De los datos a la era cu¨¢ntica
El arranque del decenio virtual acelera la transformaci¨®n tecnol¨®gica de Espa?a, que debe buscar su propio camino en un entorno empresarial y geopol¨ªtico muy competitivo
Quiz¨¢ el tiempo en tecnolog¨ªa fluye de una manera distinta. Quiz¨¢ dos horas sean insuficientes si queremos analizar el presente de la digitalizaci¨®n. Pero es el acordado para medir la transformaci¨®n de un pa¨ªs. Sus infraestructuras, sus personas, sus Administraciones P¨²blicas. La d¨¦cada digital 2030, propuesta de Retina con el Banco Santander actuando de impulsor y la consultora NTT Data de socio anual, trae el eco del nombre del informe que publica la Comisi¨®n Europea, dedicado a evalu...
Quiz¨¢ el tiempo en tecnolog¨ªa fluye de una manera distinta. Quiz¨¢ dos horas sean insuficientes si queremos analizar el presente de la digitalizaci¨®n. Pero es el acordado para medir la transformaci¨®n de un pa¨ªs. Sus infraestructuras, sus personas, sus Administraciones P¨²blicas. La d¨¦cada digital 2030, propuesta de Retina con el Banco Santander actuando de impulsor y la consultora NTT Data de socio anual, trae el eco del nombre del informe que publica la Comisi¨®n Europea, dedicado a evaluar los avances en digitalizaci¨®n de cada Estado miembro. Espa?a ha mejorado en todas las categor¨ªas. Y Europa sigue comprometida con la D de los Derechos.
La narrativa de Retina tambi¨¦n es un espacio f¨ªsico: el centro de arte madrile?o La Neomud¨¦jar. Un lugar que en el siglo XIX tuvo un uso ferroviario y hoy es un destino de creaci¨®n. Por las paredes corren trazos de pinturas (drippings, en el argot art¨ªstico) que recuerdan que alguna vez existieron. Pero es hora del presente y se imponen temas como la computaci¨®n cu¨¢ntica, los centros de datos o la migraci¨®n a la nube. Todo el fervor tecnol¨®gico y la iridiscencia de una era en cambio.
Algunos de sus protagonistas est¨¢n sentados al lado de una proyecci¨®n de luz donde se lee la palabra Retina, al igual que si fuera un ne¨®n de la c¨¦lebre artista americana Jenny Holzer. La tecnolog¨ªa se abre paso en un pa¨ªs que se est¨¢ poniendo al d¨ªa a la velocidad que giraban las bielas de esos antiguos trenes. ¡°La penetraci¨®n del 5G es del 81% y somos los primeros de la Uni¨®n Europea en redes de alta velocidad¡±. Este es el arranque de Susana Voces, presidente de la Asociaci¨®n Espa?ola de la Econom¨ªa Digital (Adigital). Un territorio conectado es un territorio pr¨®spero. Lleva solo tres meses en el cargo pero Silvia Rold¨¢n, viceconsejera de Digitalizaci¨®n de la Comunidad de Madrid, no duda de su estrategia. Atraer centros de datos, acelerar la digitalizaci¨®n de las empresas y la Administraci¨®n P¨²blica y situar al ciudadano en el centro. Sin olvidar a los mayores, el aprendizaje constante o hilvanar la brecha digital. Gran parte trazando frases que semejan titulares. ¡°Hacer una reingenier¨ªa de procesos para ser m¨¢s eficaces en la Administraci¨®n¡±. O ¡°estas tecnolog¨ªas deben suponer el 40% de la riqueza de la regi¨®n y generar un 100% de empleabilidad¡±. Lanza las propuestas como un tren que traquetea imparable sobre las traviesas. De los 179 municipios que componen Madrid solo 18 carecen de 5G. Y ser¨¢ ¡ªasegura la responsable p¨²blica¡ª por poco tiempo.
Peso econ¨®mico
La capital y su entorno son un reflejo de un pa¨ªs que est¨¢ cambiando. La consultora BCG calcula que en 2030 el 40% del PIB de Espa?a proceder¨¢ de esta nueva econom¨ªa; ahora anda en un 22,6%. Frente a la mirada, las estaciones circulan a enorme velocidad. La vida digital es un derecho humano. Y, tambi¨¦n, una exigencia social, que todos los desarrollos tecnol¨®gicos encajen en la sostenibilidad. Dif¨ªcil cuando los centros de datos consumen el 3% del total de la energ¨ªa del mundo. ¡°Pero las herramientas digitales hacen que seamos m¨¢s sostenibles¡±, matiza Silvia Rold¨¢n. Y recurre a su experiencia. Trabaj¨® durante 20 a?os en el sector de la log¨ªstica. Ah¨ª la inteligencia artificial lograba que la ruta de los camiones fuera m¨¢s eficiente y estos contaminasen menos. Id¨¦ntico efecto que la incorporaci¨®n a la rutina diaria del teletrabajo.
