El Banco de Espa?a se juega su futuro

En pocos d¨ªas el Banco de Espa?a se juega su futuro. Y quiz¨¢s su independencia. O, m¨¢s precisamente, la apariencia tangible de su independencia. Antes del 10 de septiembre el Gobierno debe nombrar a su nuevo gobernador. Pablo Hern¨¢ndez de Cos termin¨® su mandato el 11 de junio, y su vacante lleva casi tres meses sin cubrir, salvo temporal y accidentalmente por la subgobernadora, Margarita Delgado. ¡°Este retraso de muchas semanas en el nombramiento resulta alarmante: en el mundo financiero y de banca central, el efecto reputacional es ya muy serio¡±, advierte Jos¨¦ Manuel Gonz¨¢lez-P¨¢ramo, catedr¨¢tico y ex miembro del comit¨¦ ejecutivo del Banco Central Europeo (BCE) entre 2004 y 2012.

Ocurre que el Gobierno y el PP siguen sin alcanzar un acuerdo sobre los nombres del gobernador/a y subgobernador/a. El candidato m¨¢s que oficioso ¡ªoficial pero sin ser p¨²blicamente reconocido¡ª es el actual ministro de Transformaci¨®n Digital, Jos¨¦ Luis Escriv¨¢. Nadie discute su cualificaci¨®n t¨¦cnica, pues es antiguo funcionario del Banco de Espa?a (en su Servicio de Estudios) y, sobre todo, fue jefe de divisi¨®n de Pol¨ªtica Monetaria del BCE en su despegue (1999-2004) y director para Am¨¦rica del Banco Internacional de Pagos (BIS) entre 2012 y 2014.

Pero s¨ª la conveniencia pol¨ªtica de que un ministro en activo d¨¦ el salto al banco central. Un miembro de la c¨²pula del PP razona a este diario que eso ¡°es inaceptable, porque pone en cuesti¨®n la independencia del Banco de Espa?a, lo politiza y ahonda la degradaci¨®n institucional¡±. Fuentes del Ejecutivo replican que el Gobierno Rajoy propuso a su ministro en activo Luis de Guindos como vicepresidente del BCE, con muchas menos calificaciones por el coste financiero del rescate bancario y su pasado como presidente en Espa?a de Lehman Brothers, mientras que Escriv¨¢ fue nombrado por aquel Gobierno presidente de la Autoridad fiscal independiente (AIReF): ¡°?Eres independiente si te nombra el PP pero inadecuado si lo hace el PSOE?¡±, se preguntan. Y desde el Banco de Espa?a hay quien se pregunta si la opci¨®n Escriv¨¢ ¡°acabar¨ªa blanqueando la funesta operaci¨®n Guindos¡±, de ¡°resultados lamentables¡±, concluye un ministro. El propio Guindos se ha defendido alegando que su nombramiento pas¨® otros filtros, como el del propio consejo del Eurobanco.

Todos tienen argumentos, pero algunos son gaseosos. El fondo del debate no es si el trabajo en una Administraci¨®n de un color (o de dos distintas) inhabilita, ni tampoco si se supera uno o m¨¢s filtros, sino si el salto es directo desde el Gobierno, sin pasar cuarentena, al menos intelectual, para sortear conflictos de inter¨¦s. Como sucede en el mismo Banco de Espa?a, cuyo gobernador/a debe guardarla dos a?os tras su cese.

Tampoco otros casos europeos que han resultado bien, como el de M¨¢rio Centeno, de ministro a gobernador del Banco de Portugal, son resolutivos, pues siempre puede haber excepciones. Estos saltos ¡°no est¨¢n bien vistos por los bancos centrales, as¨ª que pueden erosionar la influencia de quienes los emprendan sobre sus colegas, aunque claro, eso no excluye la posibilidad de que una vez el candidato llega al puesto lo haga muy bien¡±, concede P¨¢ramo.

Legitimidad y resultados

La independencia de los gobernadores forma parte de un debate m¨¢s amplio que ahora resurge: la independencia global de los bancos centrales. Esta es un imperativo legal. ¡°Ni el BCE ni los bancos centrales nacionales¡­ podr¨¢n solicitar o aceptar instrucciones de las instituciones de la Uni¨®n, ni de los Gobiernos¡±, manda el Tratado de la UE (art¨ªculo 130).

Tambi¨¦n resulta de una conveniencia monetaria derivada del problema de la inconsistencia temporal: ¡°Un banco central cortoplacista, que decide de acuerdo a un horizonte temporal, por ejemplo, tiene incentivos¡± para desarrollar una estrategia expansiva que estimule ¡°un crecimiento a corto plazo, aunque ello suponga perder credibilidad y una revisi¨®n al alza de las expectativas de inflaci¨®n a medio y largo plazo¡±, resumen Javier Garc¨ªa Arenas y Adri¨¤ Morron (Caixabank Research, abril 2021). El ejemplo en caricatura es el Banco de la Rep¨²blica de Turqu¨ªa, cuyo nepotismo dispara este a?o los precios a cerca del 50%.

