Mois¨¦s y los precios de la energ¨ªa

Dicen que Golda Meir, primera ministra de Israel a comienzos de los a?os 70, ten¨ªa un car¨¢cter tan fuerte que se atrevi¨® a abroncar al mism¨ªsimo Mois¨¦s afirmando que ¡°arrastr¨® al pueblo jud¨ªo 40 a?os por el desierto, para guiarle al ¨²nico lugar en todo Oriente Medio donde no hay petr¨®leo¡±. Con esta categ¨®rica sentencia expresaba la resignaci¨®n y aislamiento que supone vivir rodeado de pa¨ªses que, muy al contrario de Israel, disponen de grandes recursos energ¨¦ticos que se mueven en funci¨®n de los intereses del s¨¢trapa de turno. Una situaci¨®n equivalente a la que hoy sentimos en la gran mayor¨ªa de pa¨ªses europeos al no poder comprar gas ruso. En este sentido, la Guerra del Yom Kipur que, en 1973, le toc¨® sufrir a Meir para repeler la invasi¨®n de Egipto y Siria, no est¨¢ tan alejada de los caprichos actuales de Putin que, con el cierre del Nord Stream, nos ha dejado secos de gas desde agosto.

La invasi¨®n de Ucrania nos ha obligado a sustituir los suministros rusos con gas natural licuado que ha tenido que venir de muy lejos. Tan fuerte ha sido la determinaci¨®n en las compras acometidas por Europa, que los precios cotizados en Holanda llegaron a superar los 300 euros el megavatio hora (MWh) a finales de agosto, una subida del 374%. Aunque el sobrecoste energ¨¦tico asumido es muy elevado, equivalente a un 10% del PIB de la zona euro, lo importante es que hemos sido capaces de llegar a las puertas del invierno con unas reservas en m¨¢ximos hist¨®ricos ¡ªal 94% de la capacidad total¡ª.

Sin embargo, en los ¨²ltimos dos meses, los precios han invertido su tendencia descontando un escenario de menor crecimiento econ¨®mico debido a unos tipos de inter¨¦s m¨¢s elevados, as¨ª como por los potenciales cambios regulatorios que en estos momentos se discuten en Europa con vistas a abaratar la factura energ¨¦tica. Las ca¨ªdas han sido tan fuertes que, esta misma semana, el precio spot mayorista del gas natural europeo ha llegado incluso a ser negativo. Durante una hora, los proveedores estuvieron dispuestos a pagar casi 16 euros a alguien capaz de absorber un megavatio hora de gas, aproximadamente el equivalente al consumo mensual promedio de un hogar en el Reino Unido.

?Por qu¨¦ tanta debilidad? ?Se han resuelto ya los graves problemas de oferta? No. La dram¨¢tica ca¨ªda de precios refleja la incapacidad de almacenaje adicional una vez los dep¨®sitos est¨¢n llenos y se genera la espera de los buques metaneros que llegan a Europa y tienen que esperar para vaciar el gas. Este exceso de inventarios que existe a corto plazo se puede apreciar en la diferencia que hay entre los precios del mercado al contado que cotiza a 29 euros el MWh y los 139 euros de los futuros a un mes. La situaci¨®n es puntual. Solo falta que las temperaturas se normalicen un poco y que, en noviembre, comience la demanda habitual de invierno. Los precios no tardar¨¢n en volver a subir con decisi¨®n.