Una explosi¨®n premeditada, con carta de amenaza

Con el codo a¨²n tiznado de negro, una mujer habla nerviosa por tel¨¦fono. "No s¨¦ donde nos van a realojar, t¨² come algo y ya veremos", le dice a su hijo sobre cristales y escombros. Es una de las 80 personas evacuadas esta madrugada al declararse una explosi¨®n presuntamente premeditada en un bloque de 11 pisos del barrio de Las Naciones en Sevilla. S¨®lo hay un herido con quemaduras en un brazo y dos intoxicados, pero seg¨²n los bomberos, "el incendio podr¨ªa haber sido catastr¨®fico".

Un vecino de 67 a?os, Rafael, lo dej¨® todo preparado para que ardiera lo m¨¢ximo posible. En el cuarto de contadores hab¨ªa una bombona y varias garrafas de gasolina, fue ah¨ª donde se produjo la explosi¨®n. Seg¨²n cuentan algunos vecinos, el hombre, que ha sido detenido en el centro de la ciudad a primera hora de la ma?ana, esper¨® en una esquina a ver la escena del incendio con una maleta y su perro, despu¨¦s huy¨®. Pretend¨ªa que se quemara todo el bloque, hab¨ªa colocado en los rellanos de las escaleras peque?os recipientes de gasolina abiertos, y en su piso, el 1? C, justo encima del cuarto de contadores, dej¨® seis bombonas de butano con los reguladores abiertos expulsando gas continuamente para una segunda fase de la tragedia.

"Era un perturbado", cuenta Joaqu¨ªn, uno de los desalojados. "Nos amenazaba a todos con que iba a hacer algo grave, se cre¨ªa que le rob¨¢bamos el dinero. Incluso nos mand¨® dos cartas amenaz¨¢ndonos", agrega. En el texto se puede leer: "Dejadme tranquilo, sino esto puede acabar muy mal. No ser¨¦ responsable de mis actos". El administrador del edificio ya le hab¨ªa denunciado judicialmente.

Seg¨²n ha informado la polic¨ªa, el detenido dej¨® en su cama 120.000 euros en billetes de 100 y de 50 euros, sin mayores protecciones. "Flipa t¨ªo, como en una pel¨ªcula", comentaba un chaval joven, entre decenas de vecinos estupefactos y algunos afectados que han podido entrar en sus viviendas a recoger sus enseres.

De momento no pueden volver a sus pisos, no hay ni luz, ni agua, ni gas. "No tienen condiciones de habitabilidad, pero realmente no le pasa nada a la estructura del edificio", asegura Luis L¨®pez Mateos, jefe del departamento de extinci¨®n de incendios. La pronta reacci¨®n de su equipo ha evitado que la tragedia no llegara a m¨¢s.

A lo largo de la ma?ana, Joaqu¨ªn toma conciencia de lo sucedido. "Ya nos dec¨ªa ¨¦l que cualquier d¨ªa har¨ªa algo gordo. Y lo ha hecho, pero menos mal que no le ha salido bien, sino, no estoy aqu¨ª. Somos muy afortunados".