La independencia se desglosa y comprueba en varios baremos: el legal, el personal, el funcional, el financiero¡­ Todos ellos componen el llamado ¨ªndice de Davide Romelli, que resume la creciente evoluci¨®n de 154 supervisores internacionales hacia la autonom¨ªa.

El problema de los bancos centrales es de legitimidad pol¨ªtica de origen: constituyen un poder no elegido. Para algunos, incluso ¡°un poder no democr¨¢tico que socava la base del Estado democr¨¢tico moderno¡±, como sostiene Juan Torres, catedr¨¢tico de Econom¨ªa Aplicada de la Universidad de Sevilla y autor del reciente M¨¢s dif¨ªcil todav¨ªa (Deusto). Aunque, m¨¢s exactamente, ese poder deriva de una elecci¨®n de segundo grado, pues sus dirigentes son designados por los Ejecutivos y estos, por los Legislativos. De modo que su legitimaci¨®n econ¨®mica depende de sus resultados: ¡°la independencia solo es valiosa en tanto que ayude a mejorar los logros macroecon¨®micos¡±, sostiene el profesor Christoph Weber, hoy en la francesa Escuela Superior de Ciencias Comerciales de Angers y entonces en la Universidad de N¨²remberg (ECB, Independence at risk?, Intereconomics, 2014).

Distintos an¨¢lisis emp¨ªricos han demostrado que a mayor autonom¨ªa de la pol¨ªtica, en general se han cosechado mejores resultados (v¨¦ase el texto can¨®nico En defensa de la independencia de la banca central frente a sus entusiastas, de Gonz¨¢lez P¨¢ramo, en Anales de la RACMP, 2023; y The case for central bank independence, BCE, 2020).

En Espa?a, la tradici¨®n reciente asocia independencia del supervisor con trayectoria no partidista de los candidatos y con consenso en la elecci¨®n de su c¨²pula (gobernador-a/subgobernador-a). Desde la ley de autonom¨ªa del Banco de Espa?a (1994) los t¨ªquets encabezados por Luis Angel Rojo, Jaime Caruana, Luis Linde y Pablo Hern¨¢ndez de Cos han sido consensuados en distinto grado, total o parcialmente, por los dos grandes partidos: el acuerdo abraz¨® a los dos principales cargos.

La excepci¨®n de Miguel ?ngel Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, secretario de Estado de Hacienda en el Gobierno Zapatero, fue doble, por su origen y porque sus competencias fueron luego invadidas por el ministro Guindos, forz¨¢ndole a anticipar el fin de su mandato. En nuestro caso, en que ¡°aumenta la polarizaci¨®n pol¨ªtica tambi¨¦n en el ¨¢mbito institucional, ser¨ªa buen¨ªsimo y especialmente adecuado que la gobernanza se decidiese por acuerdo¡±, apunta a EL PAIS el profesor Xavier Vives, del IESE, uno de los espa?oles m¨¢s escuchados en los foros de bancos centrales. ¡°De lo contrario, la oposici¨®n tirar¨¢ a dar contra el gobernador, poniendo en tela de juicio la instituci¨®n¡±, comulga un banquero central.

Acad¨¦micos y pol¨ªticos

Acad¨¦micos y expertos monetarios se manifiestan ampliamente contra la puerta giratoria de los Gobiernos a los bancos centrales. ¡°No estar marcado pol¨ªticamente es importante, no ya para el candidato en s¨ª, sino para la recepci¨®n p¨²blica del trabajo que deber¨¢ hacer, porque adem¨¢s de la capacitaci¨®n cuenta la apariencia. Lo malo de un salto de ministro a banquero central consiste en que afecta a esa apariencia¡±, subraya Vives. ¡°Puedes ser un gran economista y, en cambio, tener un pasado reciente que te haga inadecuado para el cargo: saltar directamente del Gobierno al banco central no es bueno. La vinculaci¨®n reciente con la pol¨ªtica y, especialmente, el activismo, no es recomendable¡±, sintoniza P¨¢ramo.

Todav¨ªa m¨¢s rotundamente se expresa desde EE UU el profesor Jes¨²s Fern¨¢ndez-Villaverde, catedr¨¢tico de Econom¨ªa en la Universidad de Pensilvania y acad¨¦mico visitante en varios bancos de la Reserva Federal: ¡°La historia econ¨®mica nos ense?a de manera aplastante que saltar de un consejo de ministros a ser gobernador de un banco central es total y absolutamente inadmisible¡±.

