El doble beneficio de invertir en la conservaci¨®n del medio ambiente
El sector de la econom¨ªa ambiental mueve en Euskadi m¨¢s de 1.500 millones de euros al a?o y da trabajo al 2,3% de la poblaci¨®n activa
En 2021, Partha Dasgupta, profesor em¨¦rito de la Universidad de Cambridge, public¨® los resultados de un informe encargado por el Ministerio de Econom¨ªa del Reino Unido en el marco de la COP26. En el documento, titulado La econom¨ªa de la biodiversidad y considerado el primer gran marco te¨®rico que integra la biodiversidad como componente esencial de la econom¨ªa, Dasgupta alertaba de la necesidad de incluir la conservaci¨®n de la naturaleza en los indicadores que emplean los pa¨ªses para evaluar su grado de riqueza.
Seg¨²n sus tesis, el hasta ahora sacrosanto PIB deber¨ªa dejar paso a un sistema de medici¨®n que incluyera el capital natural como parte esencial del nivel de prosperidad de los territorios. A Dasgupta, su trabajo le ha valido este a?o el Premio Fronteras del Conocimiento. Estos galardones internacionales, otorgados por la Fundaci¨®n BBVA y el CSIC, reconocen contribuciones clave en investigaci¨®n cient¨ªfica. ¡°Es el economista de nuestro tiempo que m¨¢s ha subrayado la importante interacci¨®n entre vida econ¨®mica y entorno natural¡±, destac¨® el presidente del jurado y premio Nobel de Econom¨ªa, Eric Maskin.
En los ¨²ltimos a?os, las ideas del economista de origen indio han tomado forma a trav¨¦s de la econom¨ªa ambiental, que agrupa la actividad de empresas y entidades que tienen en cuenta las conexiones entre lo financiero y lo ambiental. En el caso de Euskadi, y seg¨²n los ¨²ltimos datos del Eustat, este sector gener¨® en 2021 un valor a?adido de 1.519 millones de euros, el 1,95% del PIB vasco. Su crecimiento, adem¨¢s, se sit¨²a por encima del 7% interanual, y en t¨¦rminos de empleo ya da trabajo al 2,3% de la poblaci¨®n activa del Pa¨ªs Vasco.
Cuando hablamos de econom¨ªa ambiental lo hacemos sobre un sector que engloba a todas las empresas que trabajan en la mejora y prevenci¨®n de la contaminaci¨®n del medio ambiente, lo que incluye actividades como recogida y valorizaci¨®n de residuos; recuperaci¨®n de materiales para darles una segunda vida; eliminaci¨®n de basura; gesti¨®n del agua y desarrollo de tecnolog¨ªas para la depuraci¨®n o potabilizaci¨®n de esta, o control y seguimiento de la calidad del aire y el suelo.
Generar competitividad
En resumen, ¡°todo lo que busca preservar el medio ambiente¡±, se?ala Olga Mart¨ªn, directora general de Aclima ¨C Basque Environment Cluster. El ente agrupa a 140 organizaciones entre empresas privadas, instituciones p¨²blicas, universidades y centros tecnol¨®gicos vascos. ¡°Lo que intentamos es generar competitividad a las peque?as y medianas empresas del sector. Lo hacemos fomentando proyectos de innovaci¨®n colaborativos y grupos de trabajo para que la informaci¨®n llegue a todos¡±, apunta Mart¨ªn.
Mediante su trabajo han puesto en marcha proyectos relacionados con bienes tan b¨¢sicos como el agua, cuyo aprovechamiento es una urgencia ahora que el planeta siente sobre s¨ª los efectos del cambio clim¨¢tico. Uno de sus proyectos bandera es la limpieza de calles por ultrasonidos, que reduce dr¨¢sticamente el consumo de agua en entornos urbanos. ¡°La salud del medio ambiente est¨¢ ¨ªntimamente ligada con la nuestra. Lo hemos vivido con la pandemia de covid-19 y lo estamos viviendo tambi¨¦n con las problem¨¢ticas de salud derivadas del cambio clim¨¢tico¡±, defiende la experta.
Otro aspecto en el que est¨¢n trabajando es el de la gesti¨®n del ruido. Y es que su control, sobre todo en entornos urbanos, es una variable fundamental en la salud p¨²blica. Seg¨²n la OMS, la exposici¨®n a m¨¢s de 70 decibelios durante un periodo de tiempo prolongado puede producir da?os irreversibles en el o¨ªdo, as¨ª como efectos psicopatol¨®gicos. Por ello, la Uni¨®n Europea contempla en su Pacto Verde Europeo la reducci¨®n en un 30% para 2030 el n¨²mero de ciudadanos afectados de manera cr¨®nica por el ruido del transporte.
A ello se enfoca el proyecto Vibratren, que busca desarrollar un modelo de predicci¨®n para evaluar el impacto en las poblaciones de las infraestructuras ferroviarias, explica Olga Mart¨ªn: ¡°Se busca medir de una manera continua cu¨¢les son las vibraciones que producen las infraestructuras ferroviarias, conseguir muchos datos y relacionarlos despu¨¦s con las problem¨¢ticas que tengan las estructuras de las viviendas o con las quejas de un determinado vecindario; y al final, generar un modelo predictivo que permita prever d¨®nde ser¨ªa mejor ubicar una infraestructura concreta¡±, a?ade.
Valorizar los residuos
Tampoco olvidan en Aclima la importancia de una adecuada gesti¨®n de los residuos. En Euskadi se generan en torno a seis millones de toneladas al a?o. De ellas, aproximadamente la mitad va a eliminaci¨®n. Queda por tanto trabajo por hacer. ¡°Ah¨ª tenemos una oportunidad como pa¨ªs, la de generar infraestructuras ambientales que eviten que esos residuos vayan a un vertedero¡±, afirma Mart¨ªn. En este sentido, destaca otro proyecto en desarrollo junto a Gaiker, centro tecnol¨®gico especializado en biotecnolog¨ªa, composites sostenibles, reciclado y econom¨ªa circular.
Actualmente est¨¢n trabajando en mejorar la identificaci¨®n y clasificaci¨®n autom¨¢tica de residuos pl¨¢sticos, tanto industriales como de origen dom¨¦stico. ¡°Un pl¨¢stico que va al contenedor tiene muchos tipos de componentes. No es sencillo reciclarlo. Lo que tratamos es de que el primer cribado sea m¨¢s eficaz. Empleando la rob¨®tica, se puede reconocer cada material y separarlo en fracciones homog¨¦neas, de manera que sea m¨¢s sencillo darle una segunda vida a lo que forma ese residuo¡±, concluye Mart¨ªn.
Reutilizar las redes de pesca
Uno de los proyectos bandera actualmente en desarrollo bajo el paraguas de Aclima es Birsare, que busca convertir los residuos plásticos marinos en una nueva materia prima. El objetivo es reciclar las redes de pesca que, una vez rotas, irían a parar al vertedero. En lugar de transformarse en basura, se recuperarían para ser empleadas en el sector de la automoción o para elaborar mobiliario. “Pero para ello tenemos que limpiarlas muy bien. Lo que estamos buscando es una tecnología para limpiarlas. Además, buscamos hacerlo en seco, no emplear agua para así reducir el gasto de recursos naturales”, relata su directora, Olga Martín.