"Si las hijas de Obama comen sano, ?por qu¨¦ yo no?"
Pol¨¦mica en EE UU por un anuncio que reclama una mejor alimentaci¨®n en los comedores escolares
"Si las hijas de Obama comen sano en el colegio, ?por qu¨¦ yo no?", se pregunta una ni?a negra en los carteles publicitarios colocados desde esta semana en el Metro de Washington. Este anuncio, que pide comida m¨¢s sanas en los comedores escolares, ha levantado una pol¨¦mica en ciertos c¨ªrculos en EE UU, aunque de momento, la Casa Blanca no ha hecho comentario alguno sobre el anuncio.
La ni?a que pone cara al anuncio se llama Jasmine Messiah, tiene ocho a?os, vive en Florida y va a un colegio p¨²blico, seg¨²n el diario Politico.com. La campa?a publicitaria est¨¢ pagada por el grupo sin ¨¢nimo de lucro Comit¨¦ de M¨¦dicos por una Medicina Responsable, que patrocina un proyecto de ley en el Congreso de EE UU para que haya m¨¢s frutas, verduras y opciones vegetarianas o con bajo contenido en grasas en los almuerzos que ofrecen las escuelas p¨²blicas. La ni?a del cartel, seg¨²n Pol¨ªtico.com, ha escrito a las hijas de Barack Obama, Malia, de 11 a?os y Sasha, de ocho, pidi¨¦ndoles que escriban al Congreso para que aprueben la ley que obligar¨¢ a dar de comer mejor a los ni?os en todas las escuelas.
Jasmine, que tambi¨¦n ha escrito ya a los congresistas, pide en su carta a las hijas de Obama que la ayuden porque "muchas escuelas", incluyendo la suya, "no ofrecen suficientes frutas, verduras y platos vegetarianos", seg¨²n Politico.com. El director de Estudios de Gobierno en el Instituto Brookings, Darrell West, ha destacado el riesgo que tiene utilizar a las ni?as del presidente en un asunto as¨ª. "Eso es especialmente relevante, en este caso, porque las hijas (de Obama) son muy j¨®venes" y porque la Casa Blanca, desde el primer momento, ha tratado de crear un escudo protector en torno a ellas.
En opini¨®n de West, ¨¦sta "no es la mejor forma de ganarse el coraz¨®n del presidente". Lo mismo opina el profesor de Comunicaci¨®n de la Universidad George Washington, Steven Roberts, quien subraya que el "mejor camino para conseguir algo no es enfadar a un presidente tan popular". En opini¨®n de Roberts, el asunto est¨¢ tan claro que "despedir¨ªa al organizador de la campa?a".
Las ni?as de Obama van a un colegio privado y exclusivo de Washington, el mismo al que fue Chelsea, la hija de Bill y Hillary Clinton. El presidente del comit¨¦ de m¨¦dicos que auspicia la campa?a, Neal Barnard, ha subrayado que "en la mayor¨ªa de las escuelas, los ni?os no tienen alternativa a la dieta con carnes, quesos y elevadas calor¨ªas que contribuye a la obesidad infantil y los problemas de salud". Barnard a?ade que "el Congreso debe intervenir fondos para que todas las escuelas, no importa cu¨¢n pobres sean, provean verduras, frutas, y opciones saludables sin l¨¢cteos".
De acuerdo con los Centros para Control y Prevenci¨®n de Enfermedades, una de cada tres personas nacidas en 2000 desarrollar¨¢ diabetes, enfermedad asociada al sobrepeso, en alg¨²n momento de su vida. Otros estudios han encontrado una tendencia creciente de exceso de peso y obesidad entre los ni?os, y un incremento sustancial del problema entre los hijos de inmigrantes.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.