J¨®venes tutelados en la Universidad: ¡°Tu pasado no tiene por qu¨¦ condicionar tu futuro¡±

Hace seis a?os, Flavia Bistriceanu entr¨® en el sistema de protecci¨®n de menores. El motivo se lo reserva, todav¨ªa es demasiado doloroso. ¡°Hay una temporada en que no est¨¢s, hasta que haces un clic, te centras y decides qu¨¦ camino seguir. Pero tambi¨¦n necesitas ayuda para superar ciertas barreras¡±, explica la joven de 17 a?os. Ella se enfoc¨® en un objetivo: estudiar la carrera de Relaciones Internacionales. No obstante, despu¨¦s de acabar el Bachillerato y aprobar la Selectividad, la nota no le llegaba. ¡°Aunque seas bueno para los estudios, las vivencias te afectan y la parte emocional es m¨¢s fuerte¡±, admite. De forma inesperada le lleg¨® esa ayuda para superar esta barrera y finalmente logr¨® entrar gracias a un nuevo programa de la Generalitat de Catalu?a de reserva de plazas universitarias para j¨®venes tutelados. ¡°El sitio donde has nacido te condiciona. Y este programa es una buena forma de mostrar a los tutelados que no solo pueden sobrevivir, y que tu pasado no tiene por qu¨¦ condicionarte el futuro, sino que puedes redireccionarlo y salir del pozo¡±, asevera.

La iniciativa surge de los 12 campus catalanes, tanto p¨²blicos como privados, en acuerdo con los departamentos de Universidades y Derechos Sociales (del que depende el servicio de tutela de menores). Se concreta en la reserva de una plaza en todos los grados de cada universidad para estudiantes que hasta los 21 a?os est¨¢n protegidos por el sistema, aunque ya no cuenten con la tutela de la Administraci¨®n. Este curso ocho j¨®venes se han beneficiado de la medida. La reserva de plazas no es algo nuevo en el sistema universitario. De hecho, muchas universidades ya gozan de esta medida colectivos tan diversos como personas con alguna discapacidad, los mayores de 25 y de 40 a?os, deportistas de ¨¦lite o miembros del pueblo gitano. Pero no para los j¨®venes tutelados. En los campus de Granada o C¨¢diz, estos j¨®venes cuentan con reserva de plazas en residencias o colegios mayores, pero no en los grados.

Estos alumnos llegan a la universidad con una mochila cargada de ayudas para cubrir todas las necesidades, desde la matr¨ªcula del primer curso (la renovaci¨®n de la beca del Ministerio de Educaci¨®n en cursos posteriores depender¨¢ de su rendimiento, como el resto de los alumnos), la residencia o una prestaci¨®n para gastos. ¡°Se trata de darles la oportunidad y que no les suponga ning¨²n impedimento. A veces, estos j¨®venes tienen revulsivos en su vida que les hacen dar pasos atr¨¢s y con estas medidas se trata de darles un empuj¨®n hacia adelante y ayudarlos en el tr¨¢nsito en la vida adulta, que si ya es dif¨ªcil para el resto de personas, imaginemos para los tutelados¡±, reflexiona Ester Cabanes, directora de Infancia de la Generalitat. La secretaria general del Consejo Interuniversitario de Catalu?a (organismo que agrupa Generalitat y rectores), Cristina Gelp¨ª, a?ade que, adem¨¢s de facilitar la v¨ªa de acceso, debe haber un acompa?amiento. ¡°Estos j¨®venes encontrar¨¢n una persona y equipo de referencia en todo aquello que puedan necesitar¡±.

En los campus ya hab¨ªa y sigue habiendo, independientemente de este programa, j¨®venes que provienen del sistema de protecci¨®n. El curso pasado hab¨ªa en las aulas catalanas 122 alumnos de este perfil, que accedieron a la universidad como el resto de sus compa?eros. La nueva iniciativa allana el camino a aquellos que han aprobado el Bachillerato y la Selectividad (ahora llamada EVAU), pero no han logrado la nota suficiente para entrar en la carrera deseada. ¡°Queremos que tengan esta oportunidad, porque tienen la dificultad a?adida de tener un futuro incierto, no est¨¢n en casa con su familia, y saben que el sistema de protecci¨®n un d¨ªa se acabar¨¢, as¨ª que tienen que empezar a construirse un camino de futuro¡±, tercia Cabanes.

Muchos de los alumnos tutelados escogen una FP relacionada con el cuidado de las personas, pero tambi¨¦n carreras como Educaci¨®n Social o Trabajo Social. ¡°Son j¨®venes muy resilientes. Se quieren dedicar a ello porque han sufrido lo que han sufrido¡±, apunta Cabanes. Es el caso de Laura (nombre ficticio ¡°por protecci¨®n personal¡±, apostilla), otra de las beneficiarias del programa, que en septiembre empez¨® Educaci¨®n Social en la Universidad de Barcelona. La eligi¨®, explica, a ra¨ªz de la buena relaci¨®n que estableci¨® con su educador y de todo lo que le ha tocado vivir; decidi¨® que quer¨ªa dedicar su vida a los colectivos m¨¢s vulnerables. ¡°Se merecen las mismas oportunidades. Hay muchas necesidades que atender y qu¨¦ mejor una persona que lo haya vivido¡±, explica la joven de 20 a?os.

