El Gobierno prepara una pr¨®rroga parcial de seis meses de las medidas contra la crisis energ¨¦tica

El Gobierno prepara una pr¨®rroga parcial del escudo social dise?ado para combatir las consecuencias de la inflaci¨®n, la crisis energ¨¦tica y la guerra de Ucrania. Este paquete caduca el 31 de diciembre, y en ¨¦l se incluyen las rebajas de impuestos sobre la energ¨ªa, las ayudas al transporte y...

El Gobierno prepara una pr¨®rroga parcial del escudo social dise?ado para combatir las consecuencias de la inflaci¨®n, la crisis energ¨¦tica y la guerra de Ucrania. Este paquete caduca el 31 de diciembre, y en ¨¦l se incluyen las rebajas de impuestos sobre la energ¨ªa, las ayudas al transporte y las sectoriales. La pr¨®rroga se aprobar¨¢ pr¨¢cticamente sobre la bocina, en el Consejo de Ministros que tendr¨¢ lugar el mi¨¦rcoles. El Gobierno de coalici¨®n todav¨ªa est¨¢ negociando cu¨¢les de estas medidas y en qu¨¦ grado se incorporar¨¢n en el real decreto ley, cuya duraci¨®n deber¨ªa ampliarse hasta junio, siguiendo la l¨®gica de los anteriores. En principio se baraja mantener de alguna forma las ayudas al abono transporte y al menos una parte de las bajadas de impuestos energ¨¦ticos que m¨¢s impacto tienen en los precios. Aunque los costes de la electricidad en diciembre se han moderado bastante frente al a?o pasado y la curva de precios futuros descuenta cotizaciones en los mercados mayoristas similares a las de 2019, la factura repuntar¨ªa si se eliminasen las rebajas de impuestos, y eso es precisamente lo que se busca evitar.

Seg¨²n fuentes gubernamentales, este mismo martes estar¨¢n trabajando para cerrar el dise?o las vicepresidentas del Gobierno Mar¨ªa Jes¨²s Montero, Teresa Ribera, Nadia Calvi?o y Yolanda D¨ªaz. El presidente, Pedro S¨¢nchez, ser¨¢ el que tome las ¨²ltimas decisiones. En cualquier caso, la idea es modularlas de forma que su coste fiscal se rebaje. Ya el paquete de 2022 ascendi¨® a casi 22.000 millones de euros. Y el de 2023 ha supuesto cerca de 15.000 millones. Este importe deber¨ªa reducirse tambi¨¦n para el a?o que viene, m¨¢xime cuando en el mismo ejercicio comenzar¨¢n a aplicarse de nuevo las reglas fiscales europeas que exigen una reducci¨®n del agujero presupuestario existente en las cuentas p¨²blicas y cuando, adem¨¢s, la econom¨ªa, en plena ralentizaci¨®n europea, no acompa?ar¨¢ en la misma medida que lo ha hecho durante los a?os anteriores.

Vivienda e hipotecas

Las medidas sin coste fiscal tienen m¨¢s probabilidades de seguir. As¨ª sucede con los procedimientos antidesahucio que se perfilaron durante la pandemia para aquellas familias que acrediten condiciones econ¨®micas vulnerables y que no tienen posibilidad de encontrar otra vivienda. Tambi¨¦n la imposibilidad de suspender el suministro el¨¦ctrico y la ampliaci¨®n del descuento del bono social el¨¦ctrico. O la prohibici¨®n de despedir por causa de la guerra y la crisis energ¨¦tica a las empresas que se han acogido a ayudas directas o a un ERTE. Ya se ha elevado de casi 30.000 euros a cerca de 38.000 el umbral de renta a partir del cual las familias se pueden beneficiar de los mecanismos creados para aliviar la subida de tipos de las hipotecas. Y S¨¢nchez anunci¨® adem¨¢s una subida del bono de 250 euros para el alquiler de los j¨®venes.

Las iniciativas de apoyo al transporte, que incluyen la subvenci¨®n al abono, ser¨¢n adaptadas. El presidente ya ha comunicado que el transporte p¨²blico ser¨¢ gratis para menores, j¨®venes y parados. Y comunidades y ayuntamientos est¨¢n esperando para ver qu¨¦ hacen con la rebaja del abono porque hasta ahora el Estado pon¨ªa el 30% de la reducci¨®n y la entidad territorial encargada el 20%. En el Plan Presupuestario enviado a Bruselas se recogen para 2024 unos 760 millones destinados al ¡°subsidio del transporte urbano e interurbano pagado por el Estado: ayudas directas a CC AA y entidades locales para la reducci¨®n del precio del billete de transporte a usuarios habituales¡±. En todo caso, se mantendr¨¢ igual la gratuidad de Renfe en la Media Distancia y Cercan¨ªas, por valor de 660 millones de euros.

