C¨®mo un nanosat¨¦lite del tama?o de un microondas puede dar cobertura m¨®vil a todo un oc¨¦ano

Sateliot quiere lanzar 256 nanosat¨¦lites al espacio antes de 2025 en su carrera para extender la cobertura de los operadores m¨®viles donde no llegan con las antenas tradicionales. La compa?¨ªa catalana acaba de levantar una ronda de financiaci¨®n de 10 millones, con el respaldo de Indra y Cellnex, y ha protagonizado la definici¨®n del ¨²ltimo est¨¢ndar 5G para el internet de las cosas. ¡°El 90% del planeta no tiene cobertura, un 70% son los oc¨¦anos y el otro 20% corresponde al 75% de la superficie terrestre¡±, defiende el consejero delegado de Sateliot, Jaume Sanpera, que busca ser un intermediario para que los operadores de telecomunicaciones puedan ofrecer la conexi¨®n a internet de sensores en cultivos, infraestructuras p¨²blicas y contenedores de transporte ubicados en lugares remotos. La compa?¨ªa asegura tener acuerdos precomerciales con empresas de telefon¨ªa ¡ª¡±en Espa?a tenemos las principales¡±¡ª que suman en total 500 millones de clientes.

¡°En el sector se dice que el espacio es duro¡±, comenta Sanpera sobre la carrera que ha iniciado, que calcula que supondr¨¢ ¡°una inversi¨®n de 20 millones¡± antes de que empiece la facturaci¨®n comercial de la empresa, prevista para 2023. En 2021, Sateliot ingres¨® medio mill¨®n y espera duplicar la cifra este a?o. Sin embargo, el plan de viabilidad de la compa?¨ªa prev¨¦ un crecimiento ¡°exponencial¡±: 15 millones en 2023 y llegar a los 1.000 millones de caja y 350 de ebitda en 2025. Son unos n¨²meros en los que, en la ¨²ltima ronda, tambi¨¦n han confiado el fondo ingl¨¦s Seraphine (especializado en new space) y Evonexus, una aceleradora basada en San Diego (Estados Unidos), donde Sateliot ha abierto sede. Tambi¨¦n tiene oficinas en M¨¢laga.

¡°Podr¨ªa tener sentido, pero a¨²n es pronto y depender¨¢ de nuestra estrategia empresarial y la suya¡±, responde Sanpera, sobre la posibilidad de que en un futuro Cellnex pudiera absorber su negocio (del que ya tiene un 3%), ya que es el mayor operador neutro en telefon¨ªa m¨®vil terrestre en Europa y Sateliot busca un modelo similar de negocio que, en vez de antenas, utilizar¨¢ nanosat¨¦lites. Indra tiene un 10% de Sateliot. Ambas empresas colaboran para elevar la comunicaci¨®n de los nanosat¨¦lites a la seguridad de misiones de defensa. De momento, la start-up de Sanpera solo tiene un sat¨¦lite en ¨®rbita con el que ha probado su tecnolog¨ªa. La Generalitat catalana se ha gastado medio mill¨®n de euros para un servicio de recogida, a trav¨¦s del nanosat¨¦lite de la compa?¨ªa, de datos de la humedad y temperatura del subsuelo en estaciones del Instituto Cartogr¨¢fico y Geol¨®gico de Catalu?a (ICGC). Aunque el sat¨¦lite utilizado pertenece a Sateliot y tiene otras funciones, la Generalitat lo bautiz¨® con el nombre de Enxaneta.

El mismo aparato (que sobrevuela Catalu?a dos veces al d¨ªa, un 1% del tiempo) sirve para otras dos pruebas piloto: una que busca en explotaciones agr¨ªcolas de Brasil ¡°incrementar en un 40% la productividad con un 50% menos de agua¡±, y otra en Nuevo M¨¦xico (EE UU), que, con sensores en una carretera donde hay tormentas de arena frecuentes, busca poder actuar con celeridad y evitar que la v¨ªa quede cortada.

