"Pido perd¨®n a Nagore Laffage y a todo el mundo"
Yllanes ruega disculpas en su declaraci¨®n final al jurado
Jos¨¦ Diego Yllanes, acusado de matar el 7 de julio de 2008 en Pamplona a la joven irunesa Nagore Laffage, pronunci¨® ayer sus ¨²ltimas palabras en el juicio que se le sigue por esta causa para pedir perd¨®n a la v¨ªctima, a su familia y a toda la sociedad, con la que dijo sentirse "en deuda". Yllanes, juzgado en la Audiencia Provincial de Navarra desde el pasado 2 de noviembre, se enfrenta a peticiones de c¨¢rcel que van desde los 20 a?os que reclaman por asesinato las acusaciones particular y popular, a los siete a?os por homicidio que solicita su defensa. El fiscal, que inicialmente ped¨ªa 20 a?os, reclama que la pena se quede en 17 a?os y medio de reclusi¨®n.
Despu¨¦s de que el abogado defensor argumentase sus conclusiones finales, Yllanes hizo uso de su derecho a una ¨²ltima declaraci¨®n, que aprovech¨® para reconocer que "nadie tiene derecho a quitar una vida", una actuaci¨®n que le ofende especialmente, porque, como psiquiatra, se dedicaba a "ayudar a la gente para que viviera mejor". El acusado pidi¨® disculpas "a todo el mundo" y se puso en manos del jurado y "a los pies" de la familia de Nagore.
Su abogado, Eduardo Ruiz de Erenchun, expuso a los miembros del jurado una versi¨®n de los hechos diferente a la que se ha manejado durante el juicio. Asegur¨® que el encuentro entre Nagore y el psiquiatra en casa de ¨¦ste ¨²ltimo dur¨® unos 20 o 30 minutos y que la actuaci¨®n de Yllanes transcurri¨® en un lapso de tiempo "muy corto", por lo que neg¨® que hubiese alevos¨ªa en el comportamiento del acusado. El letrado sostuvo que la llamada al 112, en la que supuestamente la joven pidi¨® socorro, no la realiz¨® la v¨ªctima, sino el propio Yllanes para decir: "La acabo de matar, est¨¢ muerta".
Ruiz de Erenchun neg¨® que en este caso haya un delito de profanaci¨®n de cad¨¢ver, puesto que en la acci¨®n de cortarle un dedo de la mano no hab¨ªa una intenci¨®n de mofarse o faltarle el respeto a la v¨ªctima. Y respecto a las atenuantes, cit¨® la confesi¨®n del acusado como autor del crimen, la de arrebato u obcecaci¨®n porque en el momento cr¨ªtico hab¨ªa perdido la raz¨®n y la de intoxicaci¨®n por estar afectado por haber bebido alcohol, lo que a su juicio ser¨ªa compatible con llegar a casa andando y en aperente buen estado. Termin¨® su intervenci¨®n pidiendo a los integrantes del jurado que act¨²en "con libertad, racionalidad, prudencia, templanza y sin pasi¨®n".
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