Las ayudas sectoriales, como la bonificaci¨®n al combustible de transportistas y agricultores, probablemente decaigan al considerarse que los precios se han moderado y ya no sean tan necesarias. El coste de la subvenci¨®n a los carburantes profesionales es importante: 1.600 millones. Y el resto de las ayudas sectoriales representan m¨¢s de 2.000 millones de euros. Todas ellas deber¨ªan suprimirse. Aunque en estas merecen una menci¨®n aparte las de la industria electrointensiva. Pese a que sus costes energ¨¦ticos se han reducido, el sector pide algo de alivio para evitar cierres. Y el Banco de Espa?a ha observado que la industria dependiente de la energ¨ªa ha sufrido mucho m¨¢s que el resto.

Rebajas energ¨¦ticas

El debate en el seno del Gobierno de coalici¨®n se centra sobre todo en las rebajas de impuestos a la energ¨ªa, que conllevan un coste fiscal importante. Preocupa que al retirarlas haya un repunte sustancial de la inflaci¨®n como ya advirtiera el Banco de Espa?a y que, adem¨¢s, suponga m¨¢s adelante un gasto adicional al revalorizar partidas como las pensiones. Por ejemplo, Funcas cifra el incremento de la inflaci¨®n en un punto solo por las medidas extraordinarias para rebajar el precio de la energ¨ªa. Por esta raz¨®n, se baraja mantener de alguna forma, aunque sean graduadas, aquellas bajadas de impuestos que tienen una repercusi¨®n directa en el IPC como la rebaja del IVA en la electricidad y el gas. Ahora mismo el IVA est¨¢ recortado al 5%, el impuesto especial de la electricidad al 0,5% y el de producci¨®n el¨¦ctrica se ha suprimido. Quiz¨¢s sea m¨¢s probable que se restablezca el impuesto a la producci¨®n por tener un impacto menos directo en el precio. Seg¨²n la Agencia Tributaria, el coste total de estas medidas de alivio en la factura energ¨¦tica asciende a cerca de 7.000 millones de euros. Y, seg¨²n explican fuentes conocedoras, hay diversas propuestas sobre la mesa sobre c¨®mo graduar en tiempo e intensidad la recuperaci¨®n de estos impuestos sobre la electricidad.

La congelaci¨®n del precio de la bombona de butano ser¨ªa otra propuesta sobre la mesa. Y la disminuci¨®n del IVA de los alimentos b¨¢sicos se mantendr¨¢ como ha declarado S¨¢nchez. Alimentos como el pan, los huevos, la fruta y las verduras seguir¨¢n con un tipo del 0%, mientras que el aceite y las pastas alimenticias continuar¨¢n con un tipo rebajado hasta el 5%.

Con el pr¨®ximo decreto, el Gobierno sumar¨¢ ya nueve tomando medidas para contrarrestar los efectos de la crisis de precios. La l¨®gica ha sido elaborar paquetes de seis meses para ver c¨®mo evolucionaba la econom¨ªa y la inflaci¨®n. Pero esto tiene que compatibilizarse con una ralentizaci¨®n de la econom¨ªa y el retorno de las reglas de gasto en Europa tras los shocks provocados por la covid y la guerra de Ucrania.

El Gobierno envi¨® a Bruselas que los ingresos totales del conjunto de las Administraciones aumentar¨ªan en unos 36.000 millones de euros en 2024. Pero solo las comunidades aut¨®nomas van a llevarse 20.000 millones de ese incremento. Los ayuntamientos, unos 5.000 millones. Las pensiones, otros 11.000 millones. Y subir¨¢n partidas como los intereses o los subsidios de desempleo tras su reforma. El margen es estrecho. Y la Autoridad Fiscal ya advirti¨® de que el d¨¦ficit p¨²blico solo bajar¨ªa el a?o que viene por la retirada de las medidas anticrisis, valoradas en unos 15.000 millones. De ah¨ª que sea tan importante retirarlas. Al menos una parte.

A pesar de la desaceleraci¨®n econ¨®mica, el Ejecutivo se mantiene optimista respecto a la recaudaci¨®n del IRPF y de las cotizaciones sociales, debido al buen comportamiento del empleo y las subidas de salarios y pensiones. Pero en todo caso el margen es muy limitado para poder subir algunas partidas y a la vez cumplir con la disciplina presupuestaria que empezar¨¢ a aplicarse. El presupuesto va a exigir una ejecuci¨®n muy ajustada con el problema de que las comunidades disponen de ingresos y se les ha concedido cierto margen con sus objetivos presupuestarios. Algunas fuentes del Gobierno ven asequible la reducci¨®n del d¨¦ficit, que sin medidas extraordinarias el propio Ejecutivo ha valorado de forma interna en el entorno del 3,5% del PIB. Pero otras lo consideran un reto may¨²sculo en un entorno de ralentizaci¨®n econ¨®mica y con la necesidad de dedicar m¨¢s recursos al envejecimiento de la poblaci¨®n y las inversiones verdes, digitales y de defensa.

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