?lex Garc¨ªa: "Me gusta sacar el lado macarra"

La semana pasada, un nuevo personaje se sum¨® al elenco de la serie de Telecinco Sin tetas no hay para¨ªso. "Soy el Moreno, de nombre y de piel", se present¨® ante la Vane, la amiga rehabilitada de Catalina. Y salieron chispas.

Detr¨¢s de aquella galanter¨ªa macarra de Jos¨¦ Moreno se esconde el joven actor ?lex Garc¨ªa, que cuenta que vino a Madrid desde su Tenerife natal con 17 a?os porque le "gustaba hacer el payaso". Pero despu¨¦s de su paso por la escuela de Cristina Rota le qued¨® claro que lo que quer¨ªa era interpretar en serio, y empez¨® un largo peregrinaje por las distintas alternativas de la actuaci¨®n. Particip¨® en Compa?eros, una serie adolescente muy "light, comparada con las tramas actuales", seg¨²n comenta, y en algunos cap¨ªtulos de varias teleseries nacionales.

Hasta el momento, este actor de 27 a?os ha encontrado su mayor ¨¦xito en el teatro, donde interpret¨® al hijo de Josep Mar¨ªa Pou, en la obra La cabra, uno de los muchos montajes en los que ha participado sobre las tablas. Pero ahora parece que ha optado por la televisi¨®n a tiempo completo: comparte su tiempo entre las grabaciones de Amar en tiempos revueltos y Sin tetas no hay para¨ªso, adonde ha llegado para convertirse en el nuevo colaborador de uno de los narcotraficantes m¨¢s atractivos del a parrilla televisiva, Rafael Duque.

Pregunta ?C¨®mo llega el Moreno a convertirse en el nuevo aliado del Duque?

Respuesta Estoy en el sur de Espa?a, con mi motaza haciendo carreras y entonces la banda me llama para que me encargue de llevar una tienda de motos. La han montado en el antiguo taller de Jes¨²s. El negocio es una tapadera de unos trapicheos que voy a hacer con El Duque. Pero El Moreno acepta porque tiene muchas ganas de tener una vida propia, no depender de la delincuencia, quiere tener una forma de ganarse la vida .

P. Entonces, ?no se siente c¨®modo en ese mundo?

R. No. Es un alguien a quien la vida lo ha llevado a donde est¨¢, pero si se hubieran dado otras circunstancias estar¨ªa al otro lado del juego. Es de personalidad d¨¦bil y si tuviera un poquito m¨¢s de fuerza vivir¨ªa legalmente y ser¨ªa muy bueno con las motos.

P. Vienes de hacer teatro, ?c¨®mo llegaste a Sin tetas no hay para¨ªso?

R. Pues gracias al teatro. El director de c¨¢sting, Carlos Manzanares, hab¨ªa visto mi trabajo en La cabra y me propuso para las primeras audiciones de la serie. No sali¨® entonces pero luego volvi¨® a rescatar mi nombre. La verdad es que es una suerte que un director de c¨¢sting te proponga y te proponga hasta que te seleccionen.

P. En el teatro siempre hab¨ªas hecho personajes muy sensibles. Parece que ahora, en televisi¨®n, te est¨¢n dando oportunidad de explorar su lado m¨¢s duro...

R. S¨ª, y me encanta. Porque yo no soy ni muy Billy (el personaje que interpretaba en La cabra) ni muy Moreno, por ir a los extremos. Tampoco muy Alfonso, porque el personaje de Amar en tiempos revueltos es igual. Todo el mundo me dec¨ªa que me iban a dar muchos personajes de bueno y me ofrecen dos macarras en el mismo a?o. Y est¨¢ bien sacar tambi¨¦n el lado macarra. No creas que se sufre menos, porque con el Moreno tambi¨¦n he sufrido. Aunque sinceramente no creo que vuelva a llorar tanto como con Billy, todo un acto hundido... es muy duro.

P. As¨ª que hacer de macarra te divierte m¨¢s.

R. Claro. Pero eso tambi¨¦n ocurre en la vida. Los malos siempre son m¨¢s divertidos. Igual los buenos son m¨¢s interesantes... pero para divertirse, los malos.

P. ?C¨®mo compaginas dos rodajes en televisi¨®n?

R. No los compaginas, te los compaginan. Es un dolor de cabeza porque m¨¢s de un d¨ªa he salido de una y me he ido a otra. Me he quitado en el coche las patillas del Moreno, el pendiente y la chupa de cuero y me he puesto la boina y el pelo para atr¨¢s para interpretar a Alfonso (su personaje de Amar en tiempos revueltos)... Un viaje de sesenta a?os, del 2008 a los 50, en una hora.

P.En tu opini¨®n, ?qu¨¦ tiene Sin tetas para haber arrasado la temporada pasada y mantener una audiencia tan alta en lo que lleva de la segunda?

R. El reparto es muy bueno. Y tiene unos directores que saben sacar lo que el p¨²blico le pide a una serie de estas caracter¨ªsticas, que es que haya buenas interpretaciones pero que los actores tambi¨¦n tengan una apariencia atractiva. Pero eso no lo logras s¨®lo con una cara bonita. He aprendido mucho en ese aspecto. Aqu¨ª por ejemplo te dicen 'no hagas ese gesto, que te queda raro'. Eso en otros sitios no pasa. Cuando te ense?an esas cosas comprendes c¨®mo se obtienen los buenos resultados: es cuesti¨®n de mucho trabajo.

P. Tu primer trabajo en televisi¨®n fue en Compa?eros, luego dejaste la tele un tiempo por el teatro y ahora has vuelto. ?Encuentras que el medio ha cambiado?

R. Creo que ha evolucionado mucho. Adem¨¢s me he reencontrado con viejos conocidos en las dos series. Y ahora se trabaja mucho mejor. La prueba est¨¢ en las tramas. La gente dice que F¨ªsica o qu¨ªmica es el Compa?eros de antes, pero sus argumentos no tienen nada que ver con los que hac¨ªamos nosotros. Antes no se atrev¨ªan a llegar tan lejos: ten¨ªas que medir mucho las palabras que usabas y no nos dejaban tocar mucho... no fuera a ser que saltaran chispas. Me gusta m¨¢s ahora porque la realidad es as¨ª.

P. ?Sientes que llegar a la serie del momento es una meta cumplida o s¨®lo un paso m¨¢s?

R. Es un paso m¨¢s. Yo pienso en mi carrera a muy largo plazo. Eso me ayuda a no rayarme mucho. Recuerdo que cuando hice Compa?eros todo el mundo me dijo 'ya ver¨¢s ahora, vas a cambiar...' y mi vida sigui¨® completamente normal y segu¨ª siendo muy feliz. Nunca se sabe cu¨¢ndo vas a subir, adem¨¢s ?subir ad¨®nde? Ahora hay repercusi¨®n, pero hoy est¨¢s aqu¨ª y ma?ana no hay ni entrevistas, ni tele, ni nada y no pasa nada. Y si no hay teatro, pues caf¨¦ teatro y si no mon¨®logos y si de eso tampoco hay, ya te inventar¨¢s algo. Eso es lo que tiene esta profesi¨®n de maravilloso. Y m¨¢s en Madrid, donde se puede hacer cualquier cosa.