Despu¨¦s de estudiar el Bachillerato, Laura curs¨® un grado superior de FP en Integraci¨®n Social, pero decidi¨® no quedarse aqu¨ª y dar el salto a la universidad. ¡°Quer¨ªa una titulaci¨®n m¨¢s alta porque te abre m¨¢s puertas y puedes decidir d¨®nde quieres trabajar¡±, se?ala. Aunque ten¨ªa casi un 9, la nota no le llegaba para entrar en la Universidad de Barcelona, por lo que tendr¨ªa que haberse trasladado a Girona, as¨ª que est¨¢ encantada con haber podido entrar en el programa. ¡°Los j¨®venes tutelados viven en una situaci¨®n dif¨ªcil donde a veces los estudios no son la prioridad, ni tampoco tienes referentes que hayan llegado a la universidad. As¨ª que esta es una oportunidad y una motivaci¨®n para los j¨®venes tutelados, que vean que su futuro puede ser diferente al que han vivido.

36.000 menores tutelados en Espa?a

En Espa?a hay casi 36.000 menores tutelados, de los cuales unos 8.500 est¨¢n en Catalu?a, seg¨²n datos del pasado mes agosto del Departamento de Derechos Sociales catal¨¢n. La mayor¨ªa de los casos, abundan desde el departamento de Infancia, han pasado al sistema de protecci¨®n por negligencia y desatenci¨®n de los padres (no recogen a los ni?os en la escuela o no les dejan la comida). ¡°A lo mejor no saben c¨®mo atender adecuadamente a sus hijos porque los padres tambi¨¦n vienen de entornos muy desestructurados¡±, apunta Cabanes. Tambi¨¦n hay casos de maltrato, abusos sexuales y abandonos. ¡°Los menores que acaban bajo tutela de la Generalitat con casos muy graves¡±, concluye la directora de Infancia.

Flavia lamenta que todav¨ªa hay mucho ¡°desconocimiento y prejuicios¡± sobre los j¨®venes tutelados. ¡°Si dices que vives en un centro de menores la gente se piensa que eres un delincuente. Y tampoco quiero que me tengan pena¡±, asevera la joven, quien admite reservas a la hora de explicar su situaci¨®n a sus compa?eros. ¡°A veces te dicen: ¡®No me lo hubiera imaginado¡¯. Y si lo cuento me da miedo que cambien su actitud, porque entonces no sabes si te tratan como te tratan por ser tutelada¡±, a?ade.

Hace un mes que Flavia empez¨® los estudios de Relaciones Internacionales en la Universidad Aut¨®noma de Barcelona (UAB). Al principio, admite, le cost¨®. Se levanta a las 5.30 para coger dos autobuses desde su municipio, Banyoles (Girona), hasta el campus. Y se le sum¨® la angustia de recibir el aviso de que le hab¨ªan denegado la beca, por un error administrativo. ¡°Los primeros d¨ªas fue agobiante, todo era nuevo, no conoc¨ªa a nadie, nuevas din¨¢micas¡­ Pero despu¨¦s de dos semanas ya me siento m¨¢s c¨®moda y empec¨¦ a hacer amigos¡±.

Asegura que de peque?a le atra¨ªan el Derecho y los abogados, pero despu¨¦s descubri¨® el ¨¢mbito de la diplomacia. ¡°Me interesa la relaci¨®n entre los Estados, los tratados, c¨®mo se inician las guerras¡­ Adem¨¢s, en las Relaciones Internacionales tambi¨¦n tienen mucho de Econom¨ªa, idiomas e Historia. Pero ahora estoy descubriendo la seguridad internacional y tambi¨¦n me atrae¡±. En un futuro no muy lejano, Flavia se ve en Barcelona, viviendo de forma aut¨®noma, sac¨¢ndose la carrera y pag¨¢ndose un m¨¢ster.

Laura solo lleva un mes en el campus, pero asegura estar encantada. ¡°Los profesores son muy emp¨¢ticos y tratan con delicadeza los temas. Adem¨¢s, es un m¨¦todo de ense?anza moderno, adaptado a las necesidades de la carrera¡±. Todav¨ªa no sabe en qu¨¦ trabajar¨¢, pero avanza que quiere colaborar con varios colectivos vulnerables. Se ve con un trabajo estable y un piso: ¡°Para ser feliz es clave poder dedicarte a lo que m¨¢s te gusta. ?Qu¨¦ m¨¢s se puede pedir?¡±.

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