Sanpera, que con Sateliot suma ocho empresas fundadas, hace referencia a Starlink, la compa?¨ªa creada por Elon Musk, que ya ha lanzado 1.300 nanosat¨¦lites en el espacio, no libres de pol¨¦mica por las interferencias que suponen para el trabajo de los astr¨®nomos. La empresa del fundador de Tesla pretende ofrecer banda ancha a clientes particulares. Sateliot necesita muchos menos sat¨¦lites (menos vueltas a la Tierra en total a lo largo del d¨ªa), ya que busca la banda m¨ªnima para recoger datos de sensores variopintos incluidos en unas cajas de pocos cent¨ªmetros que se alimentan con una bater¨ªa que dura dos a?os. Cada sensor cuesta unos cinco euros.

¡°Cuando vayamos aumentando el n¨²mero de sat¨¦lites podremos pasar de la agricultura a la log¨ªstica mar¨ªtima (2024), que necesita un dato cada dos horas. En 2025 ya podremos asumir la log¨ªstica terrestre, que necesita un dato cada hora¡±, expone Sanpera, que ve en los sensores posibilidades como monitorizar contenedores refrigerados en el mar y controlar si se manipulan, por ejemplo, paquetes para introducir sustancias ilegales. El sistema de comunicaci¨®n, v¨ªa radio, ha sido desarrollado por la empresa gallega Al¨¦n Space: ¡°Para poder ser los primeros del mundo en hacer esto y de forma r¨¢pida hemos tenido que seleccionar a los mejores en cada ¨¢mbito¡±. Sateliot lanzar¨¢ un segundo nanosat¨¦lite este a?o, ya con el est¨¢ndar aprobado por 3GPP, en cuya definici¨®n ha participado. En 2023 aspira a llegar a 16; 64 en 2024 y 256 en 2025. Los futuros lanzamientos se pueden hacer de ocho en ocho.

Lanzamientos

Cada nanosat¨¦lite, con medidas similares a un microondas, cuesta un mill¨®n de euros y lanzarlo otros 200.000. Los aparatos, que se desintegran en la atm¨®sfera al cabo de cinco a?os, sobrevuelan la Tierra a unos 500 kil¨®metros de la superficie, a diferencia de los tradicionales (a 36.000 kil¨®metros), del ahora llamado old space. El lanzamiento de Enxaneta se hizo en marzo de 2021 desde el cosm¨®dromo de Baikonur (Kazajist¨¢n), que pertenece a Rusia. ¡°Sinceramente, no pod¨ªamos imaginar que esto pasar¨ªa¡±, afirma Sanpera sobre la guerra en Ucrania. ¡°La log¨ªstica en Rusia es muy complicada, tienes que mandar el nanosat¨¦lite seis meses antes¡± y los pr¨®ximos lanzamientos de Sateliot ya estaban planificados para hacerse en el lanzador de Space X, de Elon Musk, en Florida.

Con dos patentes registradas de comunicaci¨®n satelital, Sateliot tiene actualmente 25 empleados, que espera duplicar antes de finales de a?o. El Ministerio de Asuntos Econ¨®micos ha autorizado a la compa?¨ªa lanzar 100 nanosat¨¦lites. ¡°Mi ilusi¨®n ser¨ªa sacar la empresa a cotizar en el Nasdaq¡±, expresa Sanpera, que lanz¨® al mercado su anterior compa?¨ªa, Eurona Telecom.

Sobre los retos de las nuevas empresas del espacio, de base tecnol¨®gica, Sanpera destaca la dificultad en Europa de convencer a los venture capital porque tienen una visi¨®n del riesgo m¨¢s conservadora que en EE UU. Se?ala tambi¨¦n la importancia de la promoci¨®n de la inversi¨®n p¨²blica innovadora y ve claves apuestas como la suya para que Espa?a pueda ¡°liderar una industria que en 2040 ser¨¢ trillonaria¡±. ¡°Si lo dejamos pasar, ocurrir¨¢ como siempre: ?Qu¨¦ inventen ellos!¡±, concluye.