Villaverde recuerda la disfunci¨®n ¡°brutal¡± del counselor (equivalente a ministro) Arthur Burns, nombrado presidente de la Fed por Richard Nixon: ¡°Fue un desastre, sin lugar a dudas el peor dirigente de la Reserva Federal desde 1945¡å. Lo fue, ¡°y eso es lo peor, porque como le deb¨ªa el puesto a Nixon torci¨® la pol¨ªtica monetaria en la direcci¨®n que le conven¨ªa al presidente¡±. EEUU ¡°sali¨® tan trasquilado que, por dos generaciones, la mera idea de que un miembro del gabinete presidencial saltase directamente al banco central fue anatema¡±, remata. Y apostrofa: ¡°No es el ¨²nico caso: si quiere, le pongo dos docenas m¨¢s...¡±. A su juicio, ¡°en un pa¨ªs como Espa?a, el vector personal, particularmente la carrera profesional pasada, es el m¨¢s importante para la independencia, con mucha diferencia: as¨ª que es la voluntad del gobernador la que importa de verdad, ?quiere ser independiente o no?¡±.

En general, los acad¨¦micos destacan que el ¨¢mbito m¨¢s delicado para este tipo de saltos, en el territorio de la eurozona ¡°no es el de la pol¨ªtica monetaria, porque el candidato se convertir¨¢ en uno m¨¢s entre una veintena de gobernadores, sino en regulaci¨®n y supervisi¨®n: como dar el visto bueno a un determinado consejero de un banco comercial; o gestionar la resoluci¨®n y liquidaci¨®n de un banco, entre otros asuntos que pueden tener un impacto presupuestario¡±, desgrana P¨¢ramo. Concuerda Vives: ¡°Es m¨¢s relevante para las misiones de asesor¨ªa p¨²blica mediante la emisi¨®n de informes, que para la pol¨ªtica monetaria y la supervisi¨®n de la gran banca, que eso corre a cargo del BCE¡±.

Ese es precisamente uno de los debates de futuro de la instituci¨®n: el necesario equlibrio entre organismo supervisor del sector financiero y emisor de opiniones sobre riesgos macroecon¨®micos a largo plazo. El ¨²ltimo mandato de Hern¨¢ndez de Cos ha enfatizado esta ¨²ltima funci¨®n, algo que ha incomodado a algunos en el Ejecutivo.

Un banquero privado espa?ol de gran prestigio internacional apunta prioridades en positivo para el pr¨®ximo gobernador/a: ¡°Lo principal para un gobernador es conseguir influencia en Fr¨¢ncfort, no es tarea f¨¢cil, porque es uno de veinte¡±; despu¨¦s, ¡°evitar l¨ªos en la supervisi¨®n bancaria, pero es un flanco menor porque el grueso del sistema bancario espa?ol lo supervisa el BCE; y la tercera pata es ¡°dominar los mercados monetarios¡±. El perfil ideal, dice, es el de alguien que ¡°domine al menos dos de esas tres carpetas¡±. Ve, adem¨¢s, ¡°preferible que no venga del sector pol¨ªtico, porque otra de sus funciones es hacer un buen an¨¢lisis sobre la econom¨ªa espa?ola para aconsejar al Gobierno¡±.

El m¨¢s reconocido te¨®rico de la uni¨®n monetaria, el profesor Paul de Grauwe, de la London School of Economics, especifica a EL PAIS otros requisitos: ¡°He abandonado mi vieja idea de que un gobernador debe ser un especialista en econom¨ªa y pol¨ªtica monetaria¡±, escribe. ¡°Claro que debe tener conocimientos, pero debe ser sobre todo un l¨ªder p¨²blico y un buen comunicador. Sobre todo, esto ¨²ltimo¡±, plantea. Debe, adem¨¢s, ¡°exhibir habilidades pol¨ªticas, porque pese a la independencia pol¨ªtica, es inevitable que los pol¨ªticos intenten influir en las decisiones de pol¨ªtica monetaria; esa capacidad puede desviar las presiones¡±.

Frente al argumentario mayoritario de la academia, algunas ¨®pticas pol¨ªticas defienden la conveniencia de un pasado gubernamental. As¨ª, fuentes del Gobierno actual subrayan que ¡°en el Consejo de Gobierno del BCE se sientan ahora siete gobernadores que han sido ministros, y Austria acaba de anunciar el relevo de su representante tambi¨¦n en favor de un ministro actual¡±. Eso consagrar¨ªa un ¡°nuevo patr¨®n¡±, sostienen. A saber, ¡°haber tenido que gestionar pol¨ªticamente crisis desde un Gobierno, curte mucho¡±, eso s¨ª, conceden, ¡°siempre a condici¨®n de que los candidatos ¡°tengan experiencia financiera o en el mundo de la banca central¡±. Tambi¨¦n apelan a que los est¨¢ndares fijados por el Banco Internacional de Pagos, de Basilea, ¡°solo recomiendan evitar que el mandato de los gobernadores sea renovable, porque as¨ª se impide que el actual pueda trabajarse desde una posici¨®n de mando la reelecci¨®n¡±.

?Y que espera el BCE? ¡°Pablo [Hern¨¢nez de Cos] ha sido un colega fant¨¢stico: todos le echaremos de menos, yo la primera¡±, manifiesta la presidenta, Christine Lagarde. ¡°Espero que el Gobierno de Espa?a nombre a una persona que contribuya de una manera similar¡±, (Expansi¨®n, 11 de junio).

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