Diario de la primera exhumaci¨®n con tutela judicial (d¨ªa 3)

Santiago Mac¨ªas, vicepresidente de la Asociaci¨®n para la Recuperaci¨®n de la Memoria Hist¨®rica (ARMH), relata para el ELPAIS.com el avance de los trabajos de exhumaci¨®n de dos fosas comunes en Santa Marta de Tera (Zamora), que se abren por orden de la juez de Benavente Tania Chico. Son las primeras que se exhuman en Espa?a con tutela judicial.

19.30. El arque¨®logo explica los hallazgos a los familiares. Los familiares de las v¨ªctimas han rodeado al arque¨®logo, Ren¨¦ Pacheco, que les est¨¢ explicando lo que hemos encontrado hoy y las expectativas que hay. Son bastante buenas. Ma?ana va a ser un d¨ªa muy importante porque seguiremos abriendo m¨¢s espacio alrededor de los cr¨¢neos que hemos encontrado. En breve llegar¨¢ el segundo turno de agentes de la Guardia Civil y nos iremos a descansar hasta ma?ana.

17.30. El anciano con las manos en la tierra. Acaban de llegar m¨¢s familiares de la otra fosa, la del grupo de los fusilados de Benavente. Y tengo aqu¨ª al lado a Tom¨¢s Carbajo, hijo de Baltasar, del grupo de Destriana fusilado en agosto de 1936. Tom¨¢s ha venido con un mono azul y est¨¢ trabajando en la fosa, apartando la tierra de lo que pueden ser los restos de su padre. Pero mejor os lo cuenta ¨¦l:

"Tengo 76 a?os, pero a¨²n puedo trabajar. Estoy ayudando a sacar los restos del que puede ser mi padre, pero lo har¨ªa igual si fuera el de otro. Me he emocionado pero no me ha dado pena, he sentido que estaba haciendo lo que se debe hacer. Yo ten¨ªa tres a?os cuando se llevaron a mi padre y mi hermana naci¨® tres semanas despu¨¦s de que lo mataran. Lo peor fue el primer d¨ªa, que parec¨ªa que no encontraban nada y nos fuimos un poco desilusionados. La juez tambi¨¦n estaba nerviosa, pero hoy estamos todos muy contentos porque parece que est¨¢n aqu¨ª, en estos tres cr¨¢neos que hemos encontrado. La juez es estupenda. Nunca hab¨ªa visto un juez as¨ª, est¨¢ muy preocupada por nosotros. A ver si se animan m¨¢s jueces, que vean que no pasa nada, que las fosas se abren, la gente se lleva a los suyos, y no hay de qu¨¦ tener miedo. A mi padre lo quiero llevar a enterrar con mi madre, en su pueblo, en Destriana. Me voy a ayudar otro poco m¨¢s".

16.15. Testimonio de un voluntario. Acabamos de volver de comer, y le voy a ceder la palabra en este diario a Marco Gonz¨¢lez, un administrativo que colabora con la Asociaci¨®n para la Recuperaci¨®n de la Memoria Hist¨®rica como voluntario desde 2006.

"Vengo de Ponferrada. He estado en unas seis exhumaciones, ayudando en lo que puedo. Tengo 28 a?os y hago esto porque mi abuelo muri¨® en las mismas circunstancias que los hombres a los que estamos buscando en estas fosas, y como a ¨¦l no le podemos recuperar porque no sabemos d¨®nde se lo llevaron, intento ayudar a encontrar a otros, para quitarle esa espinita que ten¨ªan clavada mi abuela y mi padre. Esta exhumaci¨®n no se parece a las dem¨¢s. La presencia de la juez lo cambia todo. Estamos acostumbrados a trabajar solos y alrededor de esta fosa hay un mont¨®n de gente que nos da mucho apoyo. A los familiares de las v¨ªctimas ya los conoc¨ªamos porque hemos hecho otras exhumaciones en esta zona y siempre nos preguntaban: ?cu¨¢ndo vais a sacar a los nuestros? Hoy por fin estamos aqu¨ª."

