Los economistas admiten la necesidad de mejorar la regulaci¨®n del fijo discontinuo
Desde Trabajo proponen afinar su uso en negociaci¨®n colectiva, con mejoras legislativas y control de la Inspecci¨®n; y Conde-Ruiz opta por restringir su utilizaci¨®n y flexibilizar el indefinido ordinario
La reforma laboral ha cumplido ya un a?o y hay pocas dudas sobre sus efectos positivos para reducir la tasa de temporalidad, que ha pasado del entorno del 25% al 13,7% en el sector privado. Sin embargo, aparte de la clara y extraordinaria reducci¨®n del n¨²mero de contratos temporales en dos millones (y aumento de tres millones de indefinidos), como nunca antes una reforma laboral hab¨ªa conseguido en poco m¨¢s de un a?o, los economistas van m¨¢s all¨¢ y se preguntan si esta reducci¨®n de la temporalidad ha disminuido tambi¨¦n la inestabilidad en el empleo.
En este punto, el catedr¨¢tico de Econom¨ªa Aplicada de la Universidad Pompeu Fabra y Premio Rey Jaime I de Econom¨ªa, Jos¨¦ Garc¨ªa Montalvo, ha asegurado hoy que a la hora de evaluar si la reducci¨®n de la temporalidad contractual se est¨¢ trasladando tambi¨¦n a una mayor estabilidad en el empleo ¡°hay se?ales contradictorias, porque siguen existiendo muchas salidas al desempleo e inactividad y entradas (rotaci¨®n laboral) y se firman muchos fijos discontinuos, pero su peso en el mercado no crece al mismo ritmo¡±.
Este ha sido solo un ejemplo introducido por Garc¨ªa Montalvo durante los Encuentros sobre el empleo en Espa?a organizados por el Consejo General de Economistas, que hoy han analizado el primer a?o de aplicaci¨®n de la reforma laboral y donde en un cara a cara el catedr¨¢tico de Fundamentos del An¨¢lisis Econ¨®mico de la Universidad Complutense, Ignacio Conde-Ruiz y el asesor del ministerio de Trabajo y Econom¨ªa Social, Jos¨¦ Manuel Lago, han discrepado sobre el impacto de la reforma en el mercado de trabajo, pero han coincidido en la necesidad de que el pr¨®ximo Gobierno ajuste el uso de los contratos indefinidos fijos discontinuos fomentados por la nueva normativa.
Para Conde-Ruiz, que admite que esta reforma ha sido la mejor de la democracia, ¡°la restricci¨®n de la contrataci¨®n temporal no ha conseguido erradicar, como se esperaba, los excesivos efectos de calendario que econom¨ªa espa?ola tiene; ni la rotaci¨®n (numerosas entradas y salidas del mercado de trabajo) que sigue estando ah¨ª¡±. Y a esto sum¨® el uso, en muchas ocasiones incorrecto, de los fijos discontinuos, como su utilizaci¨®n para los trabajadores de los colegios, que en su opini¨®n deber¨ªan ser fijos ordinarios; o para los empleos de un bar de fin de semana, cuyos trabajadores tendr¨ªan que tener un contrato indefinido con jornada parcial, ha explicado. ¡°Aunque la reducci¨®n de la tasa de temporalidad es extraordinaria, la excesiva rotaci¨®n sigue siendo una anomal¨ªa del mercado espa?ol en Europa¡±, ha insistido este economista.
Ante esta situaci¨®n, el tambi¨¦n subdirector de la Fundaci¨®n de Estudios de Econom¨ªa Aplicada (Fedea), ha recomendado que el siguiente paso, que deber¨¢ dar ya el nuevo Gobierno que salga de las urnas el 23-J, ser¨ªa trabajar sobre la actual reforma restringiendo el uso del fijo discontinuo y aumentando la flexibilidad del fijo ordinario, como ha hecho la ¨²ltima reforma estableciendo una nueva causa de despido en los contratos fijos de obra para la construcci¨®n. Seg¨²n Conde-Ruiz ser¨ªa conveniente que este ¨²ltimo contrato pudiera ser utilizado por las contratas y subcontratas. Asimismo, para reducir la excesiva rotaci¨®n, ha propuesto, como ya se hizo recientemente desde Fedea, la fijaci¨®n de un sistema bonus malus que premie a las empresas que usan menos dicha rotaci¨®n y castigue a las que abusan de ella.
Sin embargo, el representante del Ministerio de Trabajo y tambi¨¦n profesor de la Escuela de Relaciones Laborales de la Universidad de A Coru?a, Jos¨¦ Manuel Lago, ha admitido ¡°sin ninguna duda¡± que sigue habiendo un exceso de rotaci¨®n en el mercado laboral, pero, dicho esto, ha asegurado que esta se ha reducido en un tercio desde que se ha puesto en marcha la reforma laboral. ¡°En 2016 hac¨ªan falta 15 contratos fijos discontinuos para que el empleo en esta modalidad aumentara en una persona y ahora hacen falta cinco de estos contratos¡±, ha asegurado Lago. Adem¨¢s, ha asegurado que seg¨²n la Encuesta de Poblaci¨®n Activa (EPA), los fijos discontinuos son menos del 3% de los asalariados; y, seg¨²n la afiliaci¨®n a la Seguridad Social, menos del 5%, ¡°por lo tanto, sus efectos sobre el conjunto del mercado de trabajo est¨¢n muy matizados¡±.
Aunque este asesor de la ministra de Trabajo, Yolanda D¨ªaz, ha apuntado que a otra soluci¨®n distinta para ajustar el uso de la contrataci¨®n fija discontinua. En su opini¨®n, debe producirse una combinaci¨®n de tres factores: el primero, que la negociaci¨®n de los convenios sectoriales de los sectores m¨¢s afectados, como la hosteler¨ªa o la educaci¨®n, afinen su uso en dichos acuerdos colectivos; en segundo lugar, el siguiente Gobierno ¡°deber¨¢ mejorar la norma¡± y, finalmente, la Inspecci¨®n de Trabajo tendr¨¢ que controlar y sancionar el mal uso de esta contrataci¨®n.
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