Bruselas alerta sobre el aumento del gasto p¨²blico por el impacto de la dana
La Comisi¨®n Europea acepta que el dinero que se destinar¨¢ a la reconstrucci¨®n de las zonas afectadas no influya en el c¨®mputo del d¨¦ficit
La Comisi¨®n Europa ha dado un nuevo espaldarazo a Espa?a, mejorando sus previsiones de crecimiento econ¨®mico para este a?o hasta el 3%. Pero en sus pron¨®sticos sobre la sostenibilidad de las cuentas p¨²blicas, a¨²n maltrechas tras la pandemia y la crisis energ¨¦tica, alerta de que la dana que ha arrasado la provincia de Valencia supondr¨¢ un aumento del gasto financiado a nivel nacional. El Gobierno ya ha anunciado dos paquetes de ayudas para la...
La Comisi¨®n Europa ha dado un nuevo espaldarazo a Espa?a, mejorando sus previsiones de crecimiento econ¨®mico para este a?o hasta el 3%. Pero en sus pron¨®sticos sobre la sostenibilidad de las cuentas p¨²blicas, a¨²n maltrechas tras la pandemia y la crisis energ¨¦tica, alerta de que la dana que ha arrasado la provincia de Valencia supondr¨¢ un aumento del gasto financiado a nivel nacional. El Gobierno ya ha anunciado dos paquetes de ayudas para las zonas afectadas, el primero por valor de 10.600 millones, y el segundo de otros 3.765 millones, dinero que se financiar¨¢ con m¨¢s emisi¨®n de deuda y que se trasladar¨¢ al d¨¦ficit p¨²blico. Las inundaciones han golpeado a unos 70 municipios, una zona que representa el 34,5% del PIB provincial y el 22% del auton¨®mico, con una riqueza conjunta de cerca de 28.000 millones de euros.
¡°Los riesgos que rodean las proyecciones est¨¢n relacionados con el alcance del gasto financiado a nivel nacional necesario para abordar el impacto de las recientes inundaciones en la Comunidad Valenciana¡±, se?ala la Comisi¨®n en sus previsiones econ¨®micas de oto?o, publicadas este viernes, en las que pone la dana como ejemplo del riesgo que suponen las cada vez m¨¢s frecuentes cat¨¢strofes clim¨¢ticas en t¨¦rminos humanos y econ¨®micos. ¡°La UE est¨¢ cada vez m¨¢s expuesta a los riesgos medioambientales¡±, concluye. La nota positiva es que Bruselas no tendr¨¢ en cuenta el mayor desfase en las cuentas p¨²blicas generado por las riadas a la hora de decidir si activa para Espa?a un procedimiento de d¨¦ficit excesivo. El ministro espa?ol de Econom¨ªa, Carlos Cuerpo, ha asegurado que la subida del gasto relacionada con la reconstrucci¨®n de las zonas afectadas se considerar¨¢ como una circunstancia puntual, adscrita a un ejercicio, y no estructural. Lo que viene a ser un one-off ¡ªun desembolso de car¨¢cter excepcional¡ª, en jerga contable. Y la Comisi¨®n ha asumido que as¨ª ser¨¢, seg¨²n fuentes comunitarias.
Algo parecido ocurre con varias sentencias que se han acumulado este a?o en materia de impuestos y que obligar¨¢n al Estado a realizar devoluciones millonarias, con un impacto potencial de 9.000 millones. Hacienda considera que estos reveses judiciales tambi¨¦n deben considerarse como extraordinarios, y conf¨ªa en que Bruselas no los tenga en cuenta en el c¨¢lculo del d¨¦ficit.
La raz¨®n no es balad¨ª. Aunque las nuevas reglas fiscales europeas son m¨¢s flexibles que las anteriores, y dan m¨¢s peso al crecimiento del gasto p¨²blico y la reducci¨®n de la deuda, se mantiene ese cors¨¦ presupuestario que obliga a los Estados miembros a situar la deuda y el d¨¦ficit por debajo de determinados umbrales. En el caso del saldo entre ingresos y gastos, este l¨ªmite contin¨²a situ¨¢ndose en el 3% del PIB. Tener un desfase superior supone que Bruselas pueda meter al pa¨ªs incumplidor en su brazo correctivo ¡ªalgo que ya vivi¨® Espa?a durante la crisis financiera¡ª, que implica un mayor control del Ejecutivo comunitario sobre las cuentas nacionales y la puesta en marcha de medidas de ajuste.
Ahora mismo, los n¨²meros rojos de Espa?a est¨¢n por encima de lo que marca el esquema comunitario: el d¨¦ficit cerr¨® en el 3,5% del PIB en 2023, un desequilibrio suficiente para que Bruselas abriera un procedimiento por d¨¦ficit excesivo. El Gobierno, sin embargo, ha logrado esquivar este castigo, esgrimiendo la espectacular reducci¨®n del desfase desde 2020 hasta ahora. El Gobierno dispar¨® entonces el gasto p¨²blico para hacer frente a la pandemia, un esfuerzo que elev¨® el d¨¦ficit p¨²blico por encima del 10%. Esta ratio se ha corregido a un ritmo vertiginoso en los ¨²ltimos a?os ¡ªalgo que no han logrado otros grandes del club, como Francia e Italia¡ª, pese a las ayudas concedidas para mitigar el impacto de la escalada inflacionaria avivada por la guerra en Ucrania. Y la tendencia, seg¨²n pronostica tanto el Ejecutivo espa?ol como el comunitario, va a continuar en los pr¨®ximos ejercicios, tanto por el din¨¢mico crecimiento de la econom¨ªa como por medidas concretas.
Inflaci¨®n
¡°Tras alcanzar el 3,5% del PIB en 2023, se espera que el d¨¦ficit de las Administraciones p¨²blicas siga disminuyendo en 2024, hasta el 3% [la previsi¨®n que ha presentado el Gobierno], ya que se est¨¢n eliminando progresivamente la mayor¨ªa de las medidas para mitigar el impacto econ¨®mico y social de los altos precios de la energ¨ªa. Se espera que la relaci¨®n ingresos/PIB aumente, en parte debido a la retirada de las reducciones del IVA y del impuesto especial sobre la electricidad, as¨ª como a la eliminaci¨®n de la exenci¨®n del impuesto sobre el valor de la electricidad. La eliminaci¨®n progresiva de la bonificaci¨®n a los carburantes genera algunos ahorros en el lado del gasto¡±, resume la Comisi¨®n en su informe, en el que tambi¨¦n menciona las inundaciones que han afectado a otros pa¨ªses, como Polonia y Grecia, y a c¨®mo estos desastres tienen el potencial de frenar el proceso de desinflaci¨®n.
¡°Las recientes inundaciones que han asolado partes del sur de Espa?a en torno a la fecha l¨ªmite de esta publicaci¨®n ilustran una vez m¨¢s las dram¨¢ticas consecuencias que el cambio clim¨¢tico puede tener sobre las personas, su h¨¢bitat y la econom¨ªa¡±, recoge el documento. Los da?os a la infraestructura en las regiones afectadas pueden tener repercusiones m¨¢s amplias en el tejido productivo m¨¢s all¨¢ de sus fronteras, mientras que las perturbaciones de la actividad econ¨®mica podr¨ªan reavivar las presiones inflacionarias, en particular sobre los alimentos¡±.