Garz¨®n: "Las heridas que no se limpian se vuelven a abrir"

En el auditorio abarrotado de la prestigiosa Escuelas de Ciencias Pol¨ªticas de Par¨ªs, la famosa Sciences Po, el juez Baltasar Garz¨®n, antes de recibir un premio por la defensa de la democracia, empu?¨® el micr¨®fono y habl¨® por primera vez en p¨²blico desde que fue apartado de la Audiencia Nacional: "Las heridas que no se limpian se vuelven abrir". Y prosigui¨®: "Todas las leyes que apoyan la impunidad caen". Y agreg¨®: "A veces la justicia universal se topa con dificultades para no investigar cr¨ªmenes que no prescriben, dificultades en forma de olvido, perd¨®n o amnist¨ªa". Y agreg¨®: "Es compatible la memoria, la justicia y el resarcimiento a las v¨ªctimas".

El juez lleg¨® a las ocho de la noche al auditorio, que aplaudi¨® al recibirle, muchos puestos en pie. Ven¨ªa a Par¨ªs a recibir el premio de la asociaci¨®n de estudiantes "Joven Rep¨²blica" por su "defensa de la democracia en situaciones hostiles". El acto, planteado en principio como un coloquio sobre la justicia universal, acab¨® derivando en un homenaje entero al juez espa?ol. A su derecha se sent¨® el ex primer ministro franc¨¦s Dominique de Villepin, recientemente juzgado -y absuelto- por el caso Clearstream y a su izquierda el mundialmente conocido pintor Miquel Barcel¨®.

El joven estudiante de ciencias pol¨ªticas y representante de la asociaci¨®n que le otorgaba el premio subi¨® al estrado y se?al¨® que no le han dado la menci¨®n a un hombre "sino a un combate". Luego record¨® los logros de Garz¨®n "luchando contra el narcotr¨¢fico, el terrorismo, el terrorismo de Estado, ETA y el Gal, contra el propio partido con el que fue a las urnas y luego, contra la hipocres¨ªa referente a la memoria hist¨®rica". Y a?adi¨®: "Usted, se?or, es un s¨ªmbolo de la democracia en Espa?a, en Europa y en el mundo". Y concluy¨®, ya en espa?ol, con los versos de Antonio Machado, de "caminante no hay camino...". Pero el chico agreg¨® una frase: "Esto no ha terminado, se?or. Esto no ha hecho nada m¨¢s que comenzar".

Despu¨¦s, Garz¨®n subi¨® a la tribuna y cerr¨® el acto con un discurso breve en el que agradeci¨® el homenaje y volvi¨® a defender la labor de la justicia universal frente la impunidad, "que es la otra cara de la corrupci¨®n". Record¨® su persecuci¨®n a Pinochet y c¨®mo los dictadores "se saben impunes durante su mandato pero no en los tiempos que vienen despu¨¦s". Asegur¨® que hay lugares del mundo donde la justicia universal se ha impuesto pero que hay otros "en los que el pasado sigue siendo una cripta cerrada que impide el resarcimiento de las v¨ªctimas". Sonriente, aventur¨®: "Siempre que existe un juez independiente en cualquier lugar de la tierra hay razones para la esperanza". Y agreg¨®: "En el futuro, quiz¨¢ no haga falta unos Juegos Ol¨ªmpicos para denunciar la falta de derechos humanos en China, no exista Guant¨¢namo y Europa tenga el sentido integrador que todos le pedimos". Despu¨¦s, asegur¨®: "A veces, el esfuerzo de unos pocos cambia el curso de los acontecimientos del mundo".

Y a?adi¨®: "Soy juez, un hombre de derecho y para el derecho, como dijo Cicer¨®n, "un esclavo de la ley", pero no de la ley local, sino de la ley universal". Un aplauso cerrado dio por terminado el acto.

Garz¨®n, ovacionado en Par¨ªs