13.15. Un anciano escarbando en la tierra. Acabamos de vivir un momento muy emocionante. En realidad, dos. El primero, cuando ha llegado la juez. Todos los familiares de las v¨ªctimas la han rodeado para darle las gracias por lo que est¨¢ haciendo. Y el segundo ahora, porque el hijo de uno de los fusilados, un anciano, ha venido vestido con un mono azul de trabajo, y est¨¢ ayudando a retirar la tierra alrededor de los restos, de lo que pueden ser los huesos de su padre.

12.30. Visita del forense del juzgado. Acaba de llegar el forense del juzgado de Benavente para ver los cr¨¢neos que hemos encontrado. Creo que ya no hay ninguna duda de que estamos ante una de las fosas porque los cr¨¢neos est¨¢n muy juntos y no creo que en este pueblo enterraran a la gente de tres en tres. Ahora s¨®lo hay un arque¨®logo trabajando dentro de la fosa porque la zona es muy peque?a y el trabajo muy delicado. A¨²n no sabemos la direcci¨®n que llevan los huesos, dependiendo de eso, los restos podr¨ªan perderse bajo un pante¨®n que hay justo al lado, o seguir hacia la zona del campanario. En ese caso, podr¨ªamos recuperarlos enteros.

11.30. La emoci¨®n de Jos¨¦.- Os presento a Jos¨¦ Fern¨¢ndez Valderrey, nieto de Baltasar Valderrey, uno de los siete hombres a los que estamos buscando. Ha dejado su librer¨ªa en Pamplona en manos de su hija para venir a seguir la exhumaci¨®n. Est¨¢ muy emocionado...

"Yo me fui del pueblo antes de cumplir los 18 a?os, y entonces no se hablaba de esto. Ahora tengo 62. Hab¨ªa investigado la historia de mi abuelo, pero al llegar aqu¨ª, algunos vecinos, gente mayor, me ha contado detalles horribles que no sab¨ªa (se emociona), y los familiares de las otras v¨ªctimas tambi¨¦n: una hija que no conoci¨® a su padre, otro que se qued¨® hu¨¦rfano de padre con tres a?os... Mi madre ten¨ªa 11 cuando los falangistas fueron a buscar a mi abuelo. Estaba sola en casa y le hicieron llevarles al campo a por ¨¦l, que estaba segando. Y all¨ª la dejaron. Tuvo que volver sola a casa y cuando mi abuela volvi¨® de hacer compras en Benavente, se la encontr¨® llorando. Ya no lo volvieron a ver. Mi madre, que ya ha fallecido, no pod¨ªa parar de llorar cada vez que llegaba la fecha del aniversario (se emociona)."

"Y todo lo que me han contado aqu¨ª... no s¨®lo los asesinatos, los raptos, las matanzas... Tambi¨¦n, despu¨¦s, la humillaci¨®n, las miradas de los chivatos, de los falangistas. Estoy siguiendo la exhumaci¨®n con un nudo en el est¨®mago. Cada vez que encontramos algo, me da un vuelco el coraz¨®n. Y me conformar¨ªa con un solo hueso, un solo hueso de mi abuelo para poder llev¨¢rmelo al pante¨®n familiar y que descanse junto a su mujer y su hija, mi madre. S¨®lo eso. Imag¨ªnese buscar algo desde hace 73 a?os..."

10.30. Tres cr¨¢neos juntos.- "Acabamos de encontrar la mejor pista hasta ahora. Tres cr¨¢neos juntos. Est¨¢n en la segunda zona donde estamos trabajando, al final de la l¨ªnea de panteones. Todav¨ªa es pronto para ver los signos de violencia. Generalmente, es cuando llegamos al laboratorio y los reconstruimos cuando vemos, por ejemplo, los orificios de entrada hechos por arma de fuego. Acaba de llamarnos la juez y se lo hemos contado. Estamos contentos.

09.10. Vuelta al trabajo.- Hay operarios del ayuntamiento ech¨¢ndonos una mano con carretillos. Todo el mundo est¨¢ volcado en esto. Hoy es el d¨ªa grande de las fiestas de Benavente y la juez tiene que estar de guardia porque siempre pasa algo. Sueltan un toro... y a veces hay problemas.