo de Mercado Interior, el franc¨¦s Thierry Breton, en una reciente entrevista con EL PA?S y un reducido grupo de medios europeos. El comisario insist¨ªa en que se necesita, ¡°sin duda, una clasificaci¨®n que ayude a canalizar la financiaci¨®n adecuada, tambi¨¦n hacia la energ¨ªa nuclear, para asegurar el llegar [a los objetivos de reducci¨®n de emisiones]¡±. Breton se abr¨ªa a conceder similar reconocimiento al gas, en aras de facilitar el visto bueno de Alemania. ¡°Estoy empujando, en la discusi¨®n de la Comisi¨®n, para tener esta clasificaci¨®n que englobar¨¢ tanto la nuclear como el gas¡±, apuntaba el pol¨ªtico franc¨¦s.

Efectivamente, el proyecto para enmendar la taxonom¨ªa reconoce a la energ¨ªa nuclear y al gas como fuentes de generaci¨®n de electricidad bajas en emisiones de carbono y para las que no hay una alternativa ni tecnol¨®gica ni econ¨®micamente viable. El proyecto legal se?ala que ¡°al proporcionar una fuente estable de suministro de energ¨ªa, la energ¨ªa nuclear facilita el despliegue de fuentes renovables intermitentes y no da?a su desarrollo¡±.

El texto fija los criterios t¨¦cnicos que deber¨¢n cumplir las centrales nucleares para ser aceptadas como verdes. Y dado el largo plazo con que se gestiona la inversi¨®n en ese sector, se ofrece la etiqueta de verde a las centrales cuyo permiso de construcci¨®n se expida antes de 2045.

En el caso del gas, la etiqueta verde se conceder¨¢ a las plantas en funcionamiento que emitan menos de 100 gramos de di¨®xido de carbono (CO?) por kilovatio hora. El umbral es mayor (270 gramos de CO? por kWh) para las de nueva construcci¨®n, pero siempre supeditada a que la producci¨®n no pueda cubrirse con fuentes renovables y que la planta se utilice para sustituir otra fuente de generaci¨®n con mayor nivel de emisiones.