El problema es que a veces la tecnolog¨ªa pregunta y responde una voz llena de silencio. ?Qu¨¦ futuro aguarda a las pymes? Son el 99,9% de las empresas. ¡°En infraestructuras tecnolog¨ªas esenciales el nivel es bueno pero van retrasadas en las avanzadas: la nube, la rob¨®tica o la inteligencia artificial. Tenemos que ver c¨®mo somos capaces de incorporarlas, que atraigan m¨¢s talento e inversi¨®n¡±, desgrana Susana Voces. Todo dentro de un sistema de unicornios (firmas emergentes valoradas en m¨¢s de 1.000 millones de d¨®lares) y un entorno colaborativo con compa?¨ªas internacionales. Esta ser¨ªa su arcadia tecnol¨®gica de pa¨ªs.
Otra parada, otra nueva estaci¨®n. La computaci¨®n cu¨¢ntica oscila entre una revoluci¨®n y un jerogl¨ªfico. Quiz¨¢ existen tantos libros que la explican porque pocos saben realmente su significado. Alberto Casas, doctor y profesor de Investigaci¨®n del CSIC en el Instituto de F¨ªsica Te¨®rica (CSIC-UAM), trata de acercarse con la sencillez que aporta la docencia. Los ordenadores convencionales se basan en bit: 0 o 1. Solo pueden estar en uno de esos dos estados. Los computadores cu¨¢nticos trabajan en c¨²bit. La diferencia es que pueden superponerse los dos estados. En esta situaci¨®n, la capacidad de c¨¢lculo alcanza los trillones o cuatrillones. ¡°El problema¡± ¡ªaventura el f¨ªsico¡ª ¡°es que resultan poco fiables y cometen errores¡±. Algo que podr¨ªa mitigarse con la ayuda de la inteligencia artificial. Aunque mejor dejar las honduras de la mec¨¢nica cu¨¢ntica a quienes saben, y entrar en la realidad empresarial.
Tras 11 a?os de estudios (qu¨ªmicas, ingenier¨ªa inform¨¢tica y un doctorado en Inglaterra en f¨ªsica te¨®rica), Marta Pascual, consejera delegada de la empresa emergente Qilimanjaro Quantum Tech, arraigada en Barcelona, rebaja la cota del entusiasmo. ¡°En computaci¨®n cu¨¢ntica estamos al mismo nivel que los ordenadores tradicionales en la d¨¦cada de los 50 (chips integrados, primeros algoritmos), y existe mucho trabajo por hacer¡±. Es una tecnolog¨ªa estrat¨¦gica que ha pasado de los laboratorios de las universidades a ser una disrupci¨®n en el mercado.
Revoluciones a la vista
Un despegue ya ¡ªseg¨²n algunos f¨ªsicos¡ª hacia la segunda revoluci¨®n cu¨¢ntica. La multinacional IBM planea montar un computador cu¨¢ntico de 127 c¨²bits en San Sebasti¨¢n. Veremos si el Viejo Continente tambi¨¦n se queda apeado de este tren tras perder, por ejemplo, el de los chips, controlado, hoy, por China. ¡°El 25% de las start-ups cu¨¢nticas son europeas pero ¨²nicamente recibe el 5% de la financiaci¨®n mundial¡±, se queja Pascual. El espacio est¨¢ acotado. Si pensamos en las 10 compa?¨ªas esenciales del sector, cinco son estadounidenses, dos canadienses, una brit¨¢nica, una india y solo una procede de Europa. ¡°El paso del mundo acad¨¦mico al comercial nos falla¡±, coincide Alberto Casas. Aunque la regi¨®n sea la cuna de la f¨ªsica te¨®rica. La sem¨¢ntica es muy contradictoria porque tiene extraordinarias aplicaciones pr¨¢cticas. M¨¢s all¨¢ incluso de dise?ar f¨¢rmacos nuevos gracias, por ejemplo, a algoritmos de simulaci¨®n. Los ordenadores permitir¨¢n explorar sistemas complejos como el cuerpo de una persona y desarrollar medicamentos personalizados. En diez segundos se podr¨ªa probar millones de posibles tratamientos. Tambi¨¦n analizar las tendencias del clima o la econom¨ªa del planeta, que ha sufrido una sucesi¨®n de crisis, desde el comienzo del siglo, que nadie fue capaz de predecir, o sensores de ondas gravitacionales muy precisos.
Escrib¨ªa el autor argentino Ernesto S¨¢bato (1911-2011), quien por cierto trabaj¨® en el Laboratorio Curie de Par¨ªs, y fue doctor en f¨ªsica y matem¨¢ticas por la Universidad Nacional de la Plata (Buenos Aires), que ¡°la mejor novela es aquella que ayuda a vivir¡±. Esta reflexi¨®n se puede trasladar a la tecnolog¨ªa.
El cliente primero
El prop¨®sito es transversal ¡ªcomo se narra ahora¡ª dentro del relato de los expertos. ¡°Al final todo redunda en dar un mejor servicio al cliente¡±. Es la frase con la que concluye su intervenci¨®n Guillermo Mart¨ªnez, Chief Technology Officer (CTO) de Gravity. Una plataforma creada por el Banco Santander y nativa en la nube ¡°que ser¨¢ el impulso definitivo para su transformaci¨®n digital¡±, subraya. La compa?¨ªa ha digitalizado, con un software propio, el n¨²cleo bancario o core de la entidad (donde se ejecutan las operaciones m¨¢s cr¨ªticas: transferencias de dinero, dep¨®sitos, pr¨¦stamos) y lo ha migrado a la nube. El 90% de su infraestructura tecnol¨®gica ya ha empezado el viaje. ¡°Son cientos de millones de l¨ªneas de c¨®digo. Cuando se complete la transici¨®n en 2025, la plataforma gestionar¨¢ cada a?o m¨¢s de un bill¨®n de operaciones t¨¦cnicas en los sistemas del Santander¡±, detalla el experto.
Los n¨²meros son colosales. Unos 160 millones de clientes, 10 grandes mercados y 16.000 desarrolladores e ingenieros. Esas cifras tambi¨¦n transmiten un dialogo de convivencia intergeneracional entre los j¨®venes tecn¨®logos y quienes crearon, quiz¨¢ hace m¨¢s de tres d¨¦cadas, la arquitectura anterior (mainframe). El recorrido, adem¨¢s, est¨¢ siendo extenso y con alguna sorpresa. En 2022, Google Cloud, con el soporte de Gravity, anunci¨® un servicio para ayudar a otras compa?¨ªas en su transici¨®n del mainframe a la nube llamado Dual Run. ?Ventajas? ¡°Facilitar¨¢ el desarrollo de nuevos modelos de negocio, una mayor rapidez a la hora de llevar soluciones al mercado y ser m¨¢s ¨¢giles en los cambios¡±, enumera. O sea, simplicidad, aumento de la velocidad de acceso a los datos y actualizaciones m¨¢s frecuentes de apps. ¡°Todo redunda en dar un mejor servicio al cliente¡±. Sin duda, S¨¢bato ten¨ªa raz¨®n cuando escribi¨®, entre la literatura y la tecnolog¨ªa, esa frase en su ensayo Antes del fin (1998). ¡°Ayudar a vivir¡±. Por esas traviesas viaja el tren.
Conversaciones entre reinas y estrellas
El 11 de mayo de 1997 algo terminó para siempre. La computadora de IBM Deep Blue vencía al entonces campeón del mundo de ajedrez, Gari Kasparov. Quizá, tras el genio de Bobby Fischer (1943-2008), el mejor jugador de la historia. La máquina derrotaba al hombre y el ajedrez —hasta entonces métrica oficiosa de la inteligencia artificial— salía malherido. Pero cuando María Rodrigo Yanguas (Madrid, 1990) empezó a jugar con seis años aquel enfrentamiento nunca perteneció a su memoria. Era distraída e inquieta debido al Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH). Y el juego le ayudó a concentrarse. Tanto que ha sido dos veces subcampeona de España. Un año antes nació Sara García (León, 1989), investigadora del CNIO (Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas) y miembro de la reserva de astronautas de la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés).
La conversación entre ambas mezcla un tablero de ajedrez, el cáncer y las estrellas. Sara García sabe que resulta difícil viajar al espacio. Aunque también superó a 22.000 aspirantes. Cualquier proyecto de la Agencia Espacial exige el acuerdo de los 22 países miembros y es complicado. Además la NASA desmantelará la Estación Internacional en 2030 para dejar libre la órbita a los intereses de otras naciones. Pese a todo, el éxito de India al alunizar en el polo sur (¿en la segunda carrera espacial?) le recuerda que lo impensable resulta posible. “¡Una maravilla!”, exclama. Cree en la “cooperación para abordar los grandes problemas tecnológicos”, “tener referentes mujeres”, “romper con la educación basada en prejuicios y sesgos” y poner fin a las “autolimitaciones”. Reivindica el derecho a cambiar de proyectos y no “obcecarse en estudiar una carrera porque suena bien”.
Junto a ella, María Rodrigo, cuenta algo parecido con distintas palabras. “Me dedico al ajedrez para la vida”, sostiene. Doctorada en psicología por la Universidad Autónoma de Madrid, promociona esas 64 casillas y comenta partidas. “El ajedrez ayuda a pensar y tolerar la frustración”, defiende. Aunque la irrupción de la inteligencia artificial en el juego le provoca una mezcla de alegría e inquietud. Un teléfono inteligente derrota a cualquier ajedrecista. Ahora los sistemas de módulos (un programa de ordenador que calcula las mejores jugadas) se imponen. Aun así, espera ver una campeona del mundo porque cada vez juegan más chicas. Abrir con blancas siempre supone una ventaja.
Sigue toda la informaci¨®n de Econom¨ªa y Negocios en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal