Miles de estudiantes afrontan con nervios y excitaci¨®n la ¨²ltima Evau antes del cambio de modelo

Nervios, tensi¨®n y excitaci¨®n se reparten a partes iguales entre los miles de alumnos convocados en las universidades de la Comunidad de Madrid y de La Rioja. Ellos empiezan este lunes las pruebas de acceso a la universidad; ma?ana martes lo har¨¢n en el resto de comunidades ¡ªexcepto Baleares, que comenzar¨¢ la siguiente¡ª. Los apuntes bailan de mano en mano mientras los estudiantes intercambian las ¨²ltimas impresiones y hacen las ¨²l...

Nervios, tensi¨®n y excitaci¨®n se reparten a partes iguales entre los miles de alumnos convocados en las universidades de la Comunidad de Madrid y de La Rioja. Ellos empiezan este lunes las pruebas de acceso a la universidad; ma?ana martes lo har¨¢n en el resto de comunidades ¡ªexcepto Baleares, que comenzar¨¢ la siguiente¡ª. Los apuntes bailan de mano en mano mientras los estudiantes intercambian las ¨²ltimas impresiones y hacen las ¨²ltimas quinielas antes de escuchar su nombre en voz alta, presentar el DNI y entrar al aula del examen. A partir de ese momento, el runr¨²n constante que se escucha en el exterior se convierte en silencio. Ahora solo queda aplicar todo lo estudiado a lo largo del Bachillerato y demostrar los conocimientos adquiridos. Alea iacta est.

Alrededor de 300.000 estudiantes se presentan este a?o a la Evaluaci¨®n del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (Evau) ¨Dtambi¨¦n conocida como Ebau o Selectividad¨D. Los madrile?os V¨ªctor Bela y Pablo Santos, ambos de 18 a?os, son dos de ellos. Sentados en un banco en el campus de la Complutense y esquemas en mano reconocen estar un poco nerviosos. ¡°La primera semana de estudio me la tom¨¦ con m¨¢s calma, para ir entendiendo conceptos, pero en la segunda ya me puse m¨¢s serio¡±, comenta Bela.

Esta ser¨¢ la ¨²ltima Evau dise?ada a la vieja usanza, ya que el curso que viene se plantear¨¢n ex¨¢menes con m¨¢s preguntas que obliguen a razonar y m¨¢s competencial, es decir, menos memor¨ªstico y m¨¢s aplicado. Las faltas de ortograf¨ªa bajar¨¢n hasta un 10% la nota de cada prueba y se dar¨¢ la opci¨®n de elegir entre distintas preguntas en los ejercicios, pero siempre que no sea posible dejarse una parte del temario sin estudiar, como s¨ª se pod¨ªa hacer hasta ahora. En un principio, este nuevo modelo iba a aplicarse este a?o, pero la convocatoria de elecciones generales avanzada oblig¨® a su aplazamiento. La gran novedad para este curso es que los estudiantes tendr¨¢n que elegir entre Historia de Espa?a y Filosof¨ªa en la fase obligatoria, aunque despu¨¦s puedan escoger la otra en la espec¨ªfica.

Tanto M¨®nica Rodr¨ªguez como Adriana Salas, ambas de 17 a?os, se han decantado por hacer las dos asignaturas. Salas se ha reservado Filosof¨ªa para la parte optativa, cuenta, porque se le da mejor y punt¨²a m¨¢s. Misma estrategia han seguido ?ngel Garc¨ªa y Mart¨ªn S¨¢nchez, de 18 a?os, que repasan en voz alta la ideolog¨ªa marxista y su relaci¨®n con la actualidad mientras se l¨ªan un cigarrillo enfrente de la acampada en defensa de Palestina en la Complutense de Madrid. La elecci¨®n de ambas asignaturas, en su caso, estuvo motivada por querer evitar hacer dos pruebas de Matem¨¢ticas, las aplicadas y las acad¨¦micas. ¡°Nervioso no estoy, pero hay m¨¢s presi¨®n que en Bachillerato¡±, comenta Garc¨ªa, y S¨¢nchez a?ade que ¡°con las cinco horitas¡± que ha dormido, ¡°es suficiente¡±.

El objetivo final no es otro que sacar la mejor nota posible y poder as¨ª elegir la carrera y la facultad de destino preferidas. En algunas, como el doble grado de Matem¨¢ticas y F¨ªsica o Medicina, la exigencia es alt¨ªsima y es imprescindible rozar la perfecci¨®n para poder conseguir una de las codiciadas plazas. En otras, en cambio, es suficiente con aprobar el Selectivo, un requisito que consigui¨® el 96,2% de los aspirantes presentados en la convocatoria ordinaria, la de junio en 2023, y un 80,9% de los de la extraordinaria. Con una nota media disparada en los ¨²ltimos a?os, gracias a las facilidades otorgadas desde la pandemia para elegir las preguntas en los ex¨¢menes, hay grados en los que sacar menos de un 13,5 sobre 14 supone quedarse fuera.

Leyre Ruiz, de 18 a?os, sonr¨ªe aliviada al salir del primer examen de la jornada, el de Lengua Castellana y Literatura. ¡°Me lo esperaba as¨ª, no han ido a pillar, ha sido igual que los que hab¨ªa practicado¡±, comenta, y agradece la buena preparaci¨®n de su profesora. Coinciden con el diagn¨®stico ?scar Petria y Marcos Valc¨¢rcel, compa?eros de instituto, aunque Petria se lamenta por no haber tenido suerte con la parte de literatura. ¡°Me estudi¨¦ unas pocas y no me han ca¨ªdo¡±, explica resignado. Uno de los textos propuestos para analizar ha sido el art¨ªculo Espa?a duerme poco y mal, de EL PA?S. Todav¨ªa les quedan dos ex¨¢menes a lo largo de la jornada, el de Filosof¨ªa y el de Ingl¨¦s, as¨ª que aprovechan la hora de descanso ¡°para repasar alg¨²n autor¡±. Ser original o emplear frases cortas son algunos de los consejos de cuatro correctoras para sacar una nota m¨¢s alta.

La competencia cada vez m¨¢s voraz entre los estudiantes por rascar d¨¦cimas de donde sea, ha desencadenado tambi¨¦n una batalla entre centros por facilitar que sus alumnos entren en la carrera que desean. Y es que el expediente de Bachillerato cuenta un 60% en el c¨®mputo final en la Evau, mientras que la parte obligatoria un 40% y las optativas hasta dos puntos cada una. As¨ª, los colegios (especialmente los privados) y los institutos inflan los expedientes de sus alumnos. Canarias y Andaluc¨ªa son las dos comunidades en las que el desfase entre la nota media de Bachillerato y la de la fase general es mayor, con 1,5 puntos de diferencia y 1,3, respectivamente. Castilla y Le¨®n y Navarra, con 0,5, donde menos.

Los ex¨¢menes son distintos en cada comunidad aut¨®noma, que tienen las competencias para elegir las preguntas. En Catalu?a, Comunidad Valenciana, Baleares, Pa¨ªs Vasco y Galicia, adem¨¢s, se a?ade una asignatura extra, la de la lengua cooficial. Pero el acceso a las universidades se hace por distrito ¨²nico nacional, es decir, todos los estudiantes compiten entre ellos, con independencia de cu¨¢l sea su autonom¨ªa. Un hecho que, para el Partido Popular y Vox, supone un agravio comparativo.

Con la promesa de deshacer esta desigualdad, tanto los populares como los de extrema derecha llevan a?os repicando la melod¨ªa de hacer un examen ¨²nico e igual para todo el territorio nacional. El ¨²ltimo movimiento en esta direcci¨®n se produjo este domingo, cuando el l¨ªder del PP, Alberto N¨²?ez Feij¨®o, anunci¨® que las 14 comunidades aut¨®nomas donde gobierna su partido hab¨ªan alcanzado un acuerdo para elaborar una Evau ¡°com¨²n, justa y homog¨¦nea¡±. As¨ª lo incluyeron, tambi¨¦n, en su programa electoral de las ¨²ltimas generales ambas formaciones. Los expertos consideran, sin embargo, que por muy sensata que suene la medida en la teor¨ªa, en la pr¨¢ctica es muy compleja de aplicar, debido al conflicto educativo y pol¨ªtico que desencadenar¨ªa.

A la salida de cada examen, un rosario de alegr¨ªas y lamentaciones se entremezcla entre los estudiantes. Algunos optan por echarse una partida de cartas para desconectar y distraerse. Otros apuran hasta el ¨²ltimo minuto con los apuntes en la mano. Incluso algunos comentan las ganas de terminar y de irse